Me equivoqué, lo admito. Te creí el amor de mi vida, mi príncipe perfecto y solo eras un cuento. Pero esta vez sin final feliz, de esos de juntos para siempre o vivieron felices y comieron perdices. Simplemente, tú eras más de pescado y yo nunca le encontré sentido al refrán. Tal vez por eso congeniábamos. No queríamos ser los protagonistas de un romance a lo Cenicienta y el Príncipe azul, que ni nombre tenía. Y tú te acostumbraste a implantar el tuyo de primero. Te creías el rey y te enamoraste de una doncella, para tratarla como sirvienta. Y ya no soporté bailar más al son de tu música. Y el cuento se volvió pesadilla, a ratos detenida por la dulzura de tu sonrisa. Y entre cabreo y cabreo adoraba sentir en mi piel tus besos. Esos que me llevaban al séptimo cielo aunque en mi interior estuviera ardiendo el mismísimo infierno. Porque lo nuestro era cometer pecados, como caer continuamente en tus brazos. Pero ya no volverá a pasar. Ya no. Voy a seguir adelante, es lo que toca. Y, mi queridísimo no príncipe azul, la próxima vez que nos veamos será en el infierno, pagando por nuestros pecados.
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Frases de amor y olvido
RandomEl amor, ese sentimientos que llega cuando menos te lo esperas, cuando piensas que no estás hecho para él, cuando lo ves como algo ridículo o raro y ajeno a ti. Incluso cuando te rindes porque te han roto tantas veces el corazón o te han hecho tanto...
