-¿Qué cambió? -tú

27

-Hola, que sorpresa- dijo la madre de Candy cuando abrió la puerta, era sábado y no tenía mucho que habían terminado su desayuno- ¿qué haces aquí?-

-Vengo a ver a Candy-

-Está en su cuarto, ya sabes donde está-

-Gracias-

Caminó hacia la escaleras, iba nervioso. Tocó dos veces cuando llegó frente a la puerta de Candy, sabía que ella odiaba que tocaran más de tres veces.

-Ya voy- se escuchó desde adentro.

-Hola- saludó cuando la puerta se abrió.

-¿Qué haces aquí?- preguntó Candy.

-Vine a verte, desde hace una semana no sé nada de ti, me preocupas-

-Anthony,  es mejor que te vayas- intentó cerrar la puerta, pero él la detuvo.

-No podemos estar siempre así, eres mi amiga, ya no quiero que me ignores- le explicó con tono dolido- te extraño-

-Sólo ha sido una semana- se burló- no es para tanto-

-¿Qué?- preguntó extrañado- ¿cómo acabas de contestarme?-

-Me escuchaste- sonrió- ha pasado una semana desde que te confesé mis sentimientos y tú me rechazaste, ¿esperas que te reciba con los brazos abiertos cuando rompiste mi corazón?- caminó hacia dentro de su habitación, Anthony la siguió unos pasos atrás- estamos en la vida real, no en una novela donde eso es posible-

-Lo sé-

-¿Entonces qué quieres?-

-Eres mi amiga-

-Una amistad siempre se rompe cuando uno se enamora, ahora sólo quiero estar lejos de ti-

-No, eso no, te extraño, extraño venir hacer tarea contigo, salir, nuestras cenas de los jueves-

-Todo eso lo dejamos de hacer desde hace meses, mucho antes de que empezaras a salir con Luisa-

-Pero al menos teníamos los descansos, ahora nunca te veo y si lo hago estás con él-

-Anthony, ¿a qué viniste?-

-Arreglar las cosas, esto está mal, sólo por no corresponderte debemos dejar de ser amigos, no quiero que se pierdan tantos años de amistad-

-Si quieres arreglar esto, debes darme mi tiempo- le dijo Candy, se le notaba lo triste que estaba- fueron años Anthony, años que soporté verte con alguna chica, mi corazón se rompía cada vez y nunca te diste cuenta-

-No sabes cuanto lo lamento-

-No digas eso, no es algo para lamentar, fue mi error haberme enamorado de mi mejor amigo, pero en serio quiero superarte y no lo voy hacer si te tengo cerca, tú y...- guardó silencio de pronto.

-¿Yo y quién?- preguntó Anthony comenzando a molestarse- habla Candy-

-Tú y Terry hacen que me confunda-

-¿Por eso pasas tanto tiempo con él?-

-Tal vez- murmuró- es el chico perfecto, para toda chica y el que me traté así y su rara forma de quererme,  me hizo dudar, él me gusta y quisiera intentarlo con él-

-Eres como mi hermana Candy- se acercó a ella y la atrajo hacia él para abrazarla- quiero que seas feliz después de haberte hecho sufrir, y si para serlo nesecitas que me aleje, lo haré, sólo si prometes que algún día seremos los amigos de siempre-

-Lo prometo- le sonrió alejándose de él- también extraño pasar tiempo contigo, pero no creo que quieras saber sobre mis salidas con Terry-

-No, para nada, suficiente es con tenerlo en clase- rió Anrhony- debo irme-

-Sí- contestó Candy después de guardar silencio por un momento, no quería que él se fuera, pero su presencia complicaba sus pensamientos- nos veremos luego-

-Adiós Candy- Anthony se acercó y dejó un beso en la frente de ella.

Cuando Anthony iba caminando hacia las escaleras, Albert lo llamó, venía de frente.

-¿Anthony?-

-Hola Albert-

-¿Hablaste con Candy?- preguntó Albert y Anthony asintió- ¿arreglaron sus asuntos?-

-Creo que... sí-

-No te escucho muy convencido-

-No lo estoy, ya no estoy segura de nada desde ese día- le contestó con inseguridad en su voz.

-Ella te quiere, algún día serán los mismos amigos de siempre, no deberías dudar de ella, tú la conoces-

-Es ese el problema, ya no estoy seguro de que yo quoera que seamos amigos- murmuró cabizbajo- nos vemos Albert-

-Pero, ¿qué?- preguntó extrañado Albert, pero Anthony ya había pasado de él. Buscaría a ese chico para hablar con él, no entendió lo que trató de decir o tal vez sí- ¿será posible que...?- negó con la cabeza- no, no creo, nadie cambia por una confesión, ¿o sí?-

-¿Con quién hablas?- preguntó la madre de Candy, había visto a Anthony bajar la escaleras y quería despedirse, pero su hermano murmuraba cosas sin sentido y se quedó con él- ¿estás bien?-

-Sí, sólo estoy pensando de más-

-¿Por qué se fue tan pronto Anthony?-

-Tenía cosas que hacer-

-Estás muy raro- lo miró extraño- ¿seguro que estás bien?-

-Sí, yo... iré a mi habitación-

-¿Qué habrá pasado?- se preguntó a ella después de ver como su hermano se retiró- después investigaré-