Dreamcatcher

Postludio

▶️Bueno, esta parte no la tenía contemplada, pero mi hermosísima beta reader  @Hedwoken me insistió mucho en que hacía falta una parte... Así que esta última parte está dedicada especialmente para ella... Muchas gracias, amea, por tenerme paciencia y leerme con cuidado hasta el final,¡ ya sabes que te amodoro!

Espero que a las demás les agrade también esta última parte de mi fic, una vez más, gracias por leerme, se los agradezco en verdad mucho... Las loveo <3◀️

Jiyong verificó la hora una vez más en aquel costoso reloj que tenía puesto en la muñeca. Suspiró con calma y pensó que ya se lo esperaba. Pensó un momento en reclamarle a Seung, pero desistió por completo. Conocía perfectamente a su policía y aunque éste le había asegurado que aquella noche estaba libre de trabajo y que llegaría a tiempo, Ji había sospechado desde el inicio que tendría que esperarlo. Por esa misma razón se había entretenido unos 20 minutos más con el guapo Sr. Jawish, el dueño de la trasnacional con la que había cerrado un importante contrato hacía ya casi seis meses.

Si Jiyong no hubiese estado perdidamente enamorado de Seung Hyun, seguramente ya habría tenido más de una sesión caliente con el apuesto alfa que era su socio. Con un 1.75 de altura, cabello negro y ojos color chocolate brillantes, barba negra y cerrada y piel aceitunada, el Sr. Jawish era uno de los mejores representantes de los alfas árabes jóvenes y más cotizados que habían en el mundo, o por lo menos eso aseguraba la revista Forbes de aquel año. Jiyong sonrió con suficiencia. Cuando le había presentado a su socio, Seung Hyun se había enfurruñado toda la noche y, llegando a casa, se había asegurado de que cada centímetro de la piel de Ji oliera a él y no quedara ni el más mínimo rastro del Sr. Jawish. Aquella había sido una de las mejores noches de sexo que habían tenido y a veces Jiyong utilizaba el recurso del aroma de su socio para vengarse de su policía o simplemente para animarlo a tener una sesión especialmente caliente. No obstante, siempre tenía precaución de no ir demasiado lejos y la mayor parte del tiempo evitaba todo lo posible el contacto con el Sr. Jawish. Por su parte, Amir, nombre de pila del Sr. Jawish, a veces bromeaba un poco con su socio diciéndole que si su alfa no se apresuraba a casarse con él, probablemente se lo robaría un día de aquellos. Jiyong reía encantadoramente ante aquellos comentarios, pero luego se aseguraba de que Amir viera la marca que le había hecho Seung Hyun en su cuello, por lo general siempre pretextando que tenía calor, quitándose la corbata y desabrochándose los primeros botones de la camisa.

Jiyong suspiró un momento, lo que Amir decía como un cumplido era algo que le pesaba en cierta forma. Tomó otro trago de la botella de vino que se había decidido a abrir después de que habían pasado los 40 minutos de la hora acordada. Sabía que a Seung quizás no le gustaría la idea de que él hubiese abierto la botella antes, pero se había asegurado de comprar otras dos para evitar las quejas del mayor. Jiyong miró la puerta del departamento de Seung Hyun, con la esperanza de que por fin llegara, pero el policía seguía sin dar señales de vida. Tampoco lo había llamado ni le había mandado mensajes disculpándose. Eso sólo podía significar una cosa: Seung Hyun tenía un caso y no tenía cabeza para andar pensando en nimiedades. Nimiedades como que su omega le había preparado una cena romántica en su casa. Aunque en realidad, no era que Ji hubiera hecho la cena. Nunca había aprendido a cocinar en su vida, ese tipo de cosas eran habilidades que le habían enseñado a Dami y a Mina, pero no a él. Su padre siempre había pensado en él como en el futuro heredero del imperio de los Kwon y por lo tanto lo había preparado ampliamente para ello. Desafortunadamente para su detective Choi, esos conocimientos no incluían alta cocina ni repostería. Cuando Seung Hyun le había sugerido una vez que tratara de cocinarle algo, Jiyong había logrado que el agua que había puesto a calentar se evaporara toda. Su policía había terminado por pedir comida china y había aprendido que la combinación de Jiyong más cocina no era una buena idea.