Capítulo 20.

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🎶Knock Knock Knock Knock on my door, Knock Knock Knock Knock Knock.🎶

-¿Es su móvil? - Cuestioné sobre los labios de este, más él suspiró al ver que paré el beso.

-Es mío, pero no iba a responder.- Se colocó de pie para poder tomar su móvil y responder la llamada.- ¿Qué? No... Hoy es mi día libre... Joder, bueno... Sí, sí... Sí, entiendo.- Mantuve mi vista fija en el en lo que hablaba por el celular, estaba bastante molesto al parecer. - Bebito, hay que irnos.

-¿Está todo bien? -Él movió su cabeza en señal de sí, saqué mis pies del agua y sujeté mi móvil y mis zapatos entre mis manos.- ¿Sucede algo?

-Necesitan de mí en el trabajo.- Él tomó sus cosas en sus manos y caminamos hacia la salida de aquel maravilloso parque.

- ¿No puede ir otro? - ¿Porqué? Era todo tan bello... Estarnos besando frente a ese hermoso lago.

-Lamentablemente no, pero ve a casa, y en la noche llego con una sorpresa, ¿sí? Andando.- Con muy pocos ánimos tuve que obedecer, era su trabajo, y gracias a él estaba donde estaba, era lo menos que podía hacer. Él se fue primero a su trabajo, por lo que yo tuve que caminar un poco para llegar al departamento.

En cuanto llegué había alguien dentro, justo estaba sentado en el sofá, era extraño..

-Disculpa... C-creo que te confundiste de departamento.- Murmuré un tango asustado por aquello. El chico giró a verme y rió negando. Se colocó de pie y se fue acercando a mí.- ¿Desea algo? P-puedo atenderlo luego...

-No chiquito, no puedes atenderme después, es algo que urge y que estaba esperando por esto.- Mi corazón se aceleró demasiado tras esas palabras, traté de retroceder y huir, pero alcanzó a cerrar la puerta antes, me sujetó con fuerza de la cintura, estaba doliéndome.

-B-basta... ¿Q-qué desea? -Lo empujaba con fuerza pero él no se alejaba para nada, al contrario, se acercaba más a mi cuerpo, su mano no tardó mucho en adentrarse en mis prendas, recorrió todo mi torso con esta, cuando encontró mis pezones comenzó a jugarlos. Dios mío, iba a violarme.- N-no me toque... Por favor... B-basta.- Me sujetó entre sus brazos, llevándome a la cama, ató mis manos con una corbata de YoonGi, las lágrimas corrían por mis mejillas, no podía hacer nada.

-Tranquilo, pequeño, solo marcaré mi territorio.- Me quitó la camiseta rápidamente, de nuevo comenzó a tocarme todo el torso, mis piernas pataleaban tratando de alejarlo. Carajo, este chico no se alejaba de mí.

-¡Basta! ¡Dejame! -De un momento a otro me golpeó la mejilla, me dolió.

-Si no te quedas quieto y si no te dejas, la venganza será con tu hermoso hyung.-
Mis lágrimas se apresuraron a salir más y más, no quería que le pasara nada a YoonGi, pero no quería esto.. No..

-No por favor... No...-Con agilidad quitó mi pantalón y mi ropa interior, dejándome desnudo ante él. No podía hacer nada, ya no había nada que hacer, así que cerré mis ojos dejando que hiciese aquello.

Mis lágrimas mojaban mis mejillas, yo sentía un dolor inmenso en mi cuerpo, era algo inexplicable. Cuando terminó, se vistió de inmediato.

-Gracias chiquito, esperemos que nada malo vaya a pasarle a tu querido hyung.- Besó asquerosamente mis labios antes de irse de casa.

No me contuve, mis lágrimas caían cual catarata, sentía una gran tristeza, me sentía sucio. Con dificultad me levanté de la cama, totalmente a dolorido, fui al baño y me metí a la ducha, en todo ese tiempo no había parado de llorar, y es que era tan horrible.

Cuando me duchaba escuché que abrieron la puerta de casa, fue algo que me asustó, pero al escuchar la voz de YoonGi, no sabía que sentir, tristeza, miedo, vergüenza...

-Bebé, ¿donde estás? Te traigo una sorpresa, como prometí.- Limpié mis lágrimas con las manos y cerré le llave de agua. Con cuidado salí de la ducha envolviendo de inmediato mi cuerpo con la toalla. ¿Debía contarle?

Abrí la puerta con lentitud y salí de inmediato del baño, al llegar a la habitación, pude verlo, su gesto era de dolor, lleno de tristeza al ver mi ropa tirada en el suelo y la cama manchada de semen...

-H-hyung...-No pude retener mis lágrimas las cuales salieron en ese instante.- U-un chico... E-entró a casa y... Y me tocó... Y..-Sollozaba muy rápido que no era tan fácil entender lo que decía. Sentí en ese momento como me abrazaba con fuerza.

-¿E-en serio pasó? Dime estoy soñando bebé y que no sucedió eso... Dímelo, pequeño.- Negué con mi cabeza aferrándome a él.- Joder pequeño... Carajo, esto es mi maldita culpa...

-D-dijo que si no... Que si no me dejaba... I-iba a hacerte daño..-Hundí mi rostro en el pecho de YoonGi. Sentía demasiado dolor, YoonGi me dejó unos minutos solo, en lo que me vestía, después de ello cambió las sabanas de la cama y colocó unas nuevas, nos recostamos en la cama, él acariciaba mi cuerpo gentilmente sobre mi pijama, mis ojos estaban hinchados de tanto llorar, pero era imposible parar.

-Mañana deberé ir a arreglar este problema ¿sí? Voy a acabar con esto, me están dando en donde más duele, mi niño...-Negué con mi cabeza sujetando su mano con suavidad.

-S-solo lo dejemos así... No me dejes más solo... Llevame contigo siempre...-Me apegué más a él, a lo que me abrazó más fuerte.

-Prometo colocar más seguridad en el departamento y cuidarte más, no volveré a cometer el error de dejarte solo... No más mi niño.- Cuando terminó de decirme aquello, unió nuestros labios, besándome con todo el cariño del mundo, su mano subió a mi mejilla, brindándome caricias delicadas ahí. Lo necesitaba más que nunca.

•| Niñero |• 《YoonMin 》 Finalizada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora