Ella es mi Jefa. SIN EDITAR

Parte 3. Cambios.

Luego de haberle acompañado a su casa, volví finalmente al departamento, el cual ahora gran parte del tiempo pasaba en soledad o eso es lo que quería creer hasta que abrí la puerta y me encontré con un nuevo Danny McCarthy.

El cabello que hasta ahora había llevado como melena hasta un poco por debajo de sus hombros a sido cortado y no ese tipo corte donde solo lo son las puntas, sino que uno muy a la moda.

- que demonios ¿Desqui?

- no digas nada -advierte apuntándome con una cuchara- que aun me duele, Beny.

Miro el balde de helados que descansa sobre la mesa y las cervezas cerradas que acompañan todo el conjunto de comida chatarra.

- deberás contarme la historia.

Se lleva ambas manos a la cara, mientras que por mi parte no puedo evitar reír ante su sufrimiento. Dejo mi saco y la corbata a un costado para después tomar una lata de cerveza, sentándome en el sofá que hay frente del.

- una chica.

- ¿una chica te hizo eso? -pregunto incrédulo y casi a punto de reír.- guau, esto se está poniendo interesante.

- y el Karma.

- ¿Qué fue lo que le hiciste?

- antes de que abandonara la universidad fuimos amigos con beneficio, en lo cual cometí el gran error de no decirle que lo dejaría todo para dedicarme a tatuar, solo corte relaciones mandándome a cambiar.

- gran error.

- el caso es que malinterpreto todo y hace unos días nos volvimos a reencontrar, una mujer divina a diferencia de la niña que me ha estado atormentando últimamente. Antes de ayer fuimos a una fiesta y allí nos emborrachamos un poco y nos fuimos a un motel...a la mañana siguiente apenas abro los ojos la busco en la cama pero ya se había ido, había sido una noche genial, era toda...

- no necesito que me especifiques esas partes -le cortó.

- te ahorraría ir a una página porno, para ya tu sabes...

- no.

- vale -se rinde alzando ambas manos- el punto es que apenas me siento en la cama siento algo diferente en mi, en un principio pensé que era de un enamoramiento, pero no fue así, porque apenas me coloque de pies y me fije en mi reflejo a través de un espejo que había colgado en la pared, grité.

Me lleve una mano a la boca para no reírme, presintiendo que se venía lo mejor.

- ¡me había cortado el cabello, mientras dormía! -exclamó llevándose ambas manos a la cabeza- mi hermoso y precioso cabello -ya para ese entonces rió a carcajadas- y lo peor es que se da el gusto de dejarme una nota, diciendo: "esta me la debías por imbécil y te dejo el cabello porque ni para donarlo serviría. Con mucho amor Kate."

- al menos no te lo corto al uno.

- ¡me dejo como el sexto integrante de One Direccion!

- ¿que no eran cinco?

- ¡exacto! Podría estar ahora, pero se separaron.

- no pensé que los escucharas -comente frunciendo el ceño.

- era un gusto extraño.

Volví a reír cuando agarro el balde de helados comenzando a comer, mientras fingía que lloraba. A este tipo le encantaba ser dramático y otras veces, la suerte no estaba a su favor.

- por cierto ¿Por qué no has ido a casa de Alise?

- que no se mensajeaba -digo sonando por error, celoso.