Capítulo 26

247 5 1
                                    

(TN)~

-Ya veras que luego de diez días no querrás ni verme. - Reí.
- Yo creo que va hacer al revés, no querré dejarte ir. - Gianluca se acercó a mí para posar sus labios sobre los míos. - Dejaré tu valija en mi habitación. Luego tu, pon las cosas donde quieras. -
- No sacare nada, cuando use algo lo quitaré de la valija. -
- ¿Estas loca? Tu crees que yo dejaré que hagas eso. Mi closet es grande. Hay lugares vacíos. Ve y pon la ropa donde quieras. ¿Si mi querida (TN)?. -
-Bien. - Rodee los ojos. - Lo que tu digas mi amor. - Lo mire y el Sonrió.
- Así me gusta. -
Mi teléfono comenzó a sonar, era una video llamada entrante de Gina y la acepte.
- (TN)! Gracias por recordar que tienes dos mejores amigas que se preocupan por ti. - vi que también estaba con Mía.
- ¿De que hablan?. -
- Pues irte y dejarnos solas con los chicos. - Escuche a Mía.
- Pues yo no las veía muy aburridas. Menos a ti Mía. Por dios, las dejé solas con Ignazio y Piero. Al menos aprovecharon. Y luego les dejé un mensaje. No exageren. -
- Bueno, ya que lo mencionas. Ignazio me volvió a invitar a cenar y Piero a Mía. Por separado claro. ¿No es genial?!. - Grito Gina moviendo para todos lados su teléfono.
- Es asombroso! Luego saldrán en las revistas. - Rei.
- No eres la única suertuda. Tres amigas cumpliendo su sueño de seducir a los chicos de Il volo. - Bromeo Gina y Rei.
- ¿Fiesta virtual?. - Preguntó Gianluca abrazándome por la cintura y haciéndome asustar.
- Mire quien apareció el que nos robo a nuestra Mejor Amiga. - Dijo Gina en forma de broma
- Hay no puede ser.. - Suspire.
- Ah si y toda mía. - Dijo Gian abrazándome aún más y dándome un beso en la mejilla.
- La secuestraremos en tu ausencia ya verás.- Acotó Mía
- Bueno, si pueden. Porque por diez días será toda mía y vivirá acá conmigo.-
- ¿Que?. - Dijeron al mismo tiempo Mía y Gina.
- Así es. - Sonrió Gian. -
- ¿Cuando nos ibas a contar (TN)?. -
- Hoy...- Susurre.
- Indignada estoy indignada. - Escuche la voz de mía detrás de la pantalla.
- Hay por favor. - Rodee los ojos y Gian corto la Video llamada. - Gian. - Lo mire.
- Lo siento, pero no quiero que nadie nos moleste. - Sonrió besándome. Cuando sonó su teléfono y yo reí. - debe ser una broma. - Susurro agarrando su teléfono. - ¿Que sucede mama?. -
- Esa es manera de contestarle a tu madre. -
- Perdona, estaba... Ocupado. - Me miró.
- Siempre lo estás, pero descuida estoy acostumbrada a tener un hijo tan exitoso y con su libreta siempre ocupada. Donde tiene tiempo para todos menos para su madre. -
- Mama. ¿Es uno de tus reproches?. -
- No hijo, quería llamarte para saber como has estado y si quieres venir a cenar. -
- Estoy muy bien. - Sonrió guiñandome el ojo. - Lo siento hoy no puedo. -
- Lo ves. -
- Hay mama linda. En estos días iremos algún lado ¿Si?. -
- De acuerdo mi vida. Te dejo tranquilo. Adiós. -
Vi como dejo su teléfono sobre la mesa.
- Puedes ir acomodar tus pertenencias. - Acaricio mi mejilla.
- De acuerdo. - Me acerque poniéndome de puntitas y dándole un beso.
- Te prepararé algo. -
Sonreí y fui a su habitación. El mismo había acomodado su closet para que ponga mis cosas. Doble y acomode mi ropa, cuando termine deje mi valija a un costado. Volví con Gian.
- ¿Que haces?.- Entre a la cocina.
- Te dije que te prepararé algo especial . - Sonrió
- ¿Chocolate caliente?. - Pregunte mirando
- No es un simple chocolate caliente, tendrá malvaviscos, crema y unas cositas más. Mi madre me lo hacía cuando era niño. - Sonrió
- Ow, entiendo. - Lo abrace por la espalda.
- Pero si no te gusta puedo hacerte el fav... -
- Oh claro que no. - Sonreí agarrando el tazón de chocolate caliente. - Gracias. - Le di un corto beso y disfrutando de lo que me preparo. - Es delicioso y empalagoso a la vez. Me dará diabetes. - Bromee.
- Cada vez que tomo uno, me trae automáticamente miles de recuerdos de cuando era niño. - Sonrió. - Aunque mi madre los hace mejor. -
- Bueno, no probé el de tu madre. Pero el tuyo esta delicioso. Jamás he tomado algo igual. -
- Me alegra escuchar eso. - Me beso. - Ahora tus besos son aún más adictivos.- Río.
- y a mi me alegra estar aquí contigo. - Lo mire.
- Bueno será mejor que también me ponga a preparar para la cena de esta noche. Necesito que tu mama sienta que probó la mejor comida de la vida. -
- Seguro así será, todo lo que tocas o haces en segundos lo haces perfecto. -
- Y por eso también tengo una novia perfecta. ¿No?. -
- Mmm ahí no concuerdo contigo. - Rei
- Deberías. -
- ¿Porque?. -
- Porque deberías verte, eres hermosa por fuera y por dentro. Tan dulce y delicada. Divertida, compañera... Tienes unos rasgos tan bellos. Una voz angelical. Puedo describirte con totalidad perfección si quiero, como lo estoy haciendo ahora. -
- Yo veo lo mismo en ti. -
- ¿y crees que soy perfecto?. -
- Por supuesto. -
- ¿Entonces? ¿Ahora te ves perfecta?. -
- Yo solo te veo a ti. - Sonreí y el se acerco a besarme.
- Bueno iré preparando las cosas para la cena. -
- ¿y yo que hago?. - Lo mire
- Puedes ser mi ayudante especial. - Sonrió.
- Me gusta la idea. -
Comencé a ayudar a Gianluca con lo que me pedía y a la hora recibí un llamado de mi madre.
- Mama, hola. -
- Hola mi ciela. -
- ¿Sucede algo?. - Sentí la voz de mi mama bastante apagada.
- Es que... No se como decirte esto hija. -
- Mama me estas asustando.-
- Tu padre tuvo un Pre-infarto. -
- ¿Que?!. ¿Cuando? ¿Donde? ¿Ahora esta bien?. -
- Si mi ciela, no te preocupes. -
- ¿Como no quieres que me preocupe? ¿Donde esta?. -
- Estamos en el hospital. Hija tranquila. -
- Voy para allá. Pásame la dirección por mensaje . - Colgué.
- ¿Que sucede amor mío?. - Gian Se acercó preocupado.
- Mi papá tuvo un Pre-infarto.
Debo irme, lo siento mi amor. -
- Te acompaño. -
- No... Descuida. Yo te mantendré al tanto. Gracias. - Lo bese. - Te quiero.
- Llévate mi auto. Ten cuidado (TN), no vayas apresurada. -
- Si mi amor. - Volví a besarlo, agarre sus llaves y me dirigí para el hospital. Vi la dirección que me mandó mi madre y traté de ir lo más rápido posible sin escuchar la advertencia de Gianluca.
Cuando llegue estaba Mi mama y...
- ¿Nana?. - Sonreí y la abrace. - Por dios, pensé que nunca volverías.-
- No pasará eso mi niña. Estas preciosa. - Sonreí
- Mama. ¿Donde esta papa?. - La mire.
- Ven, vamos que te llevo a la habitación. -
Entramos al hospital y subimos treinta pisos. Lo tenían en la última Habitación, de hecho los últimos tres pisos son exclusivos y estaba en una de ellas.
