Serie Ley y Pasión secretos del pasado Libro 2 © #PNovel #PE2018

En el pasado

Prologo

Barbara Mae Johnson terminaba de preparar la cama en su nuevo apartamento, cuando llega su prometido William.

—Hola mi amor. ¿Cómo te fue el día?

William se veía sumamente molesto, dejó su portafolio en la mesilla de entrada junto con las llaves.

—Mal, ya sabes como son las cosas.  No consigo inversores al ser un producto nuevo, no tienen interés por él.

—Ya te dije que yo invertiria en tu producto.

—No puedo permitir mi amor que tu me soluciones los problemas.

—Sabes que puedo permitirmelo y en el momento que quieras te puedo extender un cheque.

—Amor, me siento incómodo estas pagando buena parte de la boda y también quieres invertir en mi producto ¡no!  Yo quiero aportar en nuestra relación, no debo estar con las manos vacías.

—Yo te entiendo, pero para arrancar debes tener un empujoncito e igual sé que me devolveras todo.

—Como quieras—. En ningún momento vio Barbara la mirada astuta y la sonrisa cínica de su prometido.

Ellos tuvieron relaciones sexuales esa noche.

Días antes de la boda....

Barbara estaba ansiosa por la llegada del gran día, William había salido de viaje promocionado su producto y a ella le quedaba terminar algunos asuntos relacionados con la ceremonia y la fiesta.

Su amiga del alma Vanesa estaba con ella en su despacho ultimando los detalles.

—Serás la novia más hermosa que he visto en años, Barbie.

—El vestido es un sueño, madre me ayudó a escogerlo. Le agradezco lo paciente que han sido conmigo y el que al final hayan aceptado mi decisión.

—¡Como no ! Si te aman con locura, igual con Chase— Vane se pone triste al pronunciar el nombre del hombre del que ha estado enamorada toda su vida.

—Bueno no nos pongamos triste, todo debe ser felicidad, me voy a casar con un hombre maravilloso.

El intercomunicador sonó en ese instante como ave de mal Agüero.

—Dígame Margaret.

—Tiene una llamada en la línea dos.

—¿De quién se trata? En este momento estoy ocupada con lo de mi boda.

—Es precisamente de la casa de ceremonia que está llevando su fiesta.

—Pasame la llamada, por favor.

Vanesa se sorprende al ver el semblante de su amiga palidecer y de perder por un momento la respiración.

Se acerca y hace que agache la cabeza y le pide que respire poco a poco.

A continuación toma el teléfono y pregunta que sucede a la otra persona en la línea.

—No entendemos este pedido de confirmación, si hace tres semanas el señor William Hill anuló la reservación para la ceremonia de casamiento y ya el salón está apartado para otra pareja.

—¿El señor Hill anuló la reservación?

—Si. Y se hizo efectiva inmediatamente, con un pequeño recargo por cancelación que el mismo señor Hill pagó.

Mal nacido, ¿cómo pudiste? — pensó Vanesa.

—Gracias— y colgó el teléfono.

Se fue a abrazar a su amiga.

—Debe haber una explicación Vane. La tiene que haber. ¿Cierto?

—Sólo William te puede explicar, cariño.

Al otro lado del mundo..........

Un hombre enamorado llega a su cabaña  de dos pisos  días antes de su llegada programada, contento por sus logros realizados espera compartir con su esposa las buenas noticias y darle una sorpresa.

Deja su maleta cerca de la puerta ya que no quiere hacer ruido. Poco a poco sube la escalera y en el piso está el camisón que le regaló en la Luna de miel.

Lo recoge y aspira el perfume de Salomé que aún conserva.

También encuentra una camisa de hombre en el pomo de la puerta, pero algo lo detiene de intentar abrir la puerta, voces...

—¿Estas segura de que él regresará el fin de semana?

—Mi amor, el imbécil me lo confirmó. Tenemos todos estos días para pasarlos juntos, ya estoy harta de fingir pasión cuando estoy con él y anhelo constantemente que tu borres de mi cuerpo sus huellas.

—Pero si tanto te da asco. ¿Por qué te casaste con él?

—Por prestigio y dinero. Es lo único que puede aportar, me da lástima el pobre. Le da miedo que sólo lo quieran por su dinero ¡ja!... mira que bien me fue estudiar actuación siempre viajado y me deja sola, lo que me encanta para si poder disfrutar de su fortuna y de ti.

—Mi brujita, tan deliciosa y generosa, compartiendo conmigo su fortuna y tú cuerpo.

—Te amo mi rey,..... me molesta tener que decirle a Adam que lo amo cuando no es cierto, porque es a ti a quien amo, el sólo me produce asco, rabia y yo sólo quiero sacarle todo el dinero posible.

—Y de paso convertirle en cornudo— suelta una fuerte carcajada celebrando su propio chiste.

—Y lo peor quiere que le de hijos. ¿Yo embarazada? y ¿de él? ni loca, pero él no lo sabe. Yo me cuido cuando estoy con él sólo estoy esperando el momento oportuno para dejarle tirado y preguntándose ¿qué pasó? Pero basta de charlas, hazme el amor y hazme olvidar su asqueroso toque.

Sólo se escuchaba los sonidos de placer que agrietaron más el corazón del muchacho, abrió la puerta y se enfrentó a los amantes.

Fue el peor día de su vida....