CAPÍTULO 19.

31.8K 2K 223
                                    


           

CAPÍTULO 19.

*CAPÍTULOS FINALES DEL LIBRO*.

EMMA:

Después de todo lo sucedido con los hijos de Caín, Aiden ha estado totalmente paranoico, me hizo mudarme a su habitación, y dejo de ir a su empresa para cuidar de mí.

La herida en mi frente y labio había desaparecido esa mañana cuando me mire al espejo, sabía que eso significaba que mis ojos se había puesto dorados en algún momento sin que yo, o alguien más se diera cuenta, fue cuando todo cayo en el lugar indicado y cobro sentido para mí.

El ángel puede sanarse a sí mismos, yo soy en parte ángel. El cambio de mis ojos, esa es mi pate ángel sanando mi cuerpo. Por lo que ahora estamos, Rose y yo, intentando averiguar cómo fue que active el poder del ángel la primera vez.

-          Concéntrate y piensa en ¿sanación? - abro mi ojo derecho elevando al mismo tiempo mi ceja, Rose se encogió de hombros. Sabía que estaba intentando ayudarme a activar mi don de ángel, pero para activarlo no solo tenía que pensar en...sanación.

-          No creo que pensar en sanación en realidad me sane mágicamente.

-          Bueno, no tengo idea de cómo ayudarte, eres la única humana en la tierra que posee dones de curación diseñados por Dios.

-          Tiene que haber algo que nos pueda guiar. - dije pensando.

-          No, Emma. Busque en todos los libros existentes en el mundo: Como activar el don, dones de ángeles, la leyenda del ángel caído y la profecía del ángel; no hay nada ahí que diga como activar la sanación de tu cuerpo.

Cerré mis ojos en un intento desesperado por calmarme, este tema me estaba poniendo los nervios de punta, no quería que esta posible luz de esperanza se fuera tan rápido como llego a mí.

-          ¿Emma?, estas brillando.

-          Que graciosa eres, Rose. Juntarte tanto con Jacob definitivamente te está empezando a cobrar factura.

-          Estoy hablando enserio, abre tus ojos y mira tú brazo. - aun dudando abrí mis ojos primero mirando la cara de Rose para evaluar si me estaba mintiendo, su mirada en mi me asusto por lo que desvié la vista hacia mis brazos y piernas desnudas debido a mi blusa de tirantes y short negro.

Efectivamente, estaba brillando, pero no era una luz intensa, sino más bien tenue. Brillaba haciendo lucir a mi piel como si tuviera un foco pequeño de luz amarilla dentro de mis brazos y piernas. Lentamente me levanto del piso frio en donde me encontraba y me dirijo al baño donde me coloco frente al espejo, igual que la última vez mis ojos habían cambiado de color, un color idéntico a la luz de desprendía mi cuerpo, un dorado.

La luz se empezó a ir, y a su paso se llevó todos moretones o hematomas de mi cuerpo había vuelto a generar, el color pálido fue remplazado por un bronceado suave, mis ojeras se eliminaron y mi cuerpo de a poco empezó a recobrar su vitalidad. La vitalidad del ángel.

Lleve mi mano lentamente a mis brazos, donde anteriormente los moretones cubrían la mayor parte de él, ahora no había rastro alguno de que hubiesen, alguna vez, estado allí.

La felicidad llego de golpe y se fue de la misma manera cuando sin poder evitarlo un ataque de tos llego a mi cuerpo, coloque mis manos en la encimera del baño mientras me inclinaba, debido a la tos, hacia el lavamos, una sustancia negra espesa y caliente salía de mi boca cada vez que tosía.

INMORTAL ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora