20/Julio/2012

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Hoy es mi cumpleaños, hace unas horas volví a casa para alistarme; con un lindo vestido negro de mangas largas y zapatillas de color dorado.
Todos mis amigos están aquí con sus respectivas familias, mi familia también esta aquí tanto conocidos como primos y tías que jamás había visto en mi vida.
Supongo que nunca debe faltar ese familiar que jamas habías visto, pero que siempre mandaba regalos.

La hora se aproximaba, menos de una hora y terminaría con mi infierno. Camine hacia el "escenario" improvisado que habían hecho para poner las bocinas para la música y tome el micrófono.

–Hola, buenas tardes, ¿Me regalarían un poquito de su atención? Este día es muy especial para mí y ahora que están todos reunidos quiero decirles algo...
Abuela, gracias por todo. Te amo mas que a nada en este mundo y se que a veces puedo llegar a ser muy fría contigo, pero tu no cambias conmigo. Me sigues amando como siempre lo has hecho, me apoyas en todo incondicionalmente y me encanta ir a tu casa a comerme tu comida y espero mi mamá no se moleste por esto, pero tu cocinas mejor, sorry ma pero es cierto y lo sabes —Todos rieron ante eso, yo solo Sonreí — y quiero decirte Abuela, que siempre te amaré y quiero que lo tengas bien presente siempre, pase lo que pase.
¡Dockrill!

–Aquí —Gritó parándose de la silla y haciendo saludo militar, todos reímos por eso.

–Tontuela, Mas que mi mejor amiga, usted señorita "No me gustan los colores oscuros" eres mi más grande pesadilla y a la vez mi mas grande bendición, tu eres realmente el amor de mi vida, eres mi amor eterno. Muchas veces el verdadero amor se presenta en una amistad y eso me sucede a mi, contigo y con Simón. Los quiero tanto a los dos, son lo mejor que me a sucedido en mi corta vida. Amo sus locuras y ahora no solo le hablo a Laura, Simón también te hablo a ti, gracias por esto —Dije levantando mi mano izquierda donde traía el brazalete en la muñeca y el anillo en mi dedo anular —Ustedes serán mi amor eterno.

Laura corrió hacia mi y me dio uno de sus abrazos mata personas, ambas con nuestras mejillas llenas de lágrimas.

–Chicos no crean que me olvide de ustedes —Señale a la mesa donde estaban mis otros 5 amigos —Daniel, se que de el grupo somos los que menos interactúan, pero quiero pedirte algo gigante. Quiero que CUIDES siempre a ese monstruo de colores raros. Ben y Soufian, no teman de mostrarse al mundo como realmente son, nosotros lo amamos por ser diferentes y se que ustedes cambiaran muchas cosas, ustedes me demostraron que solo se necesitan los amigos, la comida y buena musica para curar la depresión, Los amo y en mi corazón ustedes por siempre vivirán.
Jennifer y Jessie, chicas gracias por todos estos años a mi lado, haciéndome reír, haciéndome feliz.
Ustedes 7, son mi familia y mi tesoro mas preciado, a ustedes los llevare en mi corazón y mi mente siempre.
Mamá, te amo. Y se que te he tratado muy mal los últimos años, pero pronto sabrás el porqué, te amo.
Y ahora me despido de ustedes, "no es un adiós, es un hasta luego", eso suelen decir.
Nos vemos después.

Baje y cuando me dirigía a las escaleras Simón me tomo del brazo, me giro y me abrazó fuertemente.

–Eso fue hermoso, gracias —Se separo de mi y me vio a los ojos, sus ojos estaban rojos y un poco hinchados.
–Hable con el corazón, adiós Simón —Coloque mis manos en sus mejillas y le bese tierna mente la frente, una despedida.
–¿Porque siento que te estas despidiendo?
–Porque tengo sueño, estoy cansada y lo único que quiero es subir a encerrarme en mi cuarto a sumergirme en un sueño eterno.
–Bueno, nos vemos mañana, te quiero Adele.
–Y yo a ti Simón.

*Narrador Normal*

Mientras Adele subía a su habitación para por fin ponerle fin a su infierno, afuera un auto negro acababa de estacionar.
De el, bajo un hombre alto y bastante atractivo, Rubio, barbilla partida y ojos verdes que por nombre lleva Mark Evans.

Después de todos estos años, volvió con la intención de recuperar a su hija y contarle la verdad

*Habitación de Adele*

Adele, ya en su habitación fue hacia el baño y lleno la bañera hasta el tope, se dirigió hasta su coset y se vistió con el vestido rojo que había preparado días atrás, de debajo de la cama saco una caja verde de terciopelo que contenía las cartas escritas los días anteriores donde se despedía de todos y contaba la verdad.

Del fondo de la caja saco su antídoto, su remedio a todo su infierno y se dirigió al baño. Una vez dentro de él, coloco música y se metió a la bañera.

Mientras que Mark entraba en la casa, cuando todos lo vieron se sorprendieron, no esperaban volverlo a ver.

–¿Y tu que coño haces aquí? —Penny lo sabia muy bien, pero no permitiría que alejara a su hija.
–Tu lo sabes muy bien, ¡No te hagas la tonta! Cuando me fui, dije que volvería este día a contarle la verdad a Adele.
–¡Que verdad!
–La verdad el porque me fui, no me fui porque yo haya querido, yo amo a mi hija y algún día te ame a ti, pero ese amor se acabo cuando te ví con este idiota en nuestra cama.
–¡Eso es pasado! Largate y no vuelvas.
–Primero hablaré con mi hija, ¿Donde esta?
–Esta arriba, en su habitación.

Adele ya sumergida en el agua, tomo la navaja y se hizo; Uno Corte, Dos cortes, Tres cortes, cuatro. La sangre comenzó a fluir y a teñir el agua.
Se acostó en la bañera a esperar que su vida se apagara.

Simón estaba inquieto, sabia que algo no estaba bien con Adele, así que sin que nadie se diera cuenta. Corrió hacia la habitación de Adele y entro, no la vio por ningún lado, pero escucho musica en el baño y se escuchaba algo gotear.
Espero unos 5 minutos, pero mientras mas esperaba, el vacío que sentía en su estomago más aumentaba y la vida de Ella más se apagaba.



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