Chicas vs Chicos

42- Mentiras.

Hoy me iba a encontrar con Blade en la plaza, llevaba unos lentes negros para cubrir el moretón.

-Hola.- dijo Blade sentándose en el mismo banco en el que me encontraba yo.

-Hola.- lo saludé con un beso en la mejilla y fingí una débil sonrisa.

-¿Esta todo bien?

-Si, claro.

-¿Por que usas lentes de sol?- se rió.- Esta nublado.

-Y-yo, no te importa.- me puse a la defensiva.

-A mi no me engañas.- se acercó rápidamente y antes de que pudiera evitarlo me sacó los lentes.- ¿Què se supone que significa esto?

-No puedo decirte, le prometí que no diría nada.- dije fingiendo llorar. Amo a mi madre por llevarme a teatro.

-Dime quien es.- me exigió, se estaba enojando.

-No. A demás se acaban de reconciliar, no quiero arruinarlo.

-¿Fue Aiden?- preguntó sorprendido, ups. Quiso irse pero se lo impedí.

-No le digas nada, por favor.- seguían cayendo lagrimas.

-¿Por que te hizo esto?

-Dijo que me aleje de ti pero no quería hacerlo y me golpeó.

Esta vez se zafo de mi agarre y se fue furioso.

Creo que Aiden esta a punto de tener muchos problemas.

Narra Aiden

-¿Es en serio?- me preguntó Blade en un tono furioso apenas entro en mi cuarto sin siquiera tocar.

-¡Hey! ¡Toca la puerta! ¿Quien sabe si yo estaba desnuda o algo?- le lance una almohada.

-No estoy para bromas Aiden, sabes muy bien lo que hiciste ¿Por qué? Justo cuando empezábamos a volver a estar bien...- me miró con desprecio.

-Ahí es donde te equivocas, yo no se que hice.- le dije levantándome de la cama.

-¡Le dejaste a Beth un ojo morado!- gritó.

-¡¿Que yo qué?!- mi mente explotó, yo no le pegué a Beth, me gustaría, pero no.- Yo no le hice nada a esa loca.

-Caíste muy bajo Aiden, muy bajo.

-¿Que es lo que te dijo ella?- pregunté.

-Justo lo que tu le dijiste que no diga, eso ya debes saberlo.- dijo saliendo enojado de la habitación.

¿Qué?

No entiendo nada, yo no le hice nada, ¿De que carajos está hablando?

Salí de mi habitación con la intención de seguirlo, tratar de que se calme y me diga que demonios hice, pero lo primero que cruzó mi mente al sobrepasar el umbral de la puerta fue solo un nombre.

Beth.

La busqué por todo el internado. El cuarto de Zack y Blade, la cafetería, el campus, la biblioteca, los baños, por todos lados y la zorra no apareció, pero si encontré a Payton, la mejor amiga de Blade.

-Hola, llevaba tiempo que no te veía Aiden.- me saludó con una sonrisa.- se que nunca nos llevamos bien... pero ahora que estoy con Jax, y el es como tu hermano pensé que tal vez...

-Esta bien Payton, ¿Podemos seguir con esta propuesta de paz más tarde? Estoy buscando a Beth.- le dije con apuro.

-¿Beth?- preguntó confundida, ella no la conocía.

-Larga historia. En resumen, conoció a Blade y hace lo imposible para que el me odie, y lo esta logrando. Al parecer le dijo que yo le pegué...

-¿Y no lo hiciste?- preguntó.- no es por nada, pero tu eres un poco explosiva...

-¡No!.. no...- me calmé.- ella le mintió, si la hubiera golpeado lo recordaría, y no lo hice.

-¿Te ayudo a buscar? Dos son mejor que una ¿No?- preguntó.

-Tienes razón, ayúdame.

-¿Y como es ella?

-Baja, tes bronceada, ojos verdes, pelo castaño, con pecas... parece un angelito pero no lo es.- respondí.

-Entendido... ¿Y por que quiere alejar a Blade de ti?

-Ni yo lo se. Desde que la conocimos en las vacaciones de invierno esta pegada a el como chicle en un zapato, y por ella es que nos peleamos. Hace poco nos arreglamos y ahora volvimos a pelear ¿Por que? Pues por ella.- expliqué.

-Voy a matar a Blade, lo juro.- dijo enojada.- hey, yo buscaré por el salón de química, tu busca en el de música.

Narra Payton 

En serio iba a matar a Blade. De acá a kilómetro y medio se nota que esta loco por ella y ahora llega esta, que no conozco, con cara de angelito y le cree a ella mas que a Aiden. No nos llevamos tan bien con la rubia pero se que a Blade le gusta y yo se que a ella también le gusta él.

Estaba buscando a la tal Beth por el salón de química y cuando llegue había una chica con sus mismas características. Tenia un ojo morado, definitivamente era ella. Cuando me iba acercando note que se rascaba el ojo y se le corría todo el maquillaje, en definitiva Aiden tenia razón, es una mentirosa.

-Veo que caíste muy bajo como para inventarle a Blade que Aiden te golpeó.- puse las manos la cintura. 

-¿Que? ¿Quien eres?- se volteó para mirarme de frente aún con el maquillaje corrido.

-Yo, querida, soy la mejor amiga de Blade.- le sonreí cínicamente.- y eso de separarlo de la persona que le gusta no es muy bueno. ¿Que ganas con esto?

-Nada, pero yo se que es por su bien.

-Claro ¿Por su bien o por el tuyo?

-Ella no es para él. Tarde o temprano se iban a separar.- sonrió igual a mi.- y yo ayudo a que sea mas temprano que tarde.

-No servirá de nada, estoy segura que Blade no es tan tonto como para creerte.- o por lo que dijo Aiden si lo es.

-Parece que no lo conoces bien, un par de lagrimas y ya se creyó toda la mentira.- miro sus uñas.

-Lo mataré definitivamente.- dije para mi misma

-Me tengo que ir a acomodar el maquillaje.- se puso unos lentes oscuros.

-¿Y si le digo a Blade lo que se?

-No pierdas tu tiempo, no te creerá.

-¿No tienes miedo?- me crucé  de brazos.

-¿Por que debería tenerlo?

-Por si te descubren.

-Nunca lo hará.- dijo con seguridad.

-No estará ciego toda la vida, se dará cuenta del engaño que eres.

-No puedo seguir perdiendo tiempo, mejor no le digas nada o casualmente tendré el otro ojo morado y no quieres ser la culpable ¿Verdad?

-La mentira tiene patas cortas.- Eso no lo dije yo.- Y tarde o temprano se descubre.

-¿Que está pasando aquí?- dijo una voz masculina entrando por la puerta.

-Blade.- dijo Beth asustada. 

Sonreí.