Capítulo 33

7.2K 345 62
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Frunzo el ceño sintiendo mi cabeza martillear, intento llevar mi mano a ella pero hago una mueca cuando mi mano se encuentra atada a mi espalda.

Abro los ojos y sólo hay oscuridad, frunzo el ceño sintiendo ruido a mi alrededor.

-¿Qué cojones?-Murmuro cuando escucho el paso de unos tacones, llevan unas manos a mi cara y apartan la tela que hay en mis ojos.

Cierro los ojos con fuerza acostumbrándome a la luz, miro a mi alrededor y mi ceño se frunce al tener delante de mí a las personas que no pensaba que fueran a hacerme esto.

-¿William? ¿Kattia? ¿Se puede saber qué cojones estáis haciendo? ¡Soltarme ahora mismo!-Grito, la rubia sonríe de lado satisfecha mientras que William se mantiene serio.

-Oh, no te haces ni una idea del tiempo que llevábamos esperando este momento.-Dice la rubia.

-¡Éramos amigas!

-Tú lo has dicho, querida. Éramos, pasado.-Dice bajando una mano a su vientre, mi vista se agranda cuando me doy cuenta de que se encuentra muy abultado.

-¿Estás embarazada?-Ella sonríe de manera burlona.-¿Qué es todo esto?

-Claro que estoy embarazada, cariño. De seis meses igual que tú, ¿Verdad?-Dice acariciándolo con cariño.-Es un niño.-Sonríe de manera burlona.-Y el por qué estás aquí... ¿Recuerdas esa pequeña mafia que tan sólo quería vuestra ayuda? 

-¿La mafia inglesa?-Ella asiente.-¡Esa mafia nos traicionó, Kattia!-Exclamo, ella sonríe de nuevo de lado.

-No me llamo Kattia, estúpida.-Escupe acercándose y sentándose frente a mí.-Soy Kate Goldberg, y ahí tienes a Keith Golberg, mi querido hermano mayor.-Dice señalándolo con la cabeza, lo miro a él también con dolor.

-Pensaba que éramos amigos.-Murmuro.

-Tu familia mató a la nuestra, ¿Y qué mejor manera de devolverlo que matando a su querida bebé del alma? Esa bebé que tanto buscaron y que con tanto cariño hicieron.-Dice ella.-La última vez los impertinentes de mis compañeros no pudieron acabar contigo porque tu papi logró encontrarte.-Dice haciendo un falso puchero.-¿Dónde está papi ahora?

-¡Zorra!-Intento moverme en la silla pero sólo consigo hacerme daño en las muñecas por los movimientos tan fuertes y bruscos que hago.

-No, no, cariño. Era puta, no zorra.-Dice ella rodando los ojos.-Las cosas que hago para lograr lo que quiero.

-¿Fuisteis vosotros los que me secuestraron hace años?

-Gente que contratamos para eso cariño pero parece ser que nosotros tuvimos que realizar el trabajo.-Dice ella suspirando. Me sonríe.-No te haremos daño físico, cuando mueras queremos que lo hagas con tu querido bebe que tienes en el vientre.-Me sonríe, dios, ¿No le dolerá a la gilipollas sonreír tanto?-Es una hermosa niñita, ¿Verdad? De seguro hereda tus hermosos rasgos castaños y mirada castaña, o puede que saque el mismo color de ojos que su papá, ¿Te la imaginas?-Muerdo mi labio inferior con fuerza.-Lástima que no vayamos a verlo nunca.

DANGEROUS ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora