C͛A͛P͛ÍT͛U͛L͛O͛ 13: Horror

144 5 9
                                    

"Oh, ye of so little faith
Don't doubt it, don't doubt it
Victory is in my veins
I know it, I know it
And I will not negotiate
I'll fight it, I'll fight it
I will transform"
-Katy Perry (Rise)

_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_*_

Si alguna vez te has subido a una Montaña Rusa muggle, o andado en una moto a toda velocidad por un camino de curvas, habrás tenido una mínima percepción de lo que se siente estar sobre ese lindo e impresionante corcel. Pareciera que volara, como un Pegaso mitológico, pero la diferencia es que hay agua y, no vuela, el caballo esta corriendo.

¿Se puede correr bajo el agua?

Tonks no lo sabe, pero tampoco le importa... Lo único que centra su atención es la magnífica piel brillante del animal.

¿Puede un corcel brillar tanto?
¿Puede tener la piel azul?
Y más aun, ¿puede respirar bajo el agua?

Había leído sobre Hipocampos, criaturas mitológicas, mitad caballo - mitad pez, pero este no tenía aletas, ni escamas.

De pronto, su brillante vehículo se detiene sacándola de su ensimismamiento. Al parecer llegaron a una cueva, una oscura cueva.

POV TONKS

Demonios.

Oh no, no. Se supone que debo estar nadando hacia la superficie, no metida en quién sabe dónde.

¡Qué gran idea Dumby!

Distraerme con un poni suave y de colores, ¡Bravo!

Lumus —noto los labios de la rubia pronunciar sin sonido alguno, con una gran burbuja rodeándole el rostro. Al menos no estoy sola aquí.

—¡Alessia! —exclamo algo asustada, aliviada y distraída por casi tropezarme con unas piedras.

—¿Qué es esto? ¿Dónde estamos? —vuelve a articular sin voz.

—No tengo idea —parece igual de perdida que yo.

—Y... ¿Y el <<cogcel>>?

—No sé... Lumus —la punta de mi varita irradia una pequeña luz que ayuda a la de Alessia, a iluminar un poco más la pequeña caverna— aquí no hay nada.

—Bueno <<fuega>> que nada... —me responde la rubia, gesticulando con los labios y mirando pasmada a un lugar cerca de mis piés.

Diablos...

Me quedo igual, o peor, de pasmada que ella.

Lo que casi me hace caer no eran piedras, son huesos... Y aunque no tuviera ningún conocimiento, cualquiera se daría cuenta de que no todos son precisamente de animales.

—Mon Dieu! —veo articular con angustia a la rubia.

Giro rápidamente a mi alrededor, con mi varita de cerezo apuntando a todas partes.

¡Tiene que haber una salida!

En cualquier otra situación, no me libraría de un gran dolor de cabeza por todos los pensamientos que invaden mi mente en este momento. Continúo girando desesperada, con una veela aún en shock a mi costado, hasta que logró enfocar un par de esferas amarillas, del tamaño de una pelota de los partidos de tenis muggle que suele ver en ocasiones mi padre.

Observó como las grandes esferas se van acercando, saliendo de la penumbra y mostrando una horrible silueta con cada centímetro alumbrado por mi varita, ya que la de Alessia dejó de hacerlo en algún momento.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 26, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Realidades InesperadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora