—De acuerdo, hagamos esto rápido y que Ian no se entere.—habló Alisson dirigiendose al porche.

—¿No sería mejor preguntarle a él si podría llevarnos?—´preguntó nerviosa Cloe, Ian se ponía muy delicado con su auto, si Eliotte le hacía un solo rasguño, sería ella quien pagaría las consecuencias.

—¡No hay tiempo! Vamos Eliotte, que tenemos muy buena suerte de que Ian guarde una llave de repuesto bajo su tapete.—apresuró la rubia jalando a sus amigos hacía el vehículo.

—Es bastante bonito, si me permiten decirlo. —comentó una vez que los tres estaban dentro del auto, él manejando en el asiento delantero y las dos chicas en los asientos de atrás.

—Deberás saber que mi hermano lo cuida con su vida y le llama bebé o nena a diario y que si le haces un solo rasguño probablemente te matará y luego me matará a mi.

—Esta bien, todo sea en nombre del amor.—respondió su amigo y Alisson le sonrió agradecida dandole un leve apretón de manos.

Una vez que Eliotte arrancó el vehículo, con su usual velocidad que te ponía los pelos de punta, Alisson no podía dejar de mover sus pies y revolver sus manos nerviosamente mirando hacia todos lados, llegó un momento en que Cloe, que se encontraba a su lado, le tomó las manos para que no siguiera moviendolas y le dio una mirada de reprimenda.

—¿¡Puedes parar de hacer eso? ¡Me pones nerviosa! — exclamó estresada.

—¡Yo estoy nerviosa! ¡¿Que tal si no llegamos a tiempo?! —respondió con honestidad mientras restregaba sus manos, la una con la otra de manera ansiosa.

—¡Oh por dios! ¿Esa es Kristell?—justo cuando la castaña estaba a punto de decir algo, la voz de Eliotte las interrumpió.

—Es verdad sí, si es —contestaron mientras veían a su amiga pelinegra corriendo con una ropa deportiva. Detuvieron el auto y ella se subió inmediatamente al reconocerlos, con una mirada confusa.

—Pero hace tanto que no te veíamos Kriss.

—Pues se han perdido de una parte muy interesante de mi vida, pero eso no importa ahorita...¿por qué lucen tan nerviosos? ¿robaron un banco o algo así? ¿por qué dejaron que Eliotte conduciera después de lo que le hizo a esa ardilla?

—¡No fue intencional! ¡Lo juro!—se defendió una vez más.

—¡Basta! Luego te explicamos, el punto es que estamos evitando que Evan se vaya para siempre de nuestras vidas.—resumió la ojiazul,.

—Me alegro, ya estaba cansada de esta situación, y también me alegra volver a verlos chicos, pensé que se habían olvidado de mi.

—No digas eso, solo que han pasado tantas cosas.

—Sí, ya me di cuenta...pero luego me contaran bien y espero todos los detalles esta vez Alisson.

Amor adolescente.Where stories live. Discover now