Capitulo 26

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Mis lagrimas cesan por un momento. Puedo notar que no estoy sola, y eso me asusta.

Me levanto con cuidado del suelo y me acerco hasta la ducha, abro la mampara y...

— Amiga, perdoname por asustarte, y siento todo lo que te dije, solo estoy aquí para ayudarte, que feo eso de que Christian quiera deshacerse de vuestro vip. — Las palabras de Leila me dejan en shock, pensé que estaba en un psiquiatrico, Christian me lo dijo.

— Leila...¿cómo has entrado?. — Pregunto y me llevo la mano al vientre para proteger a mi bebé. No me puedo fiar de ella.

— Por favor amiga, no te voy a hacer nada, es cierto que lo que me hicisté estubo fatal, pero eres una buena amiga, y quiero ayudarte, si quieres tener a bip, lo tendrás, puedes contar conmigo. — Leila me tiende su mano. La verdad es que me encuentro sola en esto, parece que todos quieren que bip desaparezca, menos yo, y ahora Leila quiere ayudarme, ¿me puedo fiar?. Es tanta la desesperación por qué mi hijo nazca, que la doy mi mano. Espero haber hecho lo correcto, esto lo hago por bip.

— Pero Leila, ¿por qué has entrado así, si tus intenciones son buenas?. — Pregunto dudando de sus buenas intenciones.

— Por Christian, él no me aguanta, y menos si sabe que no estoy de acuerdo con él en que abortes, ¿sabes?, si estubiera en tu lugar, haría lo que sea por mi hijo. — Leila logra convencerme con sus argumentos.

— Vale, ¿y como piensas ayudarme?, Christian dice que sí tengo a nuestro hijo, puedo...morir en el intento, no lo ha dicho con esas palabras porque no puede ni pronunciar algo así, pero sé que se refería a eso, el caso es que quiere que bip desaparezca. — Vuelvo a llorar de nuevo.

— Vaya, ¿y que vas a hacer?. — Pregunta Leila mirandome compasiva, aún no sé si me quiere ayudar en serio, pero es la única que veo que intenta ayudarme en esto.

— Pues tener a bip, porque eso que dicen de que estoy mal, es mentira, yo estoy perfectamente, bip está bien. — Trato de autoconvencerme de lo que digo.

— Ana, en serio, estas ideal, te están mintiendo para que no tengas a bip, porque Christian tiene miedo a ser padre, y eso es muy egoista. — Las palabras de Leila casi me convencen.

— Ya, ¿Pero por qué la doctora ha dicho eso?, ¿que gana ella?. — De nuevo tengo dudas.

— Por dios amiga, la doctora es su madre, está de su parte, tienes que ser fuerte Anastasia, no te dejes vencer, sé que amas a tu hijo, y deves traerle al mundo. — Me acaba de convencer Leila. Tiene razón, me están mintiendo, bip tiene que nacer.

— Gracias Leila, eso haré. — Limpio mis lagrimas.

— Eso es amiga, y de nada. — Leila me sonrie.

— Oye, ¿cómo piensas ayudarme?. — Pregunto nerviosa. Christian está por venir, lo presento.

— Tiempo al tiempo Ana, ya tienes mi número, llamame. — Leila vuelve a esconderse tras la mampara al escuchar los gritos de Christian.

— Anastasia, abre la maldita puerta. — Grita Christian.

Abro la puerta y llevo a Christian a nuestro cuarto para que Leila pueda irse.

— Ana, hablame, se que esto te duele, pero tienes que hacerlo, no quiero perderte. — Christian me da un tierno beso en la frente.

Decido seguirle la corriente.

— Lo sé Christian, sé que lo haces por mi, y no vas a perderme. — Fingo que voy a hacerle caso

— Dios mio Ana, menos mal, me muero si te pierdo, te amo. — Christian me abraza y yo le correspondo el abrazo. Cierro los ojos y una lagrima resvala por mi mejilla al pensar que el hombre al que amo, es un mentiroso y un falso, y sé ha inventado esto porque no está preparado para ser padre. Por dios, ¿yo en riesgo por tener a bip?, imposible...

— No vas a perderme Christian. — Le abrazo e intento olvidar lo que está haciendo.

Christian me coge en sus brazos y vamos a la cocina, se ha empeñado en que debo de ser fuerte para lo que viene. No sé va a salir con la suya, voy a tener a bip aún que sea lo último que haga.

Christian se marcha un momento y recivo un mensaje de Leila, si supiera Christian lo que estoy haciendo, se enfadaría muchisimo, pero ¿que otra cosa puedo hacer?, quiero a mi hijo y quiero tenerle.

"Escucha Ana, creo que Christian te va a mandar a la consulta para que abortes, tienes que hacerle creer a Christian que vas a hacerlo, y cuando vuelva a por ti, porque obviamente no dejaras que vaya contigo, le mentirás y le dirás que lo has hecho"

Un escalofrio se apodera de mi al leer su mensaje, todo está pasando muy rápido. No me puedo creer que Christian quiera que me deshaga de bip hoy mismo.

Justo vuelve Christian. Leila tenía razón, me ha conseguido cita en una clinica privada.

— Christian, quiero ir sola, por favor, lo haré, pero tienes que déjarme que lo haga a mi manera. — Intento ocultar mi enfado.

— Está bien Ana, Taylor te llevará, estaré aquí si me necesitas. — Christian finge estar mal por todo esto.

— Vale. — Contesto sin más, y me marcho con Taylor a la consulta.

Cuando llego al hospital, Taylor se queda fuera y yo espero varias horas en la cafeteria del hospital. Cuando salgo, fingo estar llorando.

— Siento que haya tenido que pasar por esto Señorita Steele, la juro que el Señor Grey quería a su bebé, pero es tanto su amor por tí, que ha tenido que elegir tu vida, debe entenderle. — Se atreve a decir Taylor.

— Lo entiendo Taylor. — Miento. Nadie puede enterarse de que aún estoy embarazada.

Durante el camino a Escala, no digo nada. Me dedico a pensar en como lo voy a hacer, queda poco para que se note mi embarazo.

Lo tengo todo planeado, Leila me ha conseguido una doctora que llevará mi embarazo a partir de ahora. Con respecto a Christian no sé que voy a hacer.

Llegamos a Escala, y Christian me espera sentado en el enorme sofá de la sala, alicaido. En cuanto me ve entrar, se acerca hasta mí y me doy cuenta de que ha estado llorando.

— Ya está Christian, lo he hecho.

Buenas noches, os dejo nuevo capitulo.

Besiis

Embarazada de mi jefe (Terminada)Where stories live. Discover now