Capítulo 35: Traición.

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Me quedé mirando cada movimiento que hacía con repugnancia. Caminaba de un lado a otro, murmurando cosas para sí.

Ahora sí que no sé qué es lo que le pasa al mundo.

Me encuentro de rodillas, con las manos atadas a la espalda, y una venda prohibiéndome hablar. A mi lado están Cris, Tyler, Connor y Ana, de la misma manera en la que yo me encontraba.

A Ana le pusieron un suéter para cubrirla, cuando ella nos encontró tratando de sacarla, cosa que rogué. Esos animales tuvieron alma por una vez en la vida. Me rehusaba a que los chicos la vieran así, Ana ya había sufrido mucho.

-¡Qué maravilla!-exclamó ella.- ¡Qué maravilla!

Ana gemía en voz alta, tratando de demostrar lo mucho que le temía a ella. Lo mucho que la odiaba.

A mí no me da miedo. Pero si ella le hizo eso a Ana, la mataré.

-¡Demonios Elle! ¡Por la forma en la que me miras, pienso que querrías matarme!- rugió ella, riendo.

Moví mi cabeza desesperada por decirle que se fuera al infierno, pero la venda estaba atada muy fuerte. Tanto que a cada que me movía para intentar soltarme, me rompía cada vez más el labio.

Ella vio con atención mis intentos de hablar e hizo un gesto de asco.

-¡Eres tan irritante! ¿Cómo la soportas, cariño?- preguntó dirigiéndose a Cris.

Cris la miró con aprensión, pero no se movió. Ella se fue acercando a él lentamente, tratando de intimidarlo, pero no puede.

A mi chico nadie lo intimida.

-¿Es verdad que...?-empezó a preguntar ella acercándose cada vez más a Cris, mientras yo echaba humo por las orejas.- ¿Es verdad que estás con este bombón?-terminó.

A Tyler se les salieron los ojos de órbita, mirándola como si estuviera loca. Cris, que antes tenía su cabeza lo más alejada de ella, ahora se le acercaba.

La miraba desafiándola, y ella rio.

-¡Oh! ¡Eres un pícaro!-dijo ella, y Cris ladeo su cabeza.-Veo en tu cara que te lo han dicho.-rió.- ¡Sean!, querido, quítales las vendas, siento que soy una loca que habla sola. ¿No creen?

El tal Sean empezó a desatarnos con tal velocidad que hizo que la abertura que ya tenía en el labio se hiciera más evidente para todos. Después de que nadie tenía impedimentos para hablar, ella empezó a reír.

-Veo que no tienen nada que decir.- dijo ella y dejó de reír abruptamente.-¿De verdad? ¿Ninguna pregunta?

-¿Por qué haces esto?-pregunté.

-¿Por qué?- rió.- ¿Por qué lo hice? ¡Eres una estúpida! ¡Nunca estuvieron un paso adelante, chiquilla!

-¿De qué demonios hablas?- pregunté con brusquedad.

-¡Oh por favor! ¡Dime que no te diste cuenta!-exclamó alzando las manos.

¿No me di cuenta?

Cris y Ana tenían la misma cara de confusión que yo.

-Paola...-empezó Tyler en tono de advertencia.

Paola lo miró y estalló en carcajadas.

¿Cómo es que Tyler no le está gritando? ¡Es su hermana madre santa!

-¿Qué? ¿No quieres que revele nuestro amor, cariño?- preguntó a Tyler riendo. Yo presté atención y vi a Tyler.

¿Qué mierda? ¿Amor?

Te Encontré.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora