Talento & Romance

Escena incómoda

Los chicos se miraron entre sí, debatiendo entre aceptar o no, al final movieron su cabeza en señal de aceptar hacer el ejercicio, si querían convertirse en grandes actores, los mejor será empezar desde ahora.

—Perfecto, el destino se convertirá en mi mano quien elegirá al azar a dos de ustedes como el profesional que soy—al terminar de decir eso, el mayor respiró hondo para luego cerrar sus ojos y meditar unos segundos, concentrado, como el maestro profesional que es, abrió sus ojos, alzó el brazo apuntando a su alumnado, contando hasta tres para decir lo siguiente con suma claridad y una mirada llena de determinación—de tin marín de dos pingüé, cúcara, mácara, títere fue, yo no fui, fue teté, pégale, pégale, al quien fue.

— ¡¿Qué?! —gritó Jade al ver que el dedo de Sikowitz terminó apuntándole a ella, tiene que ser una broma, ¿y se hace llamar profesional?

—Muy bien pequeña Jade, sube aquí y deslúmbranos con tu talento junto a la otra señorita que mi dedo del destino elegirá.

Con cara de estreñida, Jade subió al pequeño escenario, ¿cómo es que puede tener tan mala suerte? ¡¿Cómo?!

Sikowitz volvió a poner en marcha su profesionalismo, haciendo la misma canción del destino que elegirá a aquella dama suertuda de actuar con Jade.

El dedo de Sikowitz terminó en quien Jade menos quería.

—Oh Tori, te ha tocado enamorarte de Jade—dijo Cat con una gran sonrisa.

A Tori casi se le salieron los ojos de lo mucho que los abrió por semejante sorpresa, de nuevo le había tocado participar con Jade ¡Y en tremenda cosa!

Jade tampoco estaba imaginando flores, tener que actuar una escena romántica con Tori... ¿Es enserio? Hubiera preferido mil veces a Cat, ¿por qué el destino se empeñaba en hacerle la vida miserable?

Ya ambas en el escenario, desviando sus miradas evitando hacer contacto visual, estaban listas para recibir las instrucciones de su calvo maestro.

—Muy bien, Jade, tú serás la que siempre estuvo enamorada de Tori pero con miedo a revelar tus sentimientos, Tori tú serás más abierta así que tú le confesarás tus sentimientos a Jade y de paso ella te confesara sus sentimientos a ti.

—Je de acuerdo—dijo Tori con una sonrisa nerviosa.

—Como sea acabemos con esto—dijo Jade de mala gana.

—Y... ¡Acción! —el mayor dio la señal.

—Escucha Jade, sé que nos conocemos de hace ya mucho tiempo, pero la verdad es que no me siento igual que con los demás cuando estoy contigo.

— ¿Q-Qué quieres decir? —a Jade le estaba costando hablar ¡Que humillante!

—Hemos sido amigas desde hace mucho tiempo, y espero que lo que estoy a punto de decirte no afecte nuestra amistad, aunque si quieres dejar de ser mi amiga lo comprenderé.

—Sólo dímelo y ya—Jade quería acabar ya con esto, aunque más quería acabar con el cosquilleo que sentía en el estómago ¿qué rayos le pasaba?

—La verdad es...es que estoy enamorada de ti.

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Un silencio se formó en el salón, la mirada de todos estaban atentamente dirigidas a Jade quien tenía que responder a esa confesión.

Pero a Jade le estaba costando respirar, sus mejillas comenzaron a teñirse de un rojo claro, le estaba costando hablar, no podía creer que accedió a semejante idiotez, y el que Tori la mirara fijamente no estaba ayudando en nada, ella más que nadie quería terminar con la maldita escena, pero es que las palabras simplemente no salían.