Se pusó a pensar en lo que había pasado las ultimas semanas, la verdad era que no había pasado nada del otro mundo ni mucho menos nada interesante. Alisson había vuelto al colegio, pese a no querer hacerlo del todo. Había tenido que ponerse al corriente con cada materia, hacer trabajos extras y exámenes parciales para no repetir el año. Aún sufría internamente la perdida de un bebé y también un amor no correspondido. En cuanto había llegado todos se habían lanzado hacía ella como si realmente les hubiese importado su ausencia, aunque estaba segura que no era así.

No dio más explicaciones de las necesarias, ni siquiera a sus amigos les había dicho la verdad. Por supuesto que no había comentado que alguna vez estibio embarazada, ni que estuvo deprimida por Evan, ni mucho menos que sufrió un aborto que fue la que la hizo hospitalizarse. Trató de confiar en sus amigas pero no pudo, en alguna parte de su corazón solo quería quedarse con el recuerdo de su bebé para ella misma. No podía llegar con Cloe y decirle "Cloe estuve embarazada, pero por mi culpa,  por no haber sido lo suficiente madura perdí a mi hijo, y lo más interesante del asunto el hijo era de Evan y el nunca se enteró"

¡Por supuesto que no podía decirle eso! Ni a ella, ni a Evan ni a nadie. Prefería guardárselo por siempre. Alisson tenía que admitir que esas semanas en el colegio habían sido días muy difíciles. Tratar con Evan como si no fueran nada más que compañeros, hablarle como si nada hubiera pasado. Y es que ella ya no sabía si en verdad lo amaba o lo odiaba. El también se encargaba de ignorarla, ni siquiera le había preguntado como se encontraba como todos los demás. Él no entendía el dolor de ella ni nunca lo entendería. Y cuando por fin se diera cuenta ya sería muy tarde. 

Suspiró aburrida, Cloe y Kristell habían ido al aeropuerto a recoger a su hermano junto con los padres de la chica, ella se había negado ya que no tenía humor. Según ella ya deberían de haber llegado y aún así todavía no hacian acto de presencia, haciendo esa velada más aburrida para ella. Solo había asistido a esa fiesta por Cloe, para apoyarla un poco ya que últimamente sentía un poco de culpa por ser tan mala amiga, no iba a negar que también quería ver a Ian y lo más importante para demostrarle a todo el mundo que ya no le importaba Evan, aunque eso era mentira aun le importaba y mucho, pero le había prometido a su bebe que seguiría adelante y no se daria por vencida. 

  

Por más que quiso evitarlo, terminó poniéndose el maldito collar que le había regalado Evan cuándo eran novios, ni siquiera sabría con exactitud porque se lo terminó poniendo, muchas veces intentó tirarlo por el inodoro, pero le fue imposible deshacerse de él, quizás porque le recordaba épocas felices, cuando Evan la quería o por lo menos fingía quererla. Por donde pasaba, todos se le quedaban mirando, realmente se veía hermosa, pero a ella le importaba poco, solo quería que esa fiesta terminará para irse a su casa y llorar como hacía desde que la dejo Evan y desde que había muerto su bebé. Por él día ella era un muro indestructible, frente a todos era la fuerte Alisson que siempre había sido, pero cuándo era de noche y estaba sola en su habitación se ponía a llorar como magdalena sin parar. 

Aún asi, la forma en que caminaba la hacía lucir completamente segura de si misma, como si ya hubiera superado lo de su aborto, así de fácil. Aunque claramente no era asi, aún seguía reprochándose muchas cosas . Nadie además de su padre se había enterado del aborto de Alisson, él le había dicho que no se preocupará que aún era muy joven y tarde o temprano olvidaría a Evan y alguien mucho mejor la haría felíz. No estaba segura de querer volver a enamorarse nunca, se conformaba con poder olvidar a Evan, no tenía cabeza como para pensar en el amor nuevamente.

Amor adolescente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora