— ¿Por qué no nos dijiste nada? ¿Por qué no dejaste que te acompañáramos? —Replicaba Hanna apenas con sus lágrimas.

—Lo siento—Comento Diana compresiva—Tenía que ir por Akko y no quería ponerlas en peligro.

—De todas maneras, debiste habernos dicho por lo menos, no es justo que solo partieras con O'Neill y las demás chicas a ese lugar.

—Lo sé y lo siento, no tenía opción, Lotte y Sucy son compañeras de Akko por lo tanto no podía impedir que ellas fueran, con Amanda fue demasiado insistente con el tema y tuve que aceptar dejarla ir con nosotras.

Hanna apretó más a Diana contra si sollozando—Por favor, quiero que me prometas algo Diana.

—Lo que sea, yo lo cumpliré.

—La próxima vez que quieras hacer algo arriesgado o que involucre tu vida, deja que sea participe de ello.

Diana abrió los ojos impresionada, luego los entre cerro sonriendo—De acuerdo, tú y Bárbara son unas excelentes brujas y serán las primeras en enterarse de mis futuros planes.

— ¿Es una promesa? —Aún continuando con el abrazo estiro su mano dejando el dedo meñique al descubierto.

—Promesa—Diana sonrió y cerró el pacto.

Por otro lado en los pasillos de la academia Sucy y Lotte se dirigían a la oficina de Croix, observaron unas cuantas alumnas pasar divertidas de asistir a sus clases, el ambiente en la academia ya no era el mismo y el flujo de magia esparcida era inmensa y poderosa, una que otra estudiante llegaban a sus clases convertidas en animales voladores, como águilas, halcones o petirrojos, otra preferían caminar de una forma curiosa transformadas en animales de cuatro patas como perros, gatos o lobos, resultaba interesante la libertad que se respiraba en los pasillos sin recibir regaño alguno por las autoridades académicas.

—Qué envidia—Dijo Lotte observando todo con una sonrisa entristecida.

— ¿Por qué envidia? —Bostezo Sucy.

—Akko hubiera soñado con esto, solo míralas divertirse con la magia, tal y como una bruja llena de pasión desearía.

—No te olvides que una vez que la traigamos de vuelta verá todo esto—Sucy sonrió dándole una palmada en el hombro a Lotte.

—Sí pero, Akko no podrá utilizar la magia jamás—Dijo Lotte desanimada.

—No te preocupes por eso, apuesto a que su sueño fue que la magia volviera a restaurarse, perder su magia no la detendrá de ser ella misma.

—Tal vez tengas razón—Lotte sonrió.

—Ahora lo vez, mira ya llegamos a la oficina de Croix sensei—Señalo con la cabeza.

Antes de entrar Lotte toco la puerta de la forma más educada y pregunto por Croix, a través de la puerta no se escuchó a nadie y por unos minutos esperaron, sin recibir una contestación ambas se adentraron a la oficina, sabían que anteriormente a Croix le fue asignada la habitación de Úrsula por lo tanto no les sorprendía en lo más mínimo su propietaria actual y temporal, miraron a los alrededores con expresión indescifrable hasta topar con la cama donde miraron dos bultos envueltos en las cobijas dando respiros profundos y relajados, ambas enfocaron su mirada en ellos sin comprender muy bien que sucedía.

—Oye Sucy ¿una pregunta? —Dijo Lotte llena de curiosidad.

— ¿Dime?

— ¿Por qué el cuerpo de Croix sensei es enorme? Y ¿Por qué respira tan extraño? —Se rasco la cabeza confundida.

Little Witch Academia FicWhere stories live. Discover now