Unpredictable ( Stiles Stilinski)

Capitulo 4 T2

—¿Que diablos es eso? —pregunta Lydia impactado al igual que nosotros.

—Es Erica —responde Scott.

—Claro que lo es—digo todavía mirándola.

Erica se va y los chicos corren tras ella.

—¿Quieres ir a casa de Allison? —me pregunta.

—Claro —respondo para enseguida tomar mis cosas y ponerme de pie.

Al llegar a su auto nos subimos y ella enseguida arranca.

—¿Por qué diablos Erica llego así? ¿ no que estaba en el hospital? —me pregunta ella.

—No lo sé —miento porque se quién tuvo que ver con esto y es Derek.

Al llegar a la casa de Allison ella nos abre la puerta para enseguida subir a su cuarto.

—Hoy Erica llegó cambiada totalmente —dice Lydia sentándose en un sillón.

—Eso es lo que supe —dice ella —¿Qué pasa con ese chico, Isaac?

—Creo que nada ya que ahora es un fugitivo —me encojo de hombros.

—Se veía un buen chico—dice Lydia mientras mira su teléfono.

—Pero no importa Piper tú eres una grandiosa chica —dice Alli.

—Lo se —tiro mi cabello hacia atrás.

—Claro —dice Lydia riendo a lo que yo le tiro una almohada y Allison también se ríe.

—¿Van a salir?—pregunta el señor Argent desde la puerta.

—Vamos a estudiar —responde Allison.

Alli y yo nos acercamos a él.

—Solo estudiar señor Argent —digo mirándolo.

—Entiendo —el pasa su brazo por nuestros hombros—Pero necesito que recuerden lo qué pasó.

—¿Quieres que dejemos de ser su amiga? —le pregunta Allison.

—Mejor dicho lo contrario —hace una mueca él —Se como suena esto, pero necesito que la vigilen.

—¿Quiere que la espiemos? —preguntó

—Solo que cuides a tu amiga y se aseguren de que este bien.

Nos damos vuelta para observarla y ella se está sacando fotos.

—Tengo que irme —le aviso a Alli.

—Adiós Lydia —digo a lo que ella me hace señas con las manos.

—Adiós Alli, Adiós señor Argent —me despido para bajar a la primera planta.

Salgo de la casa y camino hacia la mía.All llegar a mi casa me detengo y observó la de Isaac.

Camino hacia ella y empujó la puerta la cual está junta, subo al segundo piso donde en un cuarto hay una sombra.

—¿Isaac? —preguntó a lo que aparece él.

—¿Piper qué haces aquí? —pregunta.

—Quise ver si estabas aquí—digo mirándolo.

—¿No tienes miedo? —me pregunta.

—¿Porque lo tendría? Si tú no lo mataste —me siento en la cama.

—¿Como lo sabes? —me pregunta.