Capítulo XIV

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Llevar a dormir a KyungSoo costó más de lo que había imaginado, KyungSoo estaba pesadísimo, se notaba que comía bien. KyungSoo rodó el cuello de JongIn con ambos brazos mientras el moreno batallaba con soportar su peso.


— Tú hombreeee, yo niñoooo, nos separan casiii veinte añooooooss... —cantaba en su oído para después acercar sus labios a su oreja y chuparlo descaradamente.


JongIn se sintió estremecer y trato de alejar a KyungSoo, quién enfadado lo miró mientras fruncía el ceño.


— Es porque no te gusto, ¿verdad? —comentó atropelladamente.


El más alto suspiro pero no le contestó nada, siguió avanzando por el pasillo y después entró a la habitación del bajito, dejándolo con cuidado en la cama. Cuando intento ponerlo más cómodo, quitándole la ropa, KyungSoo le manoteó, impidiendo que lo tocara.


— ¡Déjame! ¡Vete con ella! ¡Tú sólo me ilusionas!

— ¡KyungSoo! —alzó la voz y el pelinegro lo miró directo a los ojos— Sólo quiero que duermas cómodo, ahora por favor coopera.


KyungSoo ya no dijo, ni hizo más. Simplemente se quedó tumbado sobre el colchón de su cama con la mirada perdida. JongIn fruncía el ceño cada tanto, mostrando que estaba concentrado en cambiarle la ropa y en no pensar en lo deliciosa que se veía la piel lechosa de KyungSoo.


Sus manos temblaban ligeramente al ponerle el pijama, trataba de abstenerse de pasear sus dedos por la piel ajena y dirigirlas a lugares más escondidos. Para cuando terminó de ponerle la ropa, KyungSoo se alejó de JongIn y se metió adentró de las sabanas, dándole la espalda y se tapó hasta la cabeza.


KyungSoo tenía los ojos abiertos a pesar de estar cubierto por las sabanas, escuchó como JongIn apagó el interruptor de la luz y después reino el silencio. KyungSoo pensó que el moreno ya se había marchado y cuando estaba por soltarse a llorar, sintió un peso extra en el colchón y después los brazos de JongIn le rodearon la cintura, pegándolo a su pecho.


KyungSoo sintió que podía ponerse a bailar de la alegría, pero aún estaba borracho y cansado, así que se pegó lo más que pudo a JongIn, al grado de quererse fundir con él y se quedó dormido.


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KyungSoo estaba acostumbrado a dormir a sus anchas, toda su vida había dormido solo, ni siquiera cuando tenía sexo en aquellas noches de locura se había quedado con la persona en turno a dormir. Así que cuando a las 7:30 de la mañana, trató de estirar sus extremidades, pateó accidentalmente el estómago de JongIn.


El moreno planeaba despertar antes de KyungSoo, admirar su belleza, compararla con la de un bello atardecer y luego despertarlo con muchos besos en la mejilla, pero no, la patada le había sacado el aire y KyungSoo se había estado riendo porque "Te ves más negro por la falta de aire"


— Ya en serio —empezó mientras se limpiaba una lagrimita— perdón.

— Tenía que haberlo imaginado, Do KyungSoo no es normal —dijo JongIn mientras se sentaba en la cama y sobaba su estómago.

Differents ways. [KaiSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora