Capítulo 8

754 50 40
                                    

Después de la batalla y del nombramiento de Percy como el nuevo Pretor, siguió una fiesta.

Era lógico. La mayoría de los soldados casi murieron por culpa del ejército de Gea, las amazonas habían tenido que pasar por una lucha interna antes de venir corriendo a ayudar a la hermana menor de su reina. Todos merecían ese momento de descanso y de diversión para olvidar momentáneamente lo que estaba por seguir.

Así que las ninfas no dejaban de llegar con grandes platos rebosantes de comidas o de jarras llenas de vino o refresco dependiendo de a quien sirviesen. Los faunos habían dejado de lado su ociosidad y se dedicaron a tocar música tras música con sus flautas, guitarras o lo que tuvieran a la mano para tocar.

Todos estaban tan centrados en la celebración que nadie se dio cuenta cuando Percy y Reyna desaparecieron de la fiesta.

Ambos habían querido alejarse de todo el ruido y todo el alboroto para poder hablar. En el pequeño salón que separaba los cuartos de los pretores se sentaron a tener la charla más pesada de todas.

-Así que tú y Nico Di Ángelo son griegos pertenecientes a un campamento de semidioses griegos ubicado en Long Island -comenta Reyna sin poder creerlo- son entrenados por Quirón, separados en cabañas por sus padres divinos y se enfrentaron a Saturno el pasado verano después de que él lograra convertir a su lado a varios de sus amigos... y tú eras el niño profetizado para detenerlo

-Eso lo resume bastante bien -confirma Percy con un movimiento de hombros- Pero a pesar de que soy griego... quiero quedarme como romano

-No es así como funciona...

-Lo sé pero... -dice Percy rápidamente ganándose una mirada semi molesta de Reyna por interrumpirla- pero pertenezco aquí. Por primera vez en mi vida siento que he encontrado un lugar al cual pertenecer. No porque fuera un hijo de Poseidón o Neptuno, no porque sea el niño profetizado para salvarlos... sino por ser yo

-Derrotaste un gigante -señala la pretor con voz neutra

-Pero ya me habían aceptado antes de eso. Ustedes pueden sentir cierto temor o resentimiento contra Neptuno pero no hizo que me dieran la espalda... en el campamento mestizo cuando se enteraron que era un hijo de Poseidón, me hicieron a un lado como si fuera una especie de peste... y a quien consideraba mi mentor o una especie de hermano mayor estuvo por matarme solo porque su amo se lo ordenaba -masculla Percy con tristeza- aquí el único que parece tener un problema conmigo es Octavio y no está tratando de disimularlo
-¿Y qué se supone que haremos cuando lleguen los griegos? -pregunta Reyna con la mirada derrotada- ¿fingirás que no los conoces? ¿Qué no recuerdas nada? ¿Qué siempre has sido un romano?... ¿Qué le dirás a tu novia?

-Van a venir en un barco según me dijo Tyson -comenta Percy pensando en una solución- podemos subir a bordo y hablar con ellos antes de permitir que pisen el suelo de Nueva Roma. Hazel y Frank pueden venir con nosotros como respaldo para que Octavio no intente colarse -su mano se desliza hasta sujetar una de las de Reyna con ternura- voy a decirles que quiero permanecer aquí como romano... contigo

-A tu novia no va a gustarle

-Yo ya termine con ella... en un sueño o un sueño semidiós, no sé... la soñé la primera noche que llegue y sabía que no podía seguir con ella...

-Terminar en un sueño no es válido -dice Reyna arqueando una ceja- dudo que lo acepte después de estar meses buscándote

-Entonces la llevare a un lado y se lo explicare -suspira Percy- Annabeth... ella se ha aferrado a mi desde el momento en que Luke murió, antes de eso solo podía pensar en que Luke regresaría a ella pero... cuando Luke murió ella tenía que aferrarse a algo o terminaría hundiéndose por no haber podido salvarlo, yo sé que ella me quiere pero no de la forma que piensa. Hemos sido una pareja que se ha seguido comportando como amigos o hermanos más que nada

Mas que un recuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora