Forest boy [l.s]

Capítulo 5

Louis nunca había visitado un pueblo antes, y tal vez a eso se debía la sorpresa que se llevó al ver ese lugar.

Era demasiado pintoresco y tranquilo, totalmente distinto a la vida urbana de la cual estaba acostumbrado Louis. Pero a pesar de ellos, le agradó.

Todas las casas eran pequeñas, y a decir verdad, idénticas. Lo único que las diferenciaba era que algunas tenían patios delanteros y otras no.

Tras salir de su trance al tener su primera impresión de Pewcastle, Louis giró en dirección a Zayn y Josh. Él había decidido tomar la delantera cuando habían entrado por lo cual ambos chicos se encontraban detrás de él.

Los tres se miraron sin saber qué hacer. Ya habían llegado, ¿qué seguía después de eso? ¿Esperaban a que alguien supiera a qué iban y los guiara hacia el bosque? Tal vez si, pero sabían que eso no iba a suceder.

Ninguno había pisado Pewcastle antes, y no tenían la más mínima idea de si estaban cerca o lejos del bosque, por lo cual el preguntar a la persona que estaba más próxima a ellos parecía la mejor opción.

Justo en ese momento una mujer de la tercera edad pasó frente a ellos, y Louis no perdió tiempo, intentando llamar su atención.

-Disculpe - le dijo, haciendo que la mujer detuviera el paso y se girara a mirarlo con ojos curiosos, esperando a ver qué le decía -. ¿Usted no sabe dónde queda el bosque del pueblo? - preguntó sin rodeos, ansioso por saber su respuesta.

El rostro de la mujer que hace unos segundos atrás portaba una sonrisa amable y unos ojos cálidos cambió radicalmente, ensombreciéndose.

-¿El bosque? ¿Se puede saber para qué lo buscan? - inquirió la anciana, escaneando a cada uno de ellos con la mirada sin molestarse en disimular. Cuando concluyó, una expresión de fastidio se plasmó en su rostro lleno de arrugas por la edad, lo cual daba a entender que el olor a fertilizante y estiércol que desprendían le causaba molestia.

Trabajamos en un jardín botánico, ¿qué esperaba? ¿Que oliéramos a vainilla? Pensó Louis.

-Si, venimos a visitarlo, somos biólogos del jardín botánico más importante en Gran Bretaña y hemos oído decir a unos colegas que la vegetación aquí es realmente variable e impresionante, y hemos decidido venir a revisarla - intervino Zayn al darse cuenta de que Louis no sabía que responder, sonando lo más profesional posible, lo cual agradeció mentalmente el castaño.

-No vendrán por la ridícula noticia de hace unos años, ¿verdad? Ustedes parecen muchachos demasiado decentes como para creer en ese tipo de disparates - exclamó la mujer.

-Disculpe, ¿cuál es su nombre? - le preguntó Louis para desviar la atención del motivo por el que estaban ahí, y porque la actitud de esa mujer estaba comenzando a irritarlo.

-Mi nombre es Martha.

Su respuesta puso a pensar a Louis.

Martha. Estaba seguro de que ya había escuchado ese nombre antes, pero, ¿dónde?

Trató de hacer memoria, y después de unos segundos recordó de dónde se le hacía tan familiar aquel nombre.

Cuando leyó acerca de Pewcastle en el periódico que se encontraba en el archivero, la noticia tenía una parte que decía que una mujer había declarado que la persona causante de todo eso había destrozado la casa de su amiga Martha.

¿Sería aquella la misma mujer del periódico? Louis negó mentalmente por instinto. Esa mujer parecía recia a creer que algo tan fuera de lo común había sucedido. Pero tras analizarlo bien y darse cuenta de que esa era un pueblo algo pequeño y que el nombre Martha no era muy común, llegó a la conclusión de que sí eran la misma persona.