25. Matrimonio

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-Scomiche is real-

Lo que siempre Mitch soñó se volvió realidad, Scott ahora era su esposo y después de todo lo sucedido en el último mes solo quedaba iniciar un nuevo camino, el matrimonio, aunque la palabra lo atemorizaba un poco sabía que estaba preparando para lo que venía, y eso era amar y disfrutar de Scott.

-Mitchie estas bien, que piensas-

-Han pasado muchas cosas en tan poco tiempo, que siento que no he podido asimilar todo lo sucedido-

-Te arrepientes del comunicado de prensa, de continuar casados y como una pareja- preguntó Scott algo asustado de la respuesta

-No, es solo que, me acabo de dar cuenta que estuve a punto de morir, tu me conoces Scott sabes que es uno de mis grandes miedos que siempre me ha atemorizado la idea de la muerte y ahora me doy cuenta que estuve en ese punto, mi mayor miedo- Mientras Mitch explicaba a Scott lo que sentía su respiración se empezaba a entrecortar, sus ojos se llenaban de lágrimas y su voz se perdía en el aire

-Mitchie todo está bien, estas vivo, mírame por favor-

Pero Mitch no podía sentía miedo, sentía que algo malo iba a suceder que los demonios en su cabeza hacían fiesta mientras pensaba en lo sucedido

-Yo o o me pudeeee haber muertooo o oo-

Mitch lloraba y su voz se ahogaba con sus lamentos, un ataque de pánico estaba llegando y no pensaba irse fácilmente

-Mitch mírame te lo pido- Scott tomó el mentón​ de Mitch y lo levanto tratando de que este lo viera a los ojos

-Tu estas bien, vivo y conmigo nada va a pasar, tu vas a estar bien-

Pero esta vez las palabras de Scott no eran suficiente, sabía cuando no podría controlar a Mitch, ya que este empezó a hiperventilar el oxígeno de sus pulmones se agotaba y para Mitch era sentir que moria lentamente, entre los sollozos, lágrimas y falta de aire se le hacía difícil mirar los ojos azules del rubio, Scott sabía que tenía que hacer algo Mitch se estaba poniendo azul y seguro se desmayaría, tenía que evitarlo y hacer algo, aunque no quería lastimar al castaño lo levanto suavemente y lo acunó en sus brazos como si fuera un bebe, empezó a pasar sus dedos por la frente de Mitch susurrando palabras de aliento y amor.

Poco a poco, Mitch empezó a tomar aire, lentamente sus pulmones maltratados por lo sucedido hacia un mes sentía un descanso del esfuerzo que estaban haciendo, Mitch continuaba llorando y las lágrimas parecían no irse, Scott sabía que Mitch necesitaba descansar, una nueva visita al hospital no era ideal, así que suavemente recostó a Mitch sobre la cama, sin embargo Mitch se aferró a la camisa del rubio y no lo dejaba ir

-Mitchie, tengo que estar ir por agua, te prometo que no me voy a demorar más de un minuto-

-Perdón-

-Por qué te disculpas-

-Mereces algo mejor-

-De que hablas- Mitch lloraba incontrolablemente pero se podía entender lo que quería decirle a Scott

-Soy un desastreeeee, mereces alguien que no tengaaa aaaa ataques de pánico, queee no te te tenga tantos miedos, que sea normal-

Mitch se aferraba ahora a la almohada, que ahora se encontraba húmeda de tantas lágrimas, Scott se acercó y beso la frente de Mitch, para luego bajar y besar los labios húmedos por las lágrimas

-Tú Mitchell Coby Michael Grassi, eres perfecto, tú eres lo que siempre soñé, tú eres mi esposo y no podría estar más feliz de que así sea, Tú y solo Tú haces que mis días sean mejores, así que no digas esas cosas sobre ti, tú eres único, talentoso y hermoso-

Scott siguió plantando besos por toda la cara de Mitch, sin embargo este parecía no poder dejar de llorar, y por lo que Scott veía sus costillas empezaban a doler,.

-Lo entendiste-

Mitch asintió con la cabeza

- Voy por el agua-

Scott tomó el teléfono y antes de salir tomó la carpeta que le había sido entregada en el Hospital en Las Vegas, buscó entre las hojas rápidamente el número y lo marcó.

- Doctor Anderson-

- Si el habla-

- Es Scott Hoying, me recuerda-

- Por supuesto Scott, como esta Mitchell-

- Bueno, no muy bien hoy tuvimos que visitar Urgencias por que sus costillas se volvieron a lastimar, pero lo que más me preocupa es que acaba de tener un ataque de pánico y no deja de llorar, sus costillas están empezando a doler y no se que hacer, Mitch tiene un medicamento que le dio su psiquiatra para estos momentos, es un tranquilizante pero no se si estaría bien que se lo tome, teniendo en cuenta la cantidad de medicamentos que está tomando-
- Cuál medicamento es-

Scott le dio el nombre de este y de los demás medicamentos que estaba tomando el castaño

- Si Scott, no hay ningún problema, se lo puedes dar pero solo media pastilla no queremos que duerma demasiado-

- Muchas gracias por la ayuda lamento mucho molestarlo

- Scott no es ningún problema, esta bien preguntar antes de administrar un medicamento-

- Gracias-

- Cualquier cosa no dudes en llamar-

Scott regreso a la habitación con un vaso de agua y el frasco de pastillas en la otra, para encontrarse con Mitch que estaba a punto de levantarse de la cama

-Para donde creer que vas-

Scott dejó el agua y el frasco en la mesa de noche para correr a tomar a Mitch por la cintura y ayudarlo a regresar a la cama

-Pensé que me habías dejado, te iba a buscar-

-Mitchie- Scott lo ayudo a recostarse en la cama y lo cubrió con la colcha

-Sabes cuales son los votos en un matrimonio Mitch-

Mitch solo negó con la cabeza, bueno se que estábamos borrachos pero estoy seguro que uno muy claro que dice, en la salud y en la enfermedad, así que este es solo un mal momento, vendrán mejores-

Scott beso a Mitch y este lo abrazo fuertemente, Scott le pasó la mitad de la pastilla y Mitch lo miró con tristeza, hacía mucho tiempo que no requería que tomará una de estas era solo para situaciones extremas

-Solo la mitad y por hoy, necesitas descansar, no te voy a dejar en ningún momento-

Mitch tomó la pastilla y el agua, se acuno en los brazos de Scott y se quedó dormido escuchando los latidos del corazón de su esposo.

Escribí este capítulo en un vuelo, lo siento si no es el mejor

Mi Mejor AmigoWhere stories live. Discover now