ειз • ειз • ειз • ειз • ειз • ειз • ειз

En Italia el mejor sicario del mundo se encontraba de nuevo en su medio natural, acatando órdenes del Noveno y eliminando gente indeseable para los Vongola y alguno que otro obstáculo para la generación venidera. Su último trabajo le había tomado casi un mes pues se tuvo que infiltrar en una familia enemiga que no solo planeaba atacarlos sino también el hacer fraude con unas negociaciones y dejarles como culpables de la trata de blancas que ellos hacían. Eliminando el moreno a las cabezas más importantes y por supuesto al jefe, dejándoles pistas a la policía italiana para rescatar a niñas y adolescentes del sudeste asiático y capturar a algunos peones.

Al regresar de la misión Timoteo pidió hablar con él en cuanto llegara y al ser divisado primero por Coyote le dio el recado de su jefe, este con algo de prisa y tratando de lucir lo más presentable se dirigió a la oficina principal.

"Nono en cuanto me entere vine para acá" haciendo una leve reverencia

"Reborn no te preocupes por formalidades" como subordinado era muy atento "¿Cuándo volverás a Namimori?"

"Como debe de saber deje a alguien calificado para cubrir mi ausencia" acaso el anciano pensaba ordenarle volver "Creo que un cambio de aires le vendrá bien a Tsuna"

"Es cierto, ha crecido en muchos aspectos" aunque faltaba pulirlo un poco más para que fuera todo un jefe "Entonces seguirás bajo mis órdenes directas y cuando creas pertinente regresa con él"

"Así se hará Nono" aceptando la encomienda "daré mi reporte de la misión más tarde, todo salió perfecto"

"Es buena noticia" quería dejarle el camino lo más libre al japonés cuando tomara el liderazgo de la famiglia "Puedes irte a descansar y avisaron que más tarde tendrías un invitado"

"¿Un invitado?" definitivamente no era ninguno de sus pupilos pues no sabían su ubicación actual "En ese caso me retiro"

Quien sería la persona que vendría a verle, lo mejor sería comer algo y darse un largo baño; quizá invertiría ese orden sentía que olía a sangre. Llegando a su dormitorio donde gozaba de todos los servicios opto por llamar a una mucama y pedirle algo de comer, así como de llevar sus ropas a la tintorería mientras se daba una ducha, accediendo la mujer al pedido. Ataviado de un traje limpio en color café oscuro y dispuesto a empezar a comer, tocaron la puerta y dio el permiso para que entrara.

"¿Cómo has estado? Kora" esa era su flamante visita

"Me dijeron que venias a verme" aunque no sabía que era el exactamente

"Si, de hecho, vine a ver al Noveno también" preguntándose el motivo de su visita

"¿A qué debo el honor?" empezando a disfrutar sus alimentos

"Vengo a invitarte a mi boda con Lal, kora" no esperaba eso, al menos no tan rápido "no queremos desperdiciar más el tiempo" ya que tenían una segunda oportunidad la aprovecharían y sería esposos en un mes

"Felicidades" no se le ocurría que más decir "¿Y dónde será?"

"Lo hemos pensado y será en Toscana" a pedido de su prometida "haremos la celebración religiosa y una gran fiesta, kora"

"Estaré ahí, quieres que sea el padrino" sabía que le pediría el favor

"De anillos, kora" sonriendo felizmente "¿podrás o tu cuenta bancaria está en ceros?" molesto un poco

"Mi cuenta bancaria tiene el doble de la tuya" sonriendo autosuficiente "te ayudaré en lo que pueda" seguramente el Noveno le daría el permiso

"Cambiando de tema, creí que seguías con Tsuna" fue raro saber que se encontraba en Italia

Rainy SpellWhere stories live. Discover now