¿Supermaniposa enamorada?

842 42 0
                                    

EN EL CAPÍTULO ANTERIOR

– Levante ya mismo lo que tiene en las manos – siento la voz de Arnold mas cerca que antes y ahora cuando levanto la vista lo tengo enfrente con una mano extendida

– Como quiera – le entregó el papel y lo ve como algo insignificante

– ¿Esto es lo que la divierte? ¿Una hora de horarios?

– No Arnold, no me divierte. – digo mirando el reloj faltando dos minutos para que toque el timbre – Me complace saber que luego de esta clase me toca otra con más gracia y llevadera que esta, donde ningún alumno se duerme o cuenta los minutos para que acabe su clase – me levanto y ordeno mis cosas guardándolas en mi bolso, apenas cierro el cierre de este toca el timbre – hasta la próxima clase Arnold...– Corro la silla y me dirijo a la salida, Camille me sigue fascinada con una sonrisa de oreja a oreja

– Que bueno que me  cambiaron a esta clase – reímos

– Conmigo las clases son más divertidas...

_______//

Durante el recreo me encuentro con Andrew por los pasillos estaba algo perdido, pero no geológicamente sino perdido en sus pensamientos lo cuales deben ser fascinantes ya que no deja de sonreír

– ¿Que haces? – le pregunto detrás de él, debo ponerme de puntitas porque me saca una cabeza, acerco mi cabeza a su hombro izquierdo y le hablo al lado de su oreja izquierda.

– Nada..– dice al girarse asustado luego me mira y frunce el ceño

– ¿Quieres no ir a clases? – le pregunto

– Hablas de ratearnos Smith? – se cruza de brazos y levanta muy notoriamente una ceja en forma exagerada como el emoji del monóculo, siempre me da risa cuando hace esa cara

– Si.. – suplicó – ¿Sabes a quien vi pasar por la entrada? – le pregunto y el niega – a Evans...– abre los ojos tan grandes que parece que se le salen y abre la boca sorprendido

– Esta vivo...

– Aja...y eso significa que debo compartir clase con el...– hago "berrinche" – yo sola porque Brooke tiene prueba de sonido – término de hablar y el sigue de brazos cruzados, le hago puchero para que ceda y suspirando acepta no ir a clases

– A donde vamos? – pregunta

-Te acuerdas nuestro escondite cuando estábamos en primaria? – asiente

– Ohh como olvidarlo, era genial – dijo entusiasmado

– Iremos – dije de igual forma."nuestro escondite" por así decirlo era un salón de computación viejo de la escuela donde antes cuando pequeños teníamos clases allí, nos decían que la puerta tras la cortina era decoración pero un día en primaria cuando nos castigaron, a Andrew por golpear a un nene con una cartuchera en la cara y a mí por córtale el pelo a una chica y pintárselo de verde. En mi defensa ella empezó con tirarme pintura violeta en mi cara.
Supuestamente nos iríamos al baño pero nos fugamos y terminamos en nuestro "escondite" a probar si era solo decoración o si había algo allí detrás.

Estábamos caminando por los pasillos luego de que tocara el timbre para ingresar a clases cuando con Andrew escuchamos una voz

– Que hacen fuera de clase?

Tuve miedo de que sea el director pero al darme vuelta hubiera deseado que lo fuera.

– Que te importa –respondí fría

-Yo me adelantaré – me susurró Andrew. Me apretó los cachetes y dio un beso en uno de ellos.

Andrew

– Que te importa – respondió desinteresadamente Ashley

-Yo me adelantaré- susurré 

Sabía que ambos debían hablar y aunque no me gustara el hecho de dejarla sola con él, debía hacerlo, al parecer Alexander no lo mato como yo pensé.

Camino al "escondite" una mano toma mi brazo impidiéndome seguir caminando, rogando en mis adentros que no sea el director doy media vuelta, mis ojos conectan con unos verdes, pelo rojo, tez blanca y una de las sonrisas más lindas que vi y a la que siempre mancho, golpeo o atropello.

Sasha, la chica que le dio un ataque de pánico en el baño, aquella a la que tranquilice y contuve, a la que le volqué una bebida en una fiesta, también a la que le tire el almuerzo por los aires hace un rato. En clase he podido  oír algunos chismes de ella, "La hija de un millonario, arrogante y creída. Esta con todos los chicos", no se si eso último es verdad, conocí de ella su parte sensible y me gustaría conocerla más .

Yo seguía sumergido en mis pensamientos,mientras nuestros ojos se seguían mirando, pestañeo rápido, como si me estuviera acostumbrando a la luz. Vuelve a sonreír y me dan ganas de sonreírle.

- Sasha, ¿Qué haces fuera de clases? - digo

- Te preguntaría lo mismo - dice riendo. Tiene una risa muy contagiosa.

- Nos estamos rateando- me cruzo de brazos y sonrió con picardía ella copia mi acción

– ¿Tu y quien más?

– Ashley

– ¿La chica que me presto la blusa? – asiento

– umm Que chicos tan rebeldes...– me rio por eso. Pasa por mi lado, se voltea y me sonríe – debo irme, yo si acudo a mis clases

La veo irse a su salón y como un idiota tildado en mis pensamientos reacciono cuando siento unos pasos aproximarse y comienzo a correr hacia el escondite.

Caminé los últimos pasos que me quedaban para llegar a la sala de computadoras que ya no se usa, allí, detrás de una cortina negra algo polvorienta y pesada que sirve para tapar algunas manchas de la pared, había una puerta de madera bordo. Cuando éramos niños nos decían que era de mentira, solo decoración que no intentáramos porque seria en vano. Un día un Andrew de catorce años y una Ashley de trece, hartos de incertidumbre y curiosidad por saber si era verdad que era decoración o que ocultaban algo detrás de ella, nos escabullimos en el recreo y intentamos abrirla, esta se abrió fácil, yo en ese entonces ya había empezado con el rugby y algo de fuerza tenía además la puerta ya estaba vieja y con unos tirones se abría.

Nos encontramos con los disfraces de obras escolares, con instrumentos viejos y anuarios de algunos profesores que habían venido al instituto. Cuando nos aburríamos veníamos aquí y nos armábamos guerras o musicales, planeábamos bromas y nos confesábamos cuando estábamos mal. Era nuestro lugar seguro. Nadie más que nosotros lo sabe.

Encontré los disfraces que antes no me quedaban por ser muy grandes y yo muy chico, no tenía nada que perder, no sabía cuanto tardaría Ashley y me estaba aburriendo.

Me estaba terminando de poner las hadas de mariposa para convertirme en un Supermaniposa cuando entra Ashley agitada , su cara estaba roja por correr, me mira confusa y ladea la cabeza.

– Lindo disfraz ...

– Gracias

– respóndeme algo Andrew – me dice y comienzo a prestar atención. Ashley es súper impredecible y nunca sabes con que te puede llegar a salir. – ¿Me parece a mi..o tú estás enamorado de la pelirroja a la que siempre le arruinas la ropa? – me atrapó

Me rasco la nuca nervioso y ella sonríe de oreja a oreja – Si..me gusta – comienza a dar brinquitos de alegria – no digas nada – me apresuro a decir

– ¿ni a las chicas?  – deja de saltar

– Ni a las chicas – frunce el celó enojada

– no eres muy bueno ocultando lo que te pasa con Sasha así que lo sabrán de todos modos

– Lo se...
















Capítulo editado 🫶🏼

Princesas con P de Perra.  (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora