El Legado del Cuarto Hokage {Itachi y tú}

El día perfecto para una boda

Aviso: Este capítulo será narrado diferente pues lo haré con pequeñas apariciones de Rashis durante las aventuras de los demás y al final pondré a la familia ItaRashis 👌
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Una risita me distrajo de mi interesante compra de leche en polvo, giré mi rostro encontrando a Konohamaru sonriendome con una cámara en mano.

-¡Buenos días, ___-neesan!-sonrió para luego mirar al pequeño en el carrito de súper-¡Buenos días, Daisuke!

-Konohamaru... muy buenos días, ¿Puedo ayudarte en algo?

-Es extraño, nunca creí que te vería de una forma tan... normal-eleve la ceja haciéndolo reír-Lo siento, lo siento... ¿Podrías decir unas palabras para los futuros novios?

-¿Eh? ¿En el supermercado?-solté una risita-Dame una hora para que termine las compras y luego ve a mi casa, ¿vale?-puse una mano en mi cintura y levanté el dedo índice de la otra-Itachi debe felicitarlos también

-De acuerdo, iré a entrevistar a Sakura-neesan y a los demás mientras haces lo tuyo

-Te lo agradezco-acaricie su cabello-Hacer esto por mi hermanito es muy amable por tu parte...

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Respire profundamente disfrutando del aire fresco que abundaba en el parque, mi bebé balbuceaba cosas ininteligibles mientras aplaudía a los pájaros que emprendian el vuelo al paso del carrito para bebés en el que iba. Más adelante encontré a TenTen sentada en una banca con la cabeza gacha y suspirando incansablemente, me acerqué curiosa.

-¿TenTen-chan, estás bien?-me miró

-¿Eh? ___-san...-volvió a bajar la cabeza-Sí, estoy bien... Hola, Daisuke-kun

-Vamos, no intentes mentirle a una madre-me senté junto a ella-Dime, ¿Qué te tiene tan perturbada?

-No se que regalarle a Hinata y a Naruto por su boda...-suspiro derrotada

-Ya veo... parece que todos tienen problemas con eso-solté una risita-¿Tienes alguna idea?

-Había pensado en un Kunai, pero pensé que era demasiado impersonal... además pensarán que es muy tipo de mí

-TenTen-chan-me miró-No debes preocuparte por lo que digan o piensen los demás... eres invitada por tu relación con ellos, no por el valor de tu regalo-sonreí alegre-Si un Kunai es para ti el regalo perfecto, entonces dales eso

-Pero...-le puse el dedo en la boca

-Conozco a ese par y estarán felices con cualquier regalo que les des, la intención es lo que cuenta

-Tiene razón...-se puso de pie con ojos brillantes-¡Muchas gracias, ___-san!

-Es un placer

-Pero...-acercó su rostro al mío haciéndome retroceder-¿Qué van a darles ustedes?

-Eso...-eleve mi dedo índice y guiñe el ojo-Es un secreto.

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Caminé junto a mi esposo rumbo a Ichiraku, aprovechamos que Hinata quiso cuidarlo para escaparnos a una cita y ¿Cómo no? Comer en Ichiraku.
Mientras caminabamos por las calles vi a lo lejos a Shikamaru y a Temari, ambos estaban sonrojados hasta la médula, solté una risita malévola.