Parte # 3/3

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Él puso la pizarra en el carrito y salió, pasados unos minutos regresó con una silla de ruedas, se aproximó a Helen y empezó a desabrochar las correas de la cabeza y la cintura (pues ya no usaba las de los brazos y piernas), la levantó, la acomodó en la silla y empezó a empujarla hasta salir de la habitación, se dirigió por el pasillo hacia la izquierda, pudo observar que habían más habitaciones como la suya, fue por la derecha, en un segundo pasillo hasta dirigirse a una puerta bastante ancha, de metal y con una ventanilla. Él se detuvo y la abrió, cuando entraron, todo el suelo, como las paredes y el techo estaban cubiertas por azulejos blancos, sucios, con grietas y algunos rotos. Justo en frente habían dos puertas igualmente anchas y con ventanillas, en una de ellas se podía apreciar que la luz estaba prendida y que habían personas ahí. Él posicionó la silla en medio de la habitación.
  - ¿Me vas a decir?
  - Sí.
Era la primera vez que escuchaba su voz, no era gruesa o profunda como ella esperaba o almenos no como la imaginaba, si era gruesa pero era femenina.
  - Verás...- Empezó a hablar- Todos los procesos por los que has pasado han cargado con un propósito bastante importante, o almenos para nosotros. Eres una de las primeras en esta... ¿cómo decirlo...?¡Resurrección! Será difícil para tí asimilarlo pero... - Empezó a sacarse la máscara. Se dió la vuelta para dejarla en una esquina, ¿usaba algún tipo de casco? Su cabeza parecía cubierta por un material extremadamente extraño, nunca había visto algo igual- ...eres un gran paso a la regeneración de nuestra especie.
Se desvistió por completo. Helen no podía creer lo que veía. Un ser... difícil de explicar, en pocas palabras, hermoso, humanoide pero claramente no era humano, una figura tan sutil que emanaba perfección si le hubieran pedido una descripción a Helen es todo lo que hubiera dicho, "Hermoso". ¿Es que acaso ya había muerto? ¿Estaba ante la prescencia de un ángel? ¿Acaso tanto tiempo en el calvario silencioso le había hecho perder la razón?
Ella prefería la última opción. Pero era tan real, de alguna manera sabía que no era una alucinación.
  - Como habrás notado no pertenezco a la Tierra, nuestra civilización está casi extinta, nuestra sed por saber más y los constantes experimentos y elaboración de diferentes armas, nos llevó a nuestra destrucción liberando un virus letal, acabando con casi todos los seres reproductivos de nuestra estirpe quedando solo unos seis, bueno actualmente, un par, y están muy débiles, por mucho tiempo hemos estudiado diferentes planetas y ecosistemas siendo el suyo el más apto para la regeneración de nuestra sociedad, claro que todavía hay factores tóxicos para proseguir, pero nada grave, o almenos no para nosotros, pues al paso que ustedes van... no le queda mucho tiempo a su planeta y no han evolucionado lo suficiente para emigrar a otra galaxia, pero es tiempo suficiente para nosotros hasta que encontremos otro hábitat uno estable, no como éste. Pero necesitamos incrementar nuestra población para poder seguir adelante, ahí es donde tú entras, otra razón por qué escogimos este lugar. Es porque la anatomía pero sobre todo el útero humano son muy similares a los que poseían nuestros seres reproductores, por eso las necesitamos tanto. En la primera fase te inyectamos óvulos fértiles nuestros, en la segunda te tuvimos que extraer costillas ya que éstas impedían que el útero se estire lo suficiente para que puedan entrar tres fetos sin complicaciones, en la tercera y cuarta fase te amputamos las extremidades, pues al estar éstas en contacto con más superficies que las otras partes del cuerpo desarrollan un pigmento a lo largo del tiempo en el que resguardan ciertas bacterias que aún son muy tóxicas para nosotros y más aún para un recién nacido que tiene las defensas bajas, la quinta fase consistía en una extracción de tu intestino delgado y los riñones para que no fueras a expulsar desechos durante la séptima fase, pero era bastante dolorosa para tí no lo soportarías y de seguro morirías, la cancelamos pues te necesitamos con vida, en la sexta fase te incorporamos nuestros espermatozoides para fecundar a los óvulos. Y ahora toca la séptima, hicimos unas pruebas y por lo visto... no sobrevivirás, ya que no podemos realizar una cesárea porque la piel de tu abdomen está muy delgada y delicada...
Hasta ese momento no se había percatado que, en efecto, su barriga era enorme, estaba morada y bastante estirada.
  - Necesitamos que sea un parto natural.
Helen estaba atónita, cuestionando nuevamente la realidad de la situación ¿Seres de otro planeta la habían secuestrado?
  - ¿Y mi bebé?
  - Nuestros fetos se alimentaron de él durante la gestación.
Helen se destruyó por completo. El que hayan asesinado a su hijo incluso antes de haber nacido fue un punto y final para ella.
  - ¡Son unos malditos!- Rugió entre lâgrimas.
  - Es hora de la séptima fase.
  - Cállate.
  - Lamento decirte que no tenemos tiempo, debemos proceder.
  - ¡No!
Aquel ser se acercó a ella y rodeó su rostro con sus manos. Increíblemente Helen detuvo el llanto y sintió una tranqulidad maternal.
  - Entiende, tú serás parte de algo grande, te lo deberemos, a todos ustedes, gracias. Es hora de seguir con la extracción de los fetos.
Helen escupe en el rostro de la humanoide.
  - Púdrete.
La que sería la nueva gobernante de la Tierra se pone de pie, firme. Entran dos seres vestidos con batas de doctor, uno de ellos sosteniendo una jeringa que clava ágilmente en el cuello de Helen, posteriormente su acompañante toma la silla de ruedas, la dirige al interior de una de las puertas mientras Helen grita y la que había sido su discreta compañera y cirujana, soberbiamente la observa entrar.

FIN.

Paradise City - GUNS N' ROSES

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⏰ Last updated: Sep 04, 2017 ⏰

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