Capitulo 1

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Me senté nuevamente sobre mi motocicleta, apurando la bebida que aún quedaba dentro de la lata; suspiré largamente mientras veía como se empujaban Yoona y Sooyoung.

-Enserio ¿tienen que estar haciendo eso todo el tiempo? – Reclamé y me miraron ambas, deteniéndose al instante.

-¡YAH Yuri! – Me gritó Sooyoung, tome mi cabeza entre las manos.

-Soo, cálmate, no es un buen momento para que estén jugando con Yoona, creo sería mejor que fueran a buscar más bebidas. – Comentó Taeyeon, mientras encendía otro de sus insoportables cigarrillos, alcé la vista, mirándole furiosa. Ella volvió a mirarme con aquel pequeño cilindro pegado a la boca. - ¿Qué sucede?

-Deberías dejar de fumar, quieres ser cantante y eso no te ayuda en nada.

-¿De qué hablas? Esto es para relajarme – Me contestó, nuevamente toqué mis sienes, antes de encender mi motocicleta y acelerar, alejándome del trío.

El viento chocaba contra mi rostro, sé que había olvidado mi casco pero no podía negar que amaba mi pelo al viento, me detuve cuando noté que algo caía del cielo, con cierta rapidez, no sabía que era exactamente. ¿Eso era… un vestido? Un grito provenía ¿del vestido? Pues, los vestidos no gritan así que… vi como caía con fuerza al río Han. ¿Qué alma en pena podría caer al río? Nuevamente encendí el motor de mi motocicleta, cuando noté que salía del agua una mujer. Abrí mis ojos como platos, no había nadie cerca y ella no sabía nadar… espera ¿Quién en este tiempo no sabe nadar? Me bajé de mi moto, corrí y salte al río, nadando en su dirección, se movía desesperada dentro del agua. Le agarré de donde pude, intentando sacarla del agua. Así lo hice y le miré. ¿Por qué usaba vestido? ¿Era otra de esas locas que creen encontrar a su príncipe si saltan al agua? ¿Era una psicópata que buscaba que la salvara? Me puse de pie en seguida.

-¿Está demente? – Pregunté, ella me miró aún tosiendo, había tragado demasiada agua. - ¿Por qué se lanzó al agua?

-…Era la única forma de salvarme. – Respondió, volví a mirarle, extrañada por su respuesta. – Tú eres… mi salvadora y te ofrezco mi gratitud. – Se puso en pie, no lo había notado pero era muy hermosa, tomó mis manos entre las suyas, suaves y frías manos. Las solté rápidamente.

-¿Qué sucede contigo? ¿Estás loca? ¿Por qué me tocas así como así? – Me alteré, no quería reaccionar de mala manera pero… no soportaba que me tocaran. Me miró sorprendida.

-¿Eres… una mala persona? – Alcé una ceja extrañada. ¿Por qué hablaba así? – Lo entiendo… debo alejarme de ti, no quiero estar cerca de personas que me puedan lastimar. – Comenzó a avanzar a mi lado, sentí rabia y le agarré del brazo bruscamente. ¿Por qué lo hacía? - ¡Oye me duele!

-¡¿Crees que soy mala persona?! Te salvé la vida y ¿crees que soy mala persona? Yo debería estar preguntándote que eres, estás vestida como una… no sé qué… y pienso que estás bastante loca pero aún así también me duele que me digas mala persona. – Me miró con el ceño fruncido, se detuvo de forcejear. Su cuerpo ahora tiritaba, no lo había notado, con todas esas ropas y mojada como estaba, seguro pescaría un resfriado. – Está bien, está bien, discúlpame, no debí apretarte el brazo, pero debes venir conmigo, te llevaré a tu casa, ese disfraz tuyo está muy mojado y puedes pescar un resfriado.

-¿Qué disfraz? Esta es mi ropa habitual. – Comentó, le miré sorprendida.

-¿Tan loca estás para usar un disfraz todo el tiempo? O… es tu ropa del trabajo, si eso debe ser, trabajas en una tienda de disfraces, por eso usas ese feo vestido de princesa. – Exclamé sonriendo, ella seguía mirándome en silencio.

-Yo… no trabajo, además ¿tan feo piensas que es mi vestido? – Comentó bajando la mirada a su vestido – Pensé que una princesa debía usar tonos claros, así lo creíamos Tiffany y yo.

Finding LoveWhere stories live. Discover now