Capítulo 7: "La decisión"

783 75 3
                                    

Una bella pelinegra se encontraba dentro de su habitación platicando con una peli azul.

Milk, tranquilízate, dijo Bulma abrazándola.

No quiero casarme con alguien a quien no ame, decía entristecida la pelinegra.

Entonces no vuelvas al castillo, quédate aquí conmigo, decía Bulma.

No puedo, papá vendría a buscarme por presión de la gente del consejo real, me encontrara y me volverá al castillo para casarme con un príncipe, como lo estableció el consejo del reino. Mi padre evitaría un matrimonio arreglado si yo volvía con Gokú, así él no sea un príncipe papá encontraría la forma de que sea aceptado por el consejo pero él no me recuerda, no me recuerda, decía sollozando la pelinegra.

Milk, pídele más tiempo a tú padre, para quedarte, tal vez con más tiempo puedas volver a enamorarlo, dijo Bulma.

¿Cómo si nadie puede verme sin el antifaz en la calle?, el consejo prohíbe a la familia real salir del reino, salvo los reyes lo hacen, los príncipes y princesas no, salvo que estén casados, decía Milk sollozando.

Milk, eres buena, en artes marciales, que tal si te quedas cerca de Gokú con otra personalidad por algún tiempo más, así averiguas si él siente algo por alguien, si no siente nada tú puedes tener opción de reconquistarlo, ya encontraremos al forma de que el te vuelva a ver como lo que eres Milk la princesa de Fri pan pero por ahora sería bueno que entres ha eses gimnasio como chico, así te sería más fácil acercarte a él y de paso me das una manito para darle celos a Vegui, decía Bulma.

¿Cómo chico?, dijo Milk alarmada.

Si, yo te caracterizare y te daré un nombre, serás mi amigo, yo me encargare de inscribirte en el gimnasio donde asiste Gokú, habla con tu padre y pídele quedarte un tiempo más, como chico puedes cercarte más a Gokú averiguar si te olvido, ¿por qué nunca volvió a verte?, ¿si tiene novia?, los chicos se cuentan sus cosas, además así también evitas que ese consejo te encuentre, dijo Bulma dejando pensativa a la pelinegra.

Casa de Gokú:

Un atractivo joven de cabello se encontraba acostado en su cama mirando al techo atormentándose con sus pensamientos.

¿Dónde te he visto?, ¿dónde?, ¿porqué sentí mi corazón explotar al ver lo bella que eres?, pensaba Gokú cuando unos recuerdos vinieron a su mente.

-.Recuerdo.-

Te, tengo, te tengo ja ja ja ja, pensabas que te escaparías de mi, decía un apuesto niño de cabello alborotado que sonreía con los ojos cerrados, sin darse cuenta de lo que había ocasionado, mientras se paraba de la pequeña laguna para salir de ella.

¿Quién eres tú?, mira lo que le hiciste a mi vestido, dijo la bella niña pelinegra furiosa, con las manos a la cadera, una vez que logro soltarse del agarre y salió del lago con la ropa escurriendo agua y toda empapada y sucia, haciendo reaccionar al niño que al verla se volvió más rojo que un tomate.

¡Disculpa¡ te confundía con pez gigante al que estaba queriendo atrapar, dijo el niño agachando la cabeza mientras sus mejillas aumentaban de color.

¿Ahora qué haré?, papá se enojara conmigo, creerá que lo hice al propósito decía la bella niña pelinegra mientras unas lágrimas rodaban por sus bellas mejillas sonrosadas.

¿Y si te lo sacas y lo lavamos?, dijo el niño en su inocencia haciendo sonrojar a la pequeña princesa.

No, como se te ocurre, yo no traigo más ropa, dijo la pelinegra.

"BUSCÁNDOLA"Where stories live. Discover now