16. ¿Verdades?

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(Pv Levi)

- ¿Estás cómodo Levi?

La burla de Kenny me estaba hartando, mientras el maldito me vigilaba desde la tapa del ataúd donde me mantenía preso, yo apenas podía respirar por el espacio, al menos no estaba del todo cubierto, pero la compañía era lo que me molestaba.

Historia se había ido con su padre, en verdad que es estúpida ¿en serio cree que su padre siente algún aprecio por ella? Si hubiera querido tenerla a su lado pudo haberla buscado desde el inicio, pero no, sólo quiere  conseguir el poder titán de Eren.

- Vaya pedazo de mierda.- pensé.

Muchos padres son igual de bastardos que los nobles, interesados únicamente en su propio beneficio usando a sus hijos como armas o monedas de cambio.

- Supongo, que haber nacido como un delincuente más fue una ventaja.

Mi madre hizo todo lo posible porque yo viviera, prefería trabajar sin descanso siendo tocada por toda clase de bestias asquerosas sólo para que yo pudiera comer. Nunca necesité de un padre, al menos eso creí hasta el día que ella enfermó.

Robé hasta tener el dinero suficiente para sus medicinas, fui golpeado y humillado por muchos, cada vez terminaba más adolorido, pero no me importaba, ella me sonreía y agradecía lo poco que le daba.

Pero entonces...ella no pudo volver a despertar, se había ido.

Estaba solo.

Creí que lo mejor sería morir con ella en ese sucio cuarto, al fin y al cabo ¿Qué más daba? Nadie lloraría mi muerte.

Fue entonces cuando él apareció.

Kenny Ackerman, un "conocido" de mi madre que me adoptó y me entrenó para sobrevivir en las calles, para enfrentarme a todo aquel me humilló diciendome "sucio" "basura" "asqueroso" entre otras cosas.

Ese sucio mocoso aprendió a usar un arma, a pelear, a vestirse bien y a limpiar, todo eso me hizo quien soy y cuando me di cuenta, todos los que me humillaron una vez terminaron a mis pies, llorando por sus vidas, algunos sin saber que era el mismo mendigo que una vez humillaron por pedirles dinero para ayudar a su madre.

Kenny desapareció sin dejar rastro, lo busqué en toda la ciudad subterránea pero nadie sabía nada de él, no podía subir a la superficie por lo que me quedé atrapado; pero entonces me di cuenta de una cosa.

Seguía estando solo...

Pero ya no estaba indefenso.

No sé si esa fue la intención de Kenny desde el principio pero no voy a quejarme, ya no necesitaba a nadie para defenderme, era capaz de sobrevivir sin ayuda de nadie.

Formé un grupo de ladrones y con el paso del tiempo gané mi propio título como el Demonio de la Ciudad Subterránea, algo que me daba igual hasta que llegaban idiotas que se burlaban de mi estatura sin creer que podía derrotarles.

Perdí a muchos camaradas, pero dos de ellos fueron los únicos por los que lloré su muerte.

Fue mi culpa, ellos no merecían una muerte así, Isabel apenas era una cría, tenía un futuro por delante si yo no la hubiera sacado de las murallas, Farlan era inteligente, podía haber entrado a la Policía Militar sin problemas.

Pero ellos me siguieron, comprendí que no era el líder que ellos creían, seguía siendo...un mocoso inmaduro. 

Fue gracias a Erwin que no perdí la razón, tuve un motivo para seguir adelante y luchar para conquistar la libertad, no moriría sin luchar y exterminar a cada maldito titán del mundo.

Del Más Fuerte a la esperanza de la humanidadOnde histórias criam vida. Descubra agora