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Erik, Logan, Wanda y Pietro vuelven de una corta misión junto a varios de los Vengadores

Después de la primera visita, y que Charles decidiera aceptar colaborar con el grupo de héroes, la misiones se habían hecho recurrentes y la camaradería había echado raíces.

Sin embargo, y luego de que la enfermedad y embarazo del dulce profesor saliera a la luz, su familia intentaba mantenerse lo más cerca posible.

Así que, desde hacía un tiempo ya, solo aceptaban misiones cortas y precisas, y a penas llegaban a casa, todos se dirigían hacia la biblioteca.

Porque allí estaría Charles esperando.

Esperando​por ellos.

Peter fue el primero en saltar, abrazándose al prominente vientre de quién le diese la vida y sintiendo a cambio las fuertes pataditas del ser que allí se formaba: de su nuevo hermanito, contra su mejilla.

Rió, cristalinamente, como el sonido de la primera lluvia de primavera.

Wanda también se acercó, con ademanes suaves, dejando un dulce beso sobre el pañuelo que cubría la cabeza de su progenitor; Charles había perdido el cabello debido a la quimioterapia.

Y aún así, ante la mirada de quienes lo rodeaban, lucia tan hermoso como siempre.

La piel aún estaba muy pálida, observó Erik, y también las ojeras bajo sus ojos eran aún notorias.

Pero, definitivamente​, se veía mejor. Había subido de peso, de notaba menos agotado y sus labios ya no estaban tan resecos.

Él se animó, beso a su esposo en los labios, amándolo cada día más.

Sus ojos brillaban de nuevo. Evaluó Logan. Su hermano se estaba recuperando a pasos gigantes.

Sonrió, porque él era demasiado importante, y se alegraba de saber que no iba a perderlo. No aún. Y esperaba que nunca.

Por el umbral de la puesta entraron muchos de los alumnos y amigos de Xavier.

Él sonrió, feliz mientras era rodeado y llenado de mimos.

Charles mantenía una rutina que no variaba mucho, entre sus tareas como director de un Instituto y miembro de una familia. Agregado a esas labores, él debía ir a la quimioterapia en la mañana y en la tarde Loki renovaba la protección a su hijo y ayudaba a hacer retroceder un poco más el cáncer.

Él era feliz, porque tenía el apoyo de todos a los que amaba. Además de haber conocido a mucha más gente (Héroes, espías, egocéntricos multimillonarios, dulces científicos con verdaderos monstruos por dentro  e incluso, por bizarro que sonara, dioses nórdicos) a quienes también quería como a una familia.

Lorna saltó, pegando también su rostro al redondo vientres y  al rostro de su hermano mayor.

Raven imprimió sus labios sobre la mejilla pecosa y Azazel apretó con cariño el hombro.

Kurt abrazo gentilmente las suaves manos y besó los nudillos.

Y Charles solo se dejó hacer, satisfecho y feliz, devolviendo miradas llenas de gratitud a Bucky, Banner y Loki, y algunas aprobatorias a Visión.

Una semana después, Peter correría con él, jadeando entre sus brazos, hasta los laboratorios, donde, horas más tarde, una nueva vida llegaría, llenando con su fuerte llanto la mansión y llenando de felicidad a sus habitantes.

Así mismo, luego de algunos meses, el doctor dictaminaría que Charles estaba, oficialmente, curado.

Y la vida seguiría su curso.

One month, and other. (Cherik)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora