𝐎𝐂𝐀𝐒𝐎

1.El comienzo

Bella.

Ser madre para mi fue un descubrimiento por completo, aprendí deacuerdo al rumbo y mi prioridad siempre fue ser todo lo que ella necesita. No sabía que podía amar tanto a alguien, y honestamente se sentía horrible, como si pudiera matarme, lo cual era irónico porque si lo hizo.

Pero al tenerla y poder tener la oportunidad de verla crecer con el paso del tiempo, sonriendo, descubriendo por si misma el mundo, me enseña que ha válido absolutamente todo.
Cuando siento que no puedo más, la miró y me doy cuenta de que por ella soy capaz de luchar contra todo y contra todos. Aveces pienso en todas las cosas inosolitas que llevaron a su existencia, Edward y yo, nacidos con más de cien años de diferencia y todo lo vivido durante nuestro romance nos dio como consecuencia a lo más maravilloso del mundo, es la historia más bonita que el destino escribió en mi vida. Sin duda alguna mi familia es el mejor regalo que la vida me pudo dar, después de tanto tiempo me sentía completa, me sentía plena, Renesmee cada vez crecía más, y aunque el miedo me invadia sabía que no tendría que enfrentarlo sola, que contaría con el apoyo de Edward para aprender a sobrellevar aquello.

Era de día cuando escuché entrar a Renesmee a mi habitación donde nos encontrábamos Edward y yo. Tener las habilidades vampiricas lograba que fuera capaz de detectar a mi hija a más de un kilómetro de distancia y con el sonido de sus pasos podía notar que se encontraba en un debate interno sobre si estaba haciendo lo correcto al entrar a la estancia.
Cuando por fin se decidió la puerta se abrió lentamente dejándome ver a mi nerviosa niña.

-Hola, buenos días... quería comentarles que... que Jacob me ha invitado hoy a salir, quiero decir, a dar una vuelta y no estoy muy segura pero podríamos también ir de caza...-Estaba nerviosa, sabía que sería complicado convencer a su padre para que le permitiera salir.
Edward y yo nos quedamos viéndonos uno al otro, teníamos meses que los tres no salíamos a cazar juntos desde que había dejado de ser una niña.-¿Tienen algún problema si voy con el?
Nos quedamos callados por un momento.
Notaba como Edward se tenzaba ante la idea, era conciente de que a él le costaba un poco más asimilar la idea de que nuestra pequeña estaba creciendo, aunque siendo honesta yo también sentía la necesidad de tenerla conmigo por mucho más tiempo, y comenzarla a soltar no era nada sencillo, pero alguien debía ser el policía bueno ¿Cierto?.

-No claro que no, solo que tu padre y yo estuvimos pensado que quizás... sería lindo si salíamos los tres de casería, así como lo hacíamos cuando eras pequeña.

-¿Quieres decir hace unos meses?–Respondió en un tono burlesco- No te preocupes mamá, está bien, no hay problema, le diré a Jacob que quizás en otra ocasión.-Comento con voz amena mientras se encogía de hombros.

Me lo pensé por un momento, no me parecía correcto denegar aquella petición, cuando era niña Rene nunca me negó ninguna salida, lo mismo pasó con Charlie cuando era adolescente, a excepción a el castigo que gane gracias a mí pequeño viaje a Italia, pero esa era otra historia, y considerandos que Renesmee era tan buena niña hacía que el negar aquello no pareciera lo mas justo, o al menos eso creía yo, porque al parecer Edward y yo discrepamos en esta ocasión.

-No. Tienes razón, no hay ningún problema con que salgas con Jacob, solamente me gustaría discutir esto con tu padre.-Respondí tranquila intentando trasmitirle aquello con mis palabras.

-Lo entiendo mamá, creo que lo mejor sería dejarlos solos para que hablen.

-Gracias, ¿Acordaron una hora para verse?