Beast II |Negan-TWD|

twenty one

Dias después...

Camino hacia la entrada del macabro lugar arrastrando mis pies, no escucho nada más que mis pasos y las hojas secas que el viento mueve. 

Silencio típico. 

Seguramente cometí el mayor error de mi vida al escaparme de aquel lugar donde Ben y yo estábamos ya hace 5 días. Sí, había dejado el Santuario atrás y no pensaba volver, no ahora. Quería mostrarle a Negan que por ser su mujer no voy a ser un títere. No más. 

Decidí dejar a Ben allí porque no es seguro ni para él ni para esta gente que yo venga acompañada, había dejado una nota diciendo que iba a volver, pero no era así. Solo no quería que él fuera corriendo a decirle a Negan que me había escapado. Escapar... como si fuera una maldita prisionera. 

Doy unos pasos más y decido descansar, me siento en el piso y abro mi mochila. Cuando saco un paquete de galletas cuando veo que un sobre cae encima de mis piernas. Que raro, nunca lo había visto. Al abrir el sobre cae un paquete de cigarrillos y un anillo, el anillo que Negan me había dado y yo lo deje antes de salir. ¿Cómo...? 

"Espero no estar equivocado, pero un día me dijiste que amabas estos cigarrillos... Los conseguí especialmente para ti nena.

Espero que no te saques nunca más ese anillo del dedo, pontelo. 

Negan" 

Sin poder evitar una sonrisa se hace camino entre mis labios, por un momento me imagino a Negan escribiendo esta carta furioso cuando encontró mi anillo en su escritorio. Vuelvo mi atención a los cigarrillos y recuerdo cuando amaba fumar, antes de que empezara la mierda esta. Pero ahora ya ni sé lo que es colocarlos en mi boca, ya no me atrae más. Además estoy segura que si comenzara a fumar, no podría correr ni 100 metros. 

Suspiro y los vuelvo a guardar en la mochila, seguro puedo cambiarlo por algo. De repente escucho un ruido seco y siento algo frío en la nuca. Mierda. 

-- ¿Pero que belleza tenemos por aqui...? -una voz rasposa invade mis oidos y yo siento nauseas.- 

-- Callate Ros, es una amiga.