Si nada de lo anterior funciona...

Comenzar desde el principio
                                    

-¿Que...qué estás haciendo?

-¿Que parece? Te estoy besando baka teme.

-¿Pero...cómo? O más bien, ¿Por qué? –Sasuke estaba aún más confundido que al principio

-¿Me detengo? –dijo el rubio sonriendo de medio lado

-....no...

Y con esa respuesta volvió a besarlo, ¿Confundido aún? ¡Si, pero que importaba! ¡Naruto lo estaba besando eso era mil veces más importante que sus confusiones! Así que prefirió disfrutar del momento. Después de unos segundos se separaron.

-Así que...estas enfermo teme, el perfecto Sasuke Uchiha se descuido y ahora tendré que cuidarte.

-...-Ni si quiera podía hablar, su mente todavía trataba de procesar todo lo que acababa de pasar.

-Te estoy hablando Sasuke, ¿O te quedaste sordo también?

-Jum. Si tanto te molesta puedes regresar a tu casa no tienes que cuidarme –Aunque aparentaba estar enojado tenía una sonrisa boba en el rostro.

-Yo nunca dije eso. Siendo así...-Se sentó al borde de la cama para luego recostarse al lado de Sasuke

-¿Que estás haciendo? –sus mejillas se habían sonrojado debido a la cercanía.

-¿Otra vez esa pregunta? ¿Que no es obvio?

-Ya se que es obvio idiota pero aun así...

-Seguramente no te gusta compartir tu espacio con nadie pero el calor de otro cuerpo te hará muy bien para ese resfriado.

Es como si hubiera leído su mente...justo iba a pedirle una explicación de sus actos, y si, lo admitía, ¡No podía sentirse más feliz en ese momento! Pero...había algo que lo inquietaba, desde que llego pudo notar una sonrisa especial en el rostro de Naruto y no podía evitar preguntarse porque lo hacía, normalmente su expresión era boba como su sonrisa pero esta tenia algo diferente.

-¿No tienes frio?

-¿Ah? –eso lo había sacado de sus pensamientos- Mas o menos.

-Solo quería saber porque puedo ayudarte al respecto

¡Y la siguiente acción por parte del ojiazul lo dejo mucho más confundido! Se había acercado mucho más a el hasta...¡Abrazarlo! Lo sujetaba firme pero delicadamente, ¡Como siempre lo había soñado! Si, gracias a ese pensamiento se sintió por un momento como una chica, quizás el leer tanto la estúpida revista hizo que su mente quedara verdaderamente aturdida.

-¿Así está mejor?

- ...si...

Respondió casi inaudible, por supuesto, aún estaba inquieto ya que el aún tenía esa sonrisa, ¿Que le causaba tanta gracia? ¿O porque se sentía superior a alguien más? Realmente quería saberlo pero...el estar tan cerca de aquel que tanto amaba borraba cualquier pensamiento de su mente, y por supuesto la enfermedad también ayudo para que se quedara profundamente dormido en brazos del contrario.

No supo cuantas horas había dormido pero lo que si veía era un par de ojos azules que lo observaban con detenimiento y de nuevo con esa estúpida sonrisa en su rostro.

-Buenas noches solecito, ¿Dormiste bien?

-Deja de decirme asi imbecil.

Eso lo había inquietado un poco, no esperaba levantarse con el tan cerca y menos si tenía esa expresión en su cara, no es que no estuviera feliz por ello al contrario, era como un sueño hecho realidad pero algo estaba mal en todo ese asunto y tenía que averiguar porque.

-Te habría hecho algo para comer pero parecías tan tranquilo y tan cómodo que no fui capaz de apartarme –dijo manteniendo su sonrisa

-Ya me siento mejor así que déjame a mí hacerlo

-Esta bien –coloco sus manos en su nuca, acomodándose de esa forma.

El moreno salió de la habitación y por inercia llego a la cocina...estaba tan confundido con lo que estaba pasando. ¿Por qué Naruto actuaba así? Y esa sonrisa...que no le molestaba en lo absoluto pero creía conocerlo lo suficiente para saber que algo tramaba.

Tan rápido como pudo se hizo algo rápido no es como si tuviera tanta hambre y subió a su cuarto de nuevo...con una imagen que sencillamente no esperaba encontrarse: la misma ropa que había usado antes buscando provocarlo ahora era el dobe quien las usaba, al parecer el tiempo que estuvo en la cocina fue más que suficiente para que Naruto se levantara, buscara en su armario esa ropa en específico y se la colocara...ahora se encontraba mirándose al espejo.

-No son de mi talla pero...creo que me quedan bien, ¿No te parece? –dijo girándose para que lo mirara

Lo único que pudo hacer Sasuke fue asentir con la cabeza...porque la verdad era, que todo eso le sentaba mejor que a el mismo y eso nada ni nadie lo podía negar, le quedaba un poco mas holgada pero la camisa dejaba descubierto uno de sus hombros y bajaba mostrando su piel, eso era demasiado.

-¿Ya estas comiendo? -Ante esa pregunta Sasuke solo asintio, no pudo decir nada mas.

Como al parecer se estaba volviendo costumbre entre ellos, comían en silencio...es decir que era el momento, como de costumbre también, de aplicar el último consejo en el que estaba depositando todas sus esperanzas, solo que esta vez había que ser más directo

-Naruto...¿Alguna vez te has preguntado lo que pienso de ti?

-Pues, somos amigos ¿Verdad? ¿Hay algo mas que deba saber?

-Si hay mas...-Reuniendo el valor que había adquirido desde que empezó toda esa locura tomo la mano del rubio- Es posible que yo sienta algo especial por ti

-¿Lo dices en verdad? –Naruto imitó su movimiento- Porque yo también –volvió a sonreír-

Definitivamente a él nada le salía bien, Se supone que debería haber apenado a Naruto y lograr que este le preguntara más del tema y así quizás declararsele pero...¡Sencillamente no esperaba esa respuesta! ¡Y con esa sonrisa era difícil saber si hablaba en serio o solo jugaba con el!

-Este no es uno de tus juegos usuratonkachi estoy hablando en serio.

-Yo también hablo en serio, ¿O es tan difícil creerme? Porque puedo demostrarlo.

Y antes de que tuviera tiempo para reaccionar estaba siendo besado de nuevo, por supuesto, ¡Si! ¡Lo disfrutaba! Pero...pero...¡Ni siquiera sabia porque se quejaba! Nuevamente se separo del rubio.

-Yo...tengo que...-ni si quiera se molestó en terminar su frase, solo recogió unas cuantas cosas y salió del cuarto tan rápido como pudo, entre ellas por su puesto, estaba la revista

Salio al pasillo y se alejo tanto como pudo de su cuarto.

-¿Cuál es tu problema? –Tomando la revista entre sus manos, si, ahora le estaba hablando a un articulo de lectura- ¡Dijiste que todo esto servía para seducir al 90% de los hombres pero no! ¡Resulta que a quien yo quiero es el hombre numero uno en sorprender a las personas! Seguro no tenías previsto eso ¿No es verdad? Y apuesto a que no hay una sección que te diga como reconocer el comportamiento del hombre que te gusta ¿Cierto? ¡Esto me gano por poner mi confianza en una revista para mujeres siendo hombre! ¿En qué demonios estaba pensando?

Pero antes de que pudiera seguir hablando con la revista como lo haría una persona perfectamente cuerda...una mano sobre su hombro lo hizo petrificarse.

-¿Quien dice que eso no funciona? Funciono contigo, ¿O me equivoco?

¡Mierda! No queria darse vuelta, sabia de sobra quien estaba a sus espaldas. Ahora no había duda. ¡Definitivamente dios lo odiaba!

-Te atrape Sasuke teme.

Como conquistar al chico de tus sueños en 5 pasosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora