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Capítulo dos.

—No voy a poder soportar medio año de rodaje con ese tipo. —me queje saliendo a grandes zancadas del edificio.

La reunión había terminado. Luego de más de dos largas horas dentro de la sala de conferencias, Tanner, yo y algunos jefes de cámara y producción firmamos el contrato. Se nos entregó a cada uno una copia del libreto. El rodaje comenzarán dentro de, aproximadamente, tres semanas y continuaria por seis largos meses.

Comenzaba a arrepentirme.

Antes de que Hector pudiera contestarme, una ola de reporteros  se abalanzaron sobre nosotros tratando de saber lo ocurrido.

Las preguntas y flashes se disparaban sin compasión y me límite a mantener la boca cerrada.

Un gran hombre de seguridad abrió camino entre los reporteros y fotógrafos para permitirnos el paso. Caminamos unos metros con algo de dificultad y finalmente llegamos hasta mi coche, que gracias al cielo no había sufrido ningún daño, o eso creo.

—Cariño, no puedes dejar de lado lo que más ama por un muchacho que juzgas sin conocer. —dijo Hector cuando ambos estuvimos dentro del coche.

Tenía razón, nunca nada me había impedido seguir con lo que amaba, incluso mis padres, o Tanner.

—Créeme Hector, no me dió una buena primera impresión. —afirmé y arranque mi coche.

Hector no me respondió, no porque tuviera razón, sino porque era demasiado terca. Prefería quedarse callado y dejar que crea mis propias conclusiones, antes que comenzar una discusión interminable.

Durante el resto del camino ninguno de los dos volvió a omitir una palabra.

—Iremos a esa fiesta el Sábado. —dijo Hector bajando del coche una vez que estacione en frente de su casa.

Lo miré con confusión.

¿Fiesta? ¿De que estaba hablando?

—¿Qué ocurre con tu memoria? —me regaño mirándome por la ventanilla del auto. — McCartney dijo que el sábado celebrará una fiesta para que todos los que iban a participar de la película tuvieran la oportunidad de conocerse, ya sabes, como una adaptación. Irán productores, jefes de cámaras, actores, incluso irán quienes participan de extras. —explicó moviendo sus manos de un lado a otro. — Irán fotógrafos y reporteros, ya que se dará a conocer el proyecto y quienes van a participar ¿Realmente pasaste por alto todo lo que dijo el calvo?

Joooder.

—Yo me distraje cuando tocó ese punto, solo eso.

—Tendrás que sonreír toda la noche y mostrar lo mucho que aprecias a tu compañero de trabajo. —dijo entre risas.

—No creo que dejen pasar a cualquier reportero o periodista ¿Sabes quienes estarán allí?

—Más o menos, dijeron algo sobre Billboard, The Hollywood Reporter, Cosmopolitan, InStyle, Interview, L.A. Daily News, Los Ángeles Times, Newsweek, Variety...

La lista era interminable, maldita sea.

—Ya no sigas... —lo interrumpí. — Iremos... hasta las dos.

—No jodas Cam, comenzará luego de media noche. —lloriqueo como un niño pequeño.

—Por mi quédate toda la noche, yo saldré de ahí cuando sienta las mejillas entumecidas de tanto sonreír. —arranqué el Porsche 911 antes de que dijera algo más.

***

Mi celular vibró sobre mi mesita de noche. Lo tomé para comprobarlo y una notificación de whatsapp apareció en la pantalla.