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Sabía lo que me esperaba, sabía que hoy moriría. ¿Por que? Porque esas chicas están locas, esperan el amor de tales monstruos como ellos, ellos no aman, tal vez lo hicieron antes, pero ya no. Y yo intentare cambiar eso... Pero no puedo... Soy una cobarde, tengo miedo de morir aunque lo deseo, y es que la impotencia se pone ante mí, y todo lo que quiero olvidar me golpea. A veces estoy tan cansada de vivir, cansada de todo y todos, me siento débil y impotente, estúpida, inservible...

Las palabras duelen... Mas que los golpes, eso lo aseguro. Pero.. ¿Por que a mí?.. Si yo sé que es cierto, sé que soy una idiota, inservible, cobarde, fea, gorda... Sé todo lo que soy. Y me duele... Una parte humana de mí lo reconoce... Pero otra lo desecha.

Impotencia...

Que palabra mas horrible, simple, pero dolorosa. Y cuando los veo... Me olvido de mi felicidad, porque... Miralos, destruidos, débiles, solos, impotentes... ¿Donde veo eso yo? En sus ojos, tan apagados y tristes... Tienen tanto odio que te da miedo dirigirles la palabra.

Yo... Quería cambiar eso.

¡Ha! Como si pudiese hacer algo... Después de todo...

¿Quien soy?

Yo ya no soy quien era antes... Ya no soy Yui.
Porque... ¿Donde quedo la joven que deseaba ser monja? Es estúpido... Lo sé, pero antes ante mis ojos mi futuro brillaba.

Y ahora... Sé que todo es falso, una mentira para que los humanos se sientan fuertes... Al menos por un momento, al menos para no caer en la oscuridad...

Y ahora... Aquí estoy, en la puerta de la mansión. Sí, vamos a ir a la escuela. Todos ignoraron el hecho de que hoy voy a morir... ¿Debería importarles? No... Para nada, cuando la comida de hecha a perder.. Compras otra, simple. Esa es su regla, y también aplica a mí.

Durante el camino nadie habló, no. Pero antes de abrir la puerta voy a decir algo, ahora.

— Hasta nunca... — dije mirando la entrada.

Todos me miraban extrañados.

— ¿Que planeas? — dijo Subaru con el ceño fruncido.

— ¿Yo? Nada... Ellas sí. — dije señalando con la mirada a la puerta del instituto.. Wow, que grupo mas grande. Está asegurado.. Hoy pierdo la vida.

Abrí la puerta dejando todo atrás, incluso mi vida. Avance con paso firme hacía la puerta, con la mirada en lo alto.

¿Que? Si moría hoy, quería sentirme fuerte al menos una vez.

— Ven aquí zorra — ... Lo sabía..

Pov normal

Yui fue arrastrada hasta el baño de mujeres contra su voluntad. Pateaba, gritaba... Todo para evitar morir... Pero una vez que la muerte toca tu puerta... No hay vuelta atrás...

— ¡Yui! ¡¿Donde estas?! ¡Aparece por favor! — ellos gritaban, la intentaban encontrar... Salvarla.

Pero ya es tarde.

La azotea... El lugar donde no hay nadie... Frío y silencioso..
Allí estaban, luego de golpearla brutalmente la arrastraron hasta allí.

— Oye, ¿Crees que las idiotas inservibles puedan volar? — la tenían acorralada contra la reja.

— ¿Y las feas y gordas? ¡Que va, probemos! — la arrojaron al vacío, cayó.

Perdió ante si misma. Podía salvarse, podía evitarlo. Ellos podían evitarlo. Pero uno se da cuenta de lo importante que tiene cuando lo pierde... Y la perdieron.

¿Su cuerpo? Nadie sabe que paso con él... Simplemente desapareció en la nada.

...

Lo sentimos... Nunca logramos entender tu dolor... Ahora ya es tarde... Serás un misterio sin resolver

¿Y ellos?

¿Sufrieron?

Ellos... Se echan la culpa cada día... Cada segundo de sus largas vidas.

Porque el que vive eternamente... Ama eternamente... Aunque esa persona muera, la seguirá amando... Hasta que su corazón deje de latir.



Fin.

Perdiendo La Fe ||Diabolik Lovers||  [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora