Capítulo 2

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La biblioteca estaba en el propio monte. Era un edificio medianamente grande, sin embargo nadie acudía a aquella biblioteca. 

Los dos chicos entraron y lo primero que vieron fue muchos libros, rotos, como si se tratase de un lugar completamente abandonado. Nadie acudía a ese sitio. Era muy escurridizo. No obstante, había un bibliotecario trabajando allí. Era sospechoso que solo él estuviera en ese sitio, y, que además, estuviese en tal lugar a semejantes horas de la noche.

Jack entró con seguridad, pese a su timidez, no tenía miedo a nada, pero Elisa le dio escalofríos ese lugar, por que el ambiente daba miedo. Lo primero que hicieron fue ignorar a aquel empleado, ya que los dos sospechaban de él. El hombre que trabajaba allí les miraba con desafío lo cual provocó aún más sospechas. 

Elisa rebuscaba por las estanterías, al igual que Jack, aunque él, por su afición a los libros, se paraba de vez en cuando para leer la contraportada de algún libro que le interesase.

-No te distraigas, Jack.-dijo Elisa.

-¿Qué es lo que se supone que debemos encontrar?-dijo Jack con timidez.

-¿Aún no lo has entendido? Hay que encontrar un documento que dice cómo murió mi antepasado Craig Smith, que era oficial del ejército inglés. -replicó amablemente Elisa.

El bibliotecario le dirigió una mirada bastante desafiante a Jack, que pareció haber oído algo sobre lo que le contaba Elisa y parecía saber algo del tema.

En aquel lugar reinaba la soledad y el suspense. Jack se atrevió a decirle algo al respecto al bibliotecario para intentar encontrar el documento, ya que llevaban media hora sin encontrar nada:

-Eh... Hola, ¿Usted sabe donde está el Documento Histórico de La Muerte de Craig Smith?- dijo con el corazón muy latente Jack. 

-Ehhhh..... No.... Me.... Me temo que no sé nada de eso jovencito.- proclamó el bibliotecario con una mirada sospechable.

-No me vacile, ya se que usted sabe algo del tema, cumpla con su trabajo.- reclamó con una cara segura Jack.

-Vale, espera que te lo traigo...-dijo aún más sospechoso el bibliotecario

El bibliotecario fue caminando lentamente. Se dirigió a una habitación cuya presencia nadie notó. Se trataba de como un almacén lleno de libros. Una vez ya había entrado, se dedicó unos quince minutos rebuscando entre los cajones para encontrar aquel dichoso documento. 

-Aquí esta. -dijo con cara de resignación el bibliotecario.

-Pero.... Esta...- no terminó las palabras Jack porque Elisa le interrumpió.

-¿¡Lo has encontrado!?- gritó Elisa en forma de pregunta.

-Si, pero está partido.-dijo Jack.

-No puede ser... ¿Dónde estará la segunda mitad del documento?- preguntño Elisa.

-Elisa, mañana vendremos a investigar a la biblioteca, si quieres te alojo en mi casa, tengo otra habitación vacía con una cama, la de mi hermano muerto. ¿No te importará dormir con su espíritu?-dijo vacilón Jack

-Oh, muchas gracias Jack, no, no me importa desde luego. Además tengo un par de cosas que contarte.- dijo Elisa.

-Vale, pero leamos antes el documento o al menos la mitad:

 Todos los varones de la familia Smith fueron militares. Incluyendo el padre de Craig Smith que fue coronel. Su trabajo era en Australia, donde estuvo varios años. Y, regresó a casa para estar destinado a morir en ella.  Resulta que el padre de Craig Smith al morir, le dio un testamento. El testamento era un cofre lleno de oro y piedras preciosas, pero había una en concreto que era muy famosa, se llamaba La Esmeralda de La Verdad. Dicha esmeralda la heredó su hijo.  Craig Smith ya regresaba de la guerra junto a sus compañeros, pero oyeron una bomba. Era un ataque terrorista, todos habían muerto menos Craig, que se supone que habría sido salvado por La Esmeralda De La Verdad. Después de esto le llevaron a un hospital donde fue acudido por una enfermera. En un asiento se encontraba una chica bastante guapa. La chica se llamaba Esther. Craig, supo que la amaba, y que, juntos formarían un futuro y una familia. Sin embargo tenía otro novio en ese momento, se llamaba Hector. Resulta que Esther tenía un diario en el cual anotaba todo lo que le pasaba. El diario nadie de momento lo ha encontrado. Aunque se dice que está escondido en la biblioteca secreta del puerto de San Sebastián.  Esther y Craig eran ya una pareja y vivían felices, pero no sabía nada Hector, algunas veces sospechaba. Entonces Hector le pilló y le dijo que si le daba La Esmeralda de La Verdad se podía marchar con Esther. Una simple esmeralda por el precio de una agradable mujer. No lo pensó, se lo dio sin más y se escapó con Esther. Aunque la parte final aún no es confirmada, se dice que después murió por. 

La Esmeralda De La Verdad. [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora