Desbordando pasión

Reencarnado

El hombre mayor quedó viendo a su nieto como arropaba con sumo amor al chico en la cama, acariciando de su cabello algo desaliñado pero era lo más que puedo hacer. No reconocía al muchacho de la última vez que lo vió con barba y todo desaliñado era increíble lo que podían hacer aquellos barrios bajos. Suspiro sonriendo, no le causaba rechazo ver a Taemin estar tan cerca del otro hombre, él había sido testigo del dolor de su nieto menor, incluso llegó a colocarse en su lugar si él perdiera a su amada esposa estaría igual que su nieto, Jinki tenía razón cuando hablo con él sobre aceptar la condición sexual del menor, después de todo Taemin siempre sería su nieto y parte de su familia, no le hacía daño a nadie. Taemin parecía haber recuperado el brillo en sus ojos.

— Puedes quedarte aquí, diré que estás indispuesto por lo que no puedes bajar.
— Gracias abuelo -Taemin lo miro agradecido cuando el hombre ya se retiraba-
— Cuida de él, Taemin -Su abuelo le sonrió-
— Con mi vida.

El abuelo Lee salió de la habitación dejando a la joven pareja. Al estar solo Taemin dio un suspiro tranquilo, aún sentía las ganas de llorar, al ver a Minho tan maltratado. Había visto cuando el médico reviso su cuerpo, tenía hematomas por diferentes partes del cuerpo, no eran todos recientes incluso habían algunos que parecían de días, su cuerpo había perdido esa fuerte contestará que tenía solo quedaban sus costillas marcadas a su cuerpo y sus brazos y piernas delgados. Sentía que su corazón se partía por haber dejado que pasara esto pero si tan solo hubiese sabido que él seguía vivo lo hubiese buscado de inmediato, pero había sido engañado después se encargaría de resolver eso. Escucho la puerta cuando entró su abuela con un nuevo bol con agua caliente y unas toallas además algunas guantes tijeras le sonrió, entendía que ahora le tocaba arreglar al mayor, quería que se viera completamente bien.

Comenzó con cortarle el cabello y algo de la barba, cuando ya despertara Minho podría afeitarse y quedar menor, aunque el cabello no se lo podía lavar lo recortó hasta dejarlo demasiado corto, Minho parecía un muñeco cuando lo podía mover con tanta facilidad. Limpio el resto con suma confianza con los paños húmedo besando cada herida que tenía incluso se fijó una cicatriz que tenía definitivamente esa debía ser la de la bala. Suspiro cuando acabo de colocarle el pijama estaba completamente arreglado. Sin evitarlo se acercó besando sus labios aunque la barba le picaba no impidió que le siguiera besando entre lágrimas, lo había extrañado tanto.

— Te amo Minho -Dijo completamente enamorado-

Basto moverlo un poco para meterse a la cama con su esposo mirando como aún dormía, el médico le había colocado algunos medicamentos que le harían dormir hasta la mañana, quería verle despertar, con cuidado lo abrazo acercándose a él  le vio dormir tranquilamente preguntándose hace cuánto que Minho no dormía de esa forma. Dejo un beso en su mejilla acurrucandose a su lado para dormir pues al fin podía descansar luego de tanto tiempo.

💎

Posiblemente eran como las 10 am cuando el moreno comenzó abrir los ojos lentamente, sentía la cabeza pesada y no sabía dónde estaba, pero duró unos minutos desorientado cuando pudo comprender que se encontraba en una habitación, suspirando recordó que lo último que vio fue una patada directamente en el rostro antes de desmayarse, el hubiese peleado como en otras ocasiones pero llevaba muchos días sin comer nada y aquellas manzanas era cosa de vida o muerte, se había sentido débil. Entonces sintió una respiración a su lado haciéndolo erizarse pues no había visto que tenía alguien durmiendo a su lado. Aunque cuando giro se llevó una sorpresa.

Su hermosa joya estaba durmiendo tranquilamente a su lado abrazado a su brazo ¿Acaso era una ilusión o estaba muerto? Minho quiso llorar al pensar en que posiblemente estaba en el otro mundo, pero sentía el calor que emanaba el menor en su brazo, despacio estiró sus dedos tocando el rostro de Taemin gimiendo de miedo, era real. De a poco se fue parando para quedar encima del menor sonriendo ya derramaba lágrimas al comprobar que su Joya estaba allí incluso estaba mucho más hermoso que antes. No se resistió a besar la carnosa boca sintiéndolo tan real, incluso si fuera un sueño prefería no despertar.