El intercambio (mi nueva vida en Hogwarts)

Comienzan las inscripciones

Y llegó el día en que hablaron del torneo de los 3 magos y destaparon la copa, dejando claro que quien quisiese participar debía de tener como mínimo 17 años y no debía tratar de engañar al sistema establecido.

En cuanto a Cedric, no parecía ya tan cabreado conmigo. No es que hubiésemos vuelto a hablar, pero al menos ya no me miraba iracundo. De vez en cuando se cruzaban nuestras miradas, y después de unos segundos la retiraba y seguía con sus cosas. En el fondo no sabía si era peor el rechazo o la ignorancia...

Era ya por la tarde y estaba junto a Hermione, Dria y Emma en el gran comedor leyendo algunos de los libros que nos habían mandado para unos trabajos cuando Cedric entró con unos amigos que le empujaban con suavidad hacia la copa. Cuando echó su nombre en ella sus amigos comenzaron a aplaudirle y yo lancé una pequeña exclamación ahogada. Él se giró hacia mi ceñudo y yo tragué saliva. No quería que se presentase. No es que tuviera nada en su contra, pero sabía que era peligroso.

Suspiró y se frotó la nuca.

- ¿Quieres que hablemos?.- me dijo evitando mirarme a los ojos. Yo asentí con rapidez y noté cómo Dria sonreía ligeramente.- ¿Por...la noche, después de cenar?

- De acuerdo...-dije con un hilillo de voz. Poco después Krum entró en la sala solo y echó con rapidez el papel en la copa tras mirar hacia nuestra dirección ligeramente. O tal vez fueron imaginaciones mías.

Pronto iba a anochecer y dejé el libro a mi lado mientras me estiraba ligeramente hacia atrás. En ese momento entraron al Gran Comedor (menudo día elegí para ponerme a estudiar ahí) los gemelos Weasley anunciando una nueva poción que engañaría a la copa y con la que podrían entrar en el sorteo de la prueba.

- No va a funcionaaaar....-dijo con musicalidad Hermione a mi lado.

- ¿Y eso por qué, querida amiga?- dijo Fred colocándose a su lado. Ella sonrió de medio lado.

- ¿Veis ese circulo? Está creado por el mismísimo Dumbledore. Unos trucos sencillos no van a engañarle.- dijo segura.

- Por eso creemos que funcionará. Porque es sumamente estúpido...- dijo George mientras Fred se levantaba. Brindaron el uno por el otro antes de bebérselo y después saltaron dentro del circulo y....no paso nada.

Alcé las cejas, incrédula de que realmente lo hubiesen conseguido y echaron sus nombres en el cáliz. Durante unos segundos todos creímos que realmente habían dado con la clave, pero entonces una luz roja salió de la copa y los lanzó fuera del círculo.

Tuve un atisbo de preocupación antes de que les empezase a salir barba y pelo largo blanco y todos los que estábamos ahí nos empezásemos a reír.

Sin embargo cuando comenzaron a pelearse entre ellos, me metí en medio y les separé enfadada.

- ¿en serio chicos? ¿Qué tal si pensáis menos en cómo poder pasar la prueba y más en cómo devolverme el dinero de la apuesta?.- dije alzando una ceja.

George me miró con el mismo gesto, pero no pude evitar tener que morderme la mejilla para no estallar en carcajadas. Cada vez tenía más claro que no iba a cobrarles al final. Pero no se lo iba a decir, obviamente.

- Podríamos habértelo devuelto si hubiésemos ganado el torneo.- dijo.

- Ya...seguro que es lo primero que teníais en mente...-puse los ojos en blanco, cogí mi libro y les di un golpe en sus cabezas huecas a cada uno antes de salir del gran comedor e ir a mi habitación para prepararme la charla con Cedric.