Capitulo 9: La pesadilla

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Abrió la puerta despacio, tratando de no hacer ruido. Miro al interior, la oscuridad en la habitación, se adentro y cerro tras, de nuevo sin hacer ruido.

-No vengo a matarte, aunque ganas no me faltan -Hablo, mientras caminaba hacia el centro de la habitación.

-¿Y entonces a que vienes? -Eder aun con la daga sujeta en su mano, se incorporo en la cama

-¿Un trago? -Mail dejo la botella sobre la mesita que había en el centro de la habitación, tomo dos sillas y coloco ambas en torno a la mesa, una a cada lado -Suelta la daga y ven a beber.

-¿Me invitas a beber? -Eder soltó la daga y se arrastro por la cama hasta llegar al otro lado, salió de ella y camino hasta la silla -¿Yo hago que mi hermana rompa el compromiso y tú me invitas a beber?

-No me provoques -Mail señalo la silla, mientras se acomodaba en la suya

-Bueno, veamos que pretendes -encogiéndose de hombros él, se sentó y cruzo los pies. -¿Y bien?

En silencio, Bukchaman, tomo la botella, la abrió y vertió el liquido en las dos copas, después volvió a dejarla en la mesa y bebió de un trago. Cerró los ojos un instante e inspiro aire.

-Siempre te considere mi mejor amigo -dejo la copa sobre la mesa y le miro -Cuando tu padre escogió el bando del Diablo, apoyando a Archivald, lo considere una traición. Cuando años más tarde te busque, para que hicieras a tu padre cambiar de opinión...

-Creíamos que estabais cegados por el dolor -Eder miro el liquido en la copa -Y lo estabais, reconócelo -bebió de un trago -Si, teníais razón, Archivald mato a los padres de Niara y a ella... Nosotros nos equivocamos, estuvimos en el bando equivocado. Pero estabais cegados por el dolor, queríais venganza, a toda costa, contra quien fuera. -Esta vez fue el, quien lleno las copas.

-Sentí la muerte de tu padre -Mail vio como el apretaba la copa en su mano -Nos sentimos culpables cuando lo supimos...

-Lo sois -bebió de un trago -En parte lo sois. -le miro a los ojos -Si hubieras oído nuestra petición, si nos hubierais ayudado. Con vuestro apoyo, los rebeldes no nos habrían atacado o por lo menos no hasta ese punto.

-Y si vosotros os hubierais puesto de nuestro lado, quizás mi prima hubiera estado de vuelta en casa y nunca hubiera sufrido, lo que...-bebió de su copa -Tomamos nuestra decisión, basada en el resentimiento, por lo que vosotros decidisteis. Y cargaremos con la muerte de tu padre....

-No se trata solo de la muerte de mi padre -el cerro los ojos, con fuerza -Muchas cosas cambiaron desde entonces.

-La forma en que sobrellevamos todo eso, trajo aun más dolor -Mail dejo su copa en la mesa -Nos dimos la espalda y hoy cargamos con todo lo que eso causo. -abrió la botella y volvió a llenar las copas, tomo la suya -Quiero casarme con tu hermana y ella quiere casarse conmigo.

-Causamos daños a quien nos lo causa y a quien lo causamos no los causa de nuevo, nunca acaba -Eder paso las manos por su rostro, recordando esas palabras. Las aparto y tomo su copa para beber de un trago -Si, mi rencor me impide dejar que te cases con ella. Pero hay más.

-¿Que? -Mail bebió de un trago.

-Miedo -ambos se miraron fijamente -Miedo a que esto no sea más que una venganza, por haber descubierto que Niara estaba viva, que teníais razón y que yo, no te apoye.

-No lo es -el negó con la cabeza -Quiero a Ayla a mi lado, quiero a nuestros clanes unidos. Quiero que ambos dejemos atrás, lo que hicimos y lo que no.

La EsposaWhere stories live. Discover now