Llegamos y vi a mi papá en aquella camilla. Rodeado de cables y esas máquinas.
No pude evitar llorar.
- Papa. - Susurre abrazándolo.
- Oh, princesa. - Se lo escuchaba con dificulta. - Le dije a tu madre que no diga nada. -
- ¿Estas loco? Soy tu hija. Debo enterarme. ¿Que sucedió?. -
- Nada, solo... Cosas sin importancia. Lamento todo lo que te he hecho pasar hija. Lamento ser un padre terrible y no ver tu felici... -
- Papa... Basta. Eso no importa, ahora lo que importa es que tu estés bien. -
- Pero no puedo estar bien si tu no lo estas. Es lamentable que me de cuenta de esto estando así. Pero ya no importa lo que pase con Ercole o Gianluca. Yo estaré de acuerdo en todo. - Agarro mi mano y la beso. - Mi gran tesoro. -
- Hay papa. - Lo abrace aún más sin poder evitar llorar. - Debes cuidarte más. ¿Que haré sin mi papá?. -
- Lo sé hija, lo sé... Y tranquila. Tendrás a este viejo gruñón por muchos años. -
- Eso espero. -
Justo en ese momento entró el médico.
-Lamento interrumpir pero el señor D'Angelo necesita descansar. -
- Si, de acuerdo. Me quedaré afuera por si necesitas algo. Te amo papa. - Volví abrazarlo y salí fuera de la habitación.
- Debo llamar a Gianluca. -
- ¿Para que?. - Pregunto mi mama
- Para decirle que no iré esta noche. Quiero quedarme con papá. -
- Hay mi ciela. ¿Lo dejaras solo?. -
- Papa me necesita. El lo entenderá. -
- Iré a buscar un café. ¿Quieres algo?. -
- No mama, estoy bien. -
- (TN), amor mío. ¿Como esta tu padre?. -
- Bien, esta descansando. Amm, Gian... Mi amor. No iré esta noche. ¿Sabes?. Quiero estar con mi papá. -
- Oh... Descuida. Lo entiendo, no te preocupes luego cuéntame como esta. - pude notar por su voz que estaba algo decepcionado.
- Te quiero. -
- Yo a ti amor mío. -
- Adiós Gian. -
- Adiós (TN). -
Colgué y justo llegó mi madre.
- Me siento mal. Esta noche iba a preparar una cena. - Lamento mi mama
- No te preocupes. Lo entendió muy bien. - Sonreí
- De igual forma, se lo recompensare. Es un buen chico. -
- ¿Donde está nana?. -
- Oh... Eh, tengo otra cosa que contarte. -
- Mama... - La mire.
- Vino hoy para ver como estaba tu papa y para presenciar su renuncia. -
- ¿Que? ¿Porque renuncio?. -
- Encontró trabajo allá donde se encuentra con su familia. Quiere disfrutar a su ñieto y pues acepte con gusto. Me parece una decisión que yo también de seguro tomaría.-
- No se... Despidió de mi. -
- Sabes que no le gusta las despedidas. Pero dejo un regalo para ti. Esta en casa. - Acaricio mi mejilla. - Deja de estar triste mi ciela.-
- Si.. Tienes razón. No debo estar triste. Salvo que papá esta delicado aún, de resto está todo más que perfecto. - Sonreí. - Bueno...lo estará. - Baje la mirada.
- ¿Que pasa (TN)?. -
- Gianluca dentro de diez días se irá de gira y durará más de cinco meses. -
- ¿Tanto?. -
- Si, lo extrañaré demasiado. -
- Hay mi ciela. - Me abrazo. - Veras que se pasará rápido. -
- Lo dudo mucho. -
- ¿No puedes viajar tu?. -
- No lo sé, espero que si. -
- Además. ¿Crees que el también podría soportar estar lejos de ti?. -
- Mm, Tal vez. -
- Que segura estas de lo que siente el eh. -
- Hay mama, mejor iré a buscar algo que tomar. -
Me dirigí a la cafetería.

