Capítulo XLVI: Ren y Yasyamon

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     Ver morir a Airu provocó que Yuu alcanzara ápices de locura nunca antes vistos.

     Tswarmon se abalanzó sobre el Guren y Kallen fue bastante hábil para evitar su golpe. Disparó el lanzagranadas contra él pero no consiguió dañarlo. El trabajo de Tagiru se complicó cuando tuvo que apresurarse para sacar a todos los Elevens de la línea de fuego.

     — ¡¡Alto!!  —Exclamaba desesperado—. ¡¡Ya basta!!

     Pero nadie lo escuchaba, nadie obedecía.

     El campo de batalla pronto quedó destruido. Las copas de los árboles se prendieron en llamas y los edificios adyacentes se caían en pedazos. Dentro del Gawain, Lelouch sólo podía pensar que aquél día podría ser el fin del Área 11.

     Los hombres de Cornelia se alarmaron cuando un Akatsuki entró a los laboratorios por la fuerza. Ni bien se encontró dentro de las instalaciones, Suzaku bajó del Knightmare dando un salto y echó a correr hacia el sitio donde el Lancelot siempre se guardaba. Los soldados de Britannia inspeccionaron el Akatsuki sólo en caso de que fuera una trampa enviada por la Resistencia. Suzaku hizo caso omiso de sus actitudes aunque deseó poder haber puesto un par de explosivos en el Knightmare. ¿Acaso no les bastaba con saber que él había bajado del Akatsuki y no uno de los hombres de Zero?

     Entró en la bodega donde Cecile miraba a Lloyd experimentar con su luminoso vórtice. Suzaku se detuvo en seco cuando vio las brillantes luces y la imagen que comenzaba a aclararse. Se trataba de un callejón oscuro. Las paredes eran de color púrpura y había un par de… ¿manchas? Manchas de un brillante amarillo verdoso. Una creatura pasó entonces frente al vórtice y los tres espectadores se quedaron sin palabras. Era una vela andante con ojos y boca. El primer pensamiento de Suzaku fue la palabra Digimon. ¿Acaso Lloyd era el responsable? ¿Ese vórtice era el portal que había transportado a Nene Amano y el Xros Heart?

     Tuvo que sacudir la cabeza para ahuyentar esas ideas. Lo único que importaba en ese momento era detener el ataque del Xros Heart. Así que abordó el Lancelot llamando la atención de Lloyd y Cecile, que no pudieron siquiera exclamar una sola palabra pues el Knightmare blanco salió volando por el techo del edificio, derrumbando las paredes de concreto y levantando una densa nube de humo.

     Mientras sus amigos intentaban contener al resto de los Knightmares, Yasyamon mantenía una pelea contra el Galahad. Su tamaño y complexión eran de mucha ayuda para esquivar los ataques del Knightmare, así como su velocidad. Desgraciadamente para él, el Knightmare tenía ojos y oídos en todas partes.

     Zero le indicaba a CC cuando Yasyamon pretendía escabullirse y atacar por la espalda, de esa manera podía bloquear todos sus ataques. Podría decirse que sus fuerzas estaban igualadas.

     — ¡Detrás de ti!  —gritó Zero en una ocasión y CC consiguió hacer girar al Galahad para golpear a Yasyamon con su espada.

     El Digimon cayó aturdido al suelo y tardó un poco en levantarse. Se incorporó de un salto e intentó golpear las piernas del Knightmare con sus espadas. De una patada, CC se liberó de él pero Yasyamon volvió al combate. Disparó entonces un Slash Harken que impactó de lleno a Yasyamon y lo perforó a la altura del estómago. Estalló en Datos y eso provocó que las pupilas de Ren se contrajeran por el horror de ver morir a su compañero.

     — ¡¡Yasyamon!!

     La atención del Galahad se centró entonces en Ren. Con los ojos anegados en lágrimas, el muchacho recogió una gruesa rama de madera, proveniente de un árbol que acababa de caer, y corrió hacia el Galahad para golpearlo con su improvisada arma. No consiguió provocarle si quiera un rasguño pues un par de las garras del Guren lo derribaron, haciéndole caer de espaldas, momento que CC aprovechó para dejar caer su espada sobre él.

     Ren gritó hasta que sintió que sus cuerdas vocales se desgarraban y dejó de existir al mismo tiempo que tenía lugar el estallido de sangre y vísceras.

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