Chicas vs Chicos

14- Maldito armario.

Narra Aiden

Luego de nuestra increible actuación volvimos a nuestro cuarto, una vez allí cada una cargó dos cajas y caminamos hacia el cuarto del conserje.

Una vez allí, estabamos dejando las cajas en un lugar y de la nada alguien entra.

-Allí es... espera, ¿Se multiplicaron las cajas o que?- preguntó una voz familiar, Blade.

Yo aún estaba colocando una caja, alguien cayó encima mío y la caja cayó al suelo... abierta.

Cody gritó y se tiro encima de un estante, este se tambaleo y ella chocó contra la lampara dejandonos a oscuras.

-Santa virgen, seas quien seas, si me dejas caer al piso con esos bichos lo lamentaras.- dijo ella con la voz temblorosa.

No veo nada, por lo tanto supongo que esta en los brazos de alguien.

-¡¿Que hacen aquí?!- preguntó la voz de Zack.

-¡¿Qué hacen ustedes aquí?!- preguntó Cody.

-Al parecer lo mismo que ustedes.- contestó Blade.

-Genial, estamos en un cuarto pequeño, con insectos y con ustedes.- se quejó Cody.

-Tranquila.- dijo Blade.- Solo tengo que girar la llave que está en la manija de la puerta y...

-Y seremos libres.- complete.

Escuché como Blade golpeaba la manija.

-Em... la llave, no está...- dijo el nervioso.

-¡¿Que?!- gritamos todos.

Genial, increible, estupendo.

-¿Donde está?- pregunté.

-Supongo que se cayó cuando me tropecé contigo.

-Ay no...- sollozo Cody.

Luego de un rato pisando insectos y tratando de buscar la llave a ciegas,  Cody se sentó en una esquina y yo hice lo mismo.

-Chicos...- dijo Zack llamando nuestra atención. El comenzó a tocar sus bolsillos.-Mi celular.- dijo sacandolo y prendiendo la linterna. Comenzamos a buscar nuevamente la llave, pero el genio de Zack sólo tenía 15%.

-10%- dijo mientras buscabamos.- 9%...- no lo lograriamos.- 5%...- LA ENCONTRAMOS.

Estaba por agarrarla cuando... EL MALDITO CELULAR SE PINCHE APAGÓ.

-Moriremos aquí, nunca saldré de este internado, nunca conoceré el amor, moriré al lado de insectos...- susurre Cody mientras se tambaleaba en posición fetal. Luego comenzó a hacer unos ruidos raros, como los de una obeja mientras tocaba las paredes.

-¿Eres claustrofobica?- preguntó Zack.

-Si.- sollozo continuando con sus ruidos.

-Blade.- lo llamé.

-¿Si?- me preguntó.

-Te odio.- le dije.

-Es mutuo.- respondió el.

-Zack.- llamó Cody.

-¿Tu me odias?- preguntó el anticipando lo que creía que ella iba a decir.

-No, iba a decirte que tienes una araña en la pierna.- dijo ella aún tambaleándose.

Narra Cody

Después de que Zack saco y mató la araña se sentó junto a mi estábamos por tener al parecer una hermosa charla, pero sentí como algo caminaba en mi brazo.

Me pare de golpe y me subí a una de las estanterías.

El se paro del susto de mi reacción.

-¿Que pasó?- preguntó Zack con cierto tono preocupado.

-Nada...- dije buscando una posición para sentarme ahí arriba.

Intentando acomodarme volví a caer de nuevo sobre Zack.

-Hoy es el día de caer sobre mi.- dijo riéndose.

-Perdón.

-No importa.

El me subió a un banquito para no estar en el piso y se volvió a poner junto a mi para tener la conversación que no pudimos tener.

-¿Tan asustada estas?- pregunto él.

-Ya no tanto.- dije un poco calmada.

-Solo tenemos que esperar al conserje y el abrirá la puerta.- escuche decir a Aiden.

-Si es que despierta.- mascullo Blade.

-¿Como?- dije abriendo los ojos aunque con la oscuridad no se notara.

-Es que digamos que... para quitarle las llaves al conserje pues...- dijo Zack.

-Tuvimos que asegurarnos que duerma tranquilo.- Siguió Blade.

En ese momento me di cuenta que o me acostumbraba a estar ahí con los bichos o.... me moría.

Ya parecía ser de noche, ya que la ventana que había allí mostraba que estaba todo oscuro afuera. Si intentamos salir por la ventana pero es muy chiquita.

Del susto que tenía aun no podía dormir, pero vi como Aiden se comenzó a dormir en los hombros de Blade. Después de un rato me paso pero diferente.

Sentí como Zack se dormía en mis hombros, yo me quede despierta acariciando su pelo. Se despertó y yo fingí dormirme y terminé cayendo en sus piernas, el me acariciaba y supongo que después de eso me dormí porque no recuerdo nada mas.

Narra Aiden

Estaba dormida muy comodamente, hasta que abrí los ojos porque mi almohada comenzó a moverse... pues resulta que no estaba durmiendo sobre ninguna almohada, sino que estaba durmiendo sobre Blade.

No voy a mentir, sus hombros eran comodos. El comenzó a moverse hasta que se acomodó, solo que no se dio cuenta que me estaba abrazando.

Oye... no soy tu pinche oso.

-Blade...

-¿Hmm?

-Me estás abrazando.- le dije despacio para que los otros no se despierten.

-Hmm.- respondió afirmandolo. Notablemente estaba muy dormido.

Acomodó sus brazos al rededor de mi cintura y apoyó su cabeza en mis hombros.

¿Que mas da? Si el puede usrme como oso de peluche ¿Por qué yo no?

Apoyé mi cabeza encima de la de el y así volví a conciliar el sueño, hasta que el conserje llegó y abrió la puerta despertandonos a todos. Estaba parado en el marco de la puerta y nos miraba raro, al parecer le dolía la parte trasera de su cabeza ya que no dejaba de sobarse y quejarse.

Luego de salir corriendo del armario corriendo del conserje el cual nos amenazaba con su escoba, llegamos a la cafetería.

-Vaya, ustedes dos se ven tan demacradas.- dijo la chillona voz de Stacy.

Ay no ahora.

-No molestes Stacy.- le dijo Cody luego de bostezar.

-¿Que quieres?- pregunté sentandome en una mesa.

-De ti, nada, de sus amigos...- contestó en tono coqueto.

-Ni lo sueñes.- dijimos al unísono Cody y yo.

-Superenlo, no pueden impedir que yo haga lo que quiera, no pueden estar siempre con ellos, y allí es donde Stacy ataca.- dijo adulandose a si misma.- si no tengo a uno.- miró a Cody.- tendré al otro.- me miró a mi.- y si no tengo a ninguno, ustedes tampoco.- finalizó y se fue moviendo exageradamente sus caderas.