GIANLUCA~

- Esto está delicioso!. -
- Gracias mama. - Sonreí.
- Es cierto, te luciste hermano. -
- Me sorprendió tu llamado hijo. - Comentó mi padre.
- Em bueno, cocine y nada. Simplemente quería que estuvieran aquí. En diez días me voy de gira y... -
-¿Ya? ¿Pero si no hace mucho que has regresado?. - Pregunto mi madre
- Si, lo sé. Pero bueno... -
- No te noto muy entusiasmo. -
- Si lo estoy papa. - Sonreí.
- Odio esta parte de tu carrera. - Exclamó mi mama.
- Luego de tantos años ¿aún no te acostumbras?. - Sonreí.
- Eres mi hijo, jamás me acostúmbrare tenerte tan lejos. -
- Será un anciano y aun lo harás sentir como un niño mama. - Bromeo Ernesto.
- No seas celoso. - Lo mire sonriendo.
- Es verdad hay mama para los dos. - Dijo dándole un beso en la mejilla a mi hermano.
- Mama. - Rodeo los ojos y comenzamos a reír. Cuando sentí que mi teléfono sonaba
-Disculpen. - Me levante de la mesa y me dirigí al living.
- ¿Hola?.- Pregunte
- ¿Me extrañaste?.-
- ¿Disculpa?. -
- ¿Ya has olvidado mi voz como suena a travez de la llamada? Si lo hacíamos diario... Darling. -
- ¿Que quieres Matilda?. -
- Te extraño. -
- Te he dicho que no vuelvas aparecer en mi vida. -
- No me aparecí. ¿Acaso me ves?. -
- Da igual Matilda. ¿Que quieres?. -
- Verte, estoy pasando momentos horribles Gian. -
- ¿Que sucede?. -
- No puedo decirlo por aquí. Necesito verte, que me abraces.-
- Matilda... -
- Bien... Al menos ¿Podemos vernos? Por última vez. Lo prometo. -
- Solo una última vez. - Suspire.
- Gracias. Luego te envío un mensaje cuando y a que hora. Aún sigo queriéndote Gian... -
Colgué y regrese a la mesa.
- ¿Todo bien hijo?. -
- Si papa, nada importante. - Sonreí sentándome.
- ¿Porque no está (TN)?. -
- Oh, su padre tuvo un Pre-infarto y fue a pasar la noche en el hospital. -
- Dios mío. ¿El está bien?. - Preguntó mi mama.
- Si, fue solo un susto. Pero obviamente debe cuidarse. -
- Que raro que no me has dicho nada Ercole.- Vi como mi mama miro a mi papa quien comenzó a ponerse nervioso.
- Pues, no lo sabía. - Vi como mi padre estaba incómodo. Era evidente que no le ha contado a mama sobre su problema con el negocio del señor D'Angelo.
- Bueno. ¿Quién quiere postre?. - Pregunte levantándome de la mesa y todos levantaron su mano.
Fui a la cocina y me volvió a sonar el teléfono. Era un mensaje de Matilda.

Matilda Estoy afuera de tu casa.

No puede ser. Lleve el postre a la mesa y les dije que tenía que ir al baño, pero fui a la puerta y estaba Matilda parada allí.

-Matilda. ¿Que haces aquí?. -
- Quería verte Gian. - Se abalanzó sobre mi y sentía su aroma... Su dulce aroma.
- ¿Que pasa Matilda?. -
- Mis padres... Solo pelean y pelean. Tu mismo recuerdas lo que padecía y lo que sigo padeciendo. Pero siempre estabas tu, quien eras mi gran apoyo. Te necesito. No aguanto más. -
Recuerdo perfectamente como solían discutir sus padres y luego desquitarse con ella y si... Era una pesadilla estar en esa casa.
La abrace y trate de tranquilizarla.
- Cálmate. ¿Si?. -
- Ahora si estoy bien. Necesitaba esto. -
Suspire y se que estaba mal lo que iba hacer.
- Ven pasa, no dejaré que te vayas así, luego de haber venido hasta aquí. Además hace frío. -
Matilda paso y vio a mi familia. La cual me miró extraño.
Se que lo que hice esta mal, Matilda es mi ex.
Apenas se me vino a la menta (TN). Prácticamente esto era una traición. Pero no lo sé, sentí solo la necesidad de ayudarla. En algún momento ella formó parte de mi vida durante dos años bien o mal.
- Em, hola Matilda. Que sorpresa. - Rompió el silencio mi madre.
- Hola Familia Ginoble. Que agradable verlos. Lo siento, no sabía que... Gian no me ha dicho que estaban.- Sonrió.
- De todas formas no te preocupes ya nos vamos. Todos debemos levantarnos temprano mañana. Adiós hijo. - Se acercó mi madre. - Luego me explicas que es esta barbaridad. -
Me despedí de mi familia y quede solo con Matilda.
Pésima idea. ¿Porque siempre debo ser el solidario, bueno e ingenuo?.
Por más que no sienta o haga nada con Matilda.
(TN) no merecía esto.

♡ Per te ci saró [Gianluca Ginoble & Tu] ♡ <TERMINADA>Where stories live. Discover now