1° El Inicio De Los Elementales [Editada]

Capitulo 30: Habilidad nueva

CARTER:

Salí tarde debido a mi localización en la azotea por mucho tiempo; estar solo lo consideraba lo mejor de cuando de placeres en la vida se trataba, puesto que, me permitía hacer casi todo lo que quiera y aquella regla también se relacionaba a mi elemento, evidentemente sin crear mucha conmoción.
Volví dentro se la institución y se hallaba en completo vacío, pero mi percepción solo se centro en la ausencia de los profesores.
Anduve hasta las escaleras y repentinamente una sustancia espesa comenzó a descender desde mi cabeza; al girar sobre mis talones, vi a Erick con una cubeta vacía; quien no espero para correr al primer piso, pasando por mi lado. Lo seguí furioso con el solo propósito de vengarme.
Algo en mi anatomía se sentía diferente, estaba cambiando; sin proponérmelo, exteriorice fuego por todo mi cuerpo, experimentando ligereza y auxilio en mi velocidad. Percibí el rastro de llamas que dejaba en el transcurso.

En evidente ventaja, lo detuve del cuello y levantándolo levemente del césped, en el patio.

-Te haré pagar -Mi voz fue gélida y mezclada con mordacidad, este comenzó a temblar. Una circunferencia reanudo a rodearnos a ambos en el suelo de mis habilidades.

Raquel hizo presencia súbitamente y al hacer un intento por prolongarse, fue derribada por la incandescencia del alrededor; solté al castaño, importándome poco su paradero y me aproxime a la de orbes caoba, que me observaba con aturdimiento.

-Raquel ¿Estas... Bien? Y-yo lo siento mucho -Enuncie denotando honestidad acerca de mi angustia al mirar sus ojos, ella desvío sus iris y se incorporo; quería ayudarla pero me contuve.

- ¿P-por que hiciste eso? -Cuestiono y exhale descomunalmente; con la intensión de tardar en responde.

-Esta prohibido decirlo -Conteste y frote mi nuca -Aunque... Puedo hacer una excepción -Esbocé una sonrisa serena. Produciendo  que me olvidara por completo de Erick. Indagué en su búsqueda con el resultado de que se había escapado -Te acompañare a casa y... Te diré lo necesario -Acepto con un seriedad y nos desplazamos.
No imaginaba lo que en este momento acontecía en su cabeza y eso causo inseguridad en mi.
Un fragmento del camino se mantuvo en silencio hasta que ella lo suprimió.

-No pensabas hacerle nada a ese chico ¿cierto? -Negué a su incógnita.

-Dejare en claro, que no estaba totalmente consciente de lo que hacia -Medite lo siguiente que diría -Sin embargo; no, no tenia planeado dañarlo gravemente -Tenia un pugna conmigo mismo y oscilaba si ser franco con ella; no obstante, inusualmente le tenia suficiente confianza para hacerlo pero, informar de algo así... Limitaba cualquier cosa aunque... -Imagino que tendrás conocimiento de los elementales -

-Si; hay muchas relatos de ellos -Había un enigma en su tono que no pude decodificar.

-Son ciertos; si existieron, existimos -Se escuchaba tan irreal que y si yo fuera el receptor de aquello, no lo crearía. Pese a eso, preservaba como argumento el uso que di de mis poderes.

-Te refieres que tu detentas de el "Control del fuego" -Creo comillas con sus dedos en cierta la frase

-¿Por qué lo puntualizas así? -

-Porque honestamente; tenias todo menos el dominio -Pensó y note que lo hizo repetidas veces durante la conversación y la acreditaba. Las personas no frecuentan hacer este tipo de revelaciones.

-Eso me ofendió pero tampoco tengo como objetarlo -Admití y ella levantó sus comisuras -No tienes... ¿Temor? -Pregunte vacilante, si de verdad ansiaba por la respuesta.