My Name

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El Dc. Clifford era especialista en psicología forense, neuropsicología y sexología. Tengo una sesión con él.

-Entonces ¿te llamas Lily?

-...

-Tienes problemas de conducta muy grabes, nunca has intentado escapar, te diviertes torturando psicológicamente a tus guardias y, sospecho, que también con tus antiguos psiquiatras.

-...

-No hablas con nadie y nadie puede acercarse a ti.

-...

-Eh sido informado de que hace varios días que tienen una relación tensa con un nuevo integrante. Cada vez que este chico se sienta en tu mesa a la hora de comer tú, de alguna forma, lo lanzas a la otra punta de la habitación burlando las cámaras.

El tono de voz del Dc decía claramente que no se creí ni una palabra.

-Yo no he tocado al nuevo, Dc.

-¿No?

-Nopodopo-cante con una sonrisita inocente.

-¿Qué relación mantiene con él?

-Ninguna-me sincere-ese idiota me trae sin cuidado.

Asintió. Anoto algo. Me miro. Anoto algo. Me miro. Hablo:

-Le haré unas preguntas y quiero que las responda con sinceridad.

-mmmm...ya lo veremos.

-¿Cómo te llamas?

-Ustedes me dicen Lily-sonreí, otra vez.

-¿Cuántos años tienes?

-Ustedes dicen que tengo 15 añitos-se me escapo una risita burlona, no intente disimular ni de taparla.

-¿Quiénes son tu familia?

-No tengo.

-¿Disculpa?

-Disculpado.

-Todos tienen familia, aunque no la conozcamos.

-Oh, yo la conocí hace mucho tiempo, pero está muerta para mí, ¿Lo comprende Dc?

-¿Por qué estás aquí?-siguió con el interrogatorio.

-¿No se lo dijeron?-pregunte sorprendida.

-Limítese a contestar la pregunta.

-Soy demasiado fabulosa e inteligente para estar suelta en la calle. Creí que todos lo sabían.

-¿Te relacionas con alguna persona? ¿Eres cercana a alguien? No hace falta que me digas su nombre, solo como es esa persona. Como te trata, que hacen juntos.

-Aun si tuviera a alguien para que realizáramos cosas ¿cree que se las diría? Su interrogatorio no va a ir más lejos que el de los demás...No, no me relaciono con nadie. No hablo con nadie. No soy cercana a nadie.

-Bien.

Asintió. Se cayó. Anoto algo. Me miro.

-Ahora volveré a repetirles algunas preguntas y quiero que me responda según lo que usted piensa, no lo que dicen los demás. ¿Entendido?

-Si así lo quiere, aunque no se lo recomiendo.

-Muy bien. ¿Cuántos años tienes?

-No lo sé, perdí la cuenta luego de los 3 mil.

Asintió, confundido. Por dentro me retorcía de la risa. El pidió sinceridad, y yo le estaba diciendo la verdad. Veamos cómo lleva el Dc. saber la pura verdad.

-¿Cómo te llamas?

-Mi nombre es Lilith.