Y Entonces Te Conocí

Capitulo 1

Clary

Me despierto en la nada, un cuarto obscuro, no veo nada, estoy sola en este infierno sin salida. Estoy sola, sola en la inmensidad de la nada. Y entonces lo veo, lo veo acercándose a mi, no se quien sea pero se acerca, me mira fijamente, -Clary-dice, no sé cómo sabe mi nombre nunca lo he visto en mi vida, y si lo hubiera hecho lo recordaría, quien lo olvidaría; fuerte, alto, guapo, como un ángel caído del cielo.
-Clary- dijo nuevamente, me parece tan familiar su voz.
-Clary, despierta.-
Me despierto, pero tan solo era mamá.
-Clary, despierta, es tu primer día de escuela, no querrás llegar tarde.-
-Si mamá en seguida voy.-
Me levanto el nerviosismo no me deja ponerme las mallas para poder ponerme la falda encima; me rompo una uña en el proceso. ¿Quien será ese chico en mi sueño? ¿por qué aparecería?
-¡Clary, apúrate que llegaremos tarde!
-¡Ya voy mamá!-
Me como el cereal lo más aprisa que puedo y me lavo los dientes, y me peino lo más rápido que puedo, una coleta alta estará bien. Subo a la camioneta y después mi mamá, va peinada con un pequeño moño alto, uno de sus rizos dorados se escapa de la liga y cae a un lado de su rostro, un rostro perfecto, cada milímetro de su piel está cubierto por una fina capa de maquillaje, tiene los labios rojo carmín y sus ojos tienen un sombreado aumado único que la hace ver hermosa.
-¿Lista para tu primer día?
Asiento con la cabeza aunque no estoy convencida de querer ir a la escuela, nunca fui muy sociable, prefiero hacerme amiga de mi música y mis libros ellos serán los únicos que me sean leales hasta el fin, nunca me traicionaran.
- Se tú misma y todo saldrá bien.-
- Si mamá ya me lo dijiste.-
-Pero hazme caso está ves.-
- Mamá, y si no voy hoy.-
-No, no, no, nada de eso; recuerda que tienes que subir el promedio y si no vas como lo vas a hacer.-
Mi mamá está tan obsesionada con las malditas calificaciones que a veces siento me voy a hundir en los malditos ejercicios de matemáticas; si, odio la me temática los números no se me dan para nada, en cambio las letras son mi pan de cada día.
-Esta bien mamá pero no prometo traerte la noticia de que tengo nuevos amigos hoy.-
Mamá pone cara de desagrado, normalmente soy muy optimista pero cuando se trata de la relación que tengo con otras personas siempre espero lo peor de mí y de los demás.-Bueno pero por lo menos intenta hacer un nuevo amigo, uno.-
-Lo intentare pero no te prometo nada.-
Mamá arranca la camioneta y va tarareando una canción, una de esas de los grupos de los ochentas que los adultos adoran. No sé cómo se las aprende tan rápido; mientras ella canta yo voy divagando con el chico de mi sueño no sé quién será pero me encantaría conocerlo.
-¡Hey, Clary! Despierta.-
-No estoy dormida-
-Ya llegamos princesa, tu nueva escuela-
Esto más que una escuela parece una internado, una gran plaza y en el centro al fondo un gran teatro que tiene el nombre de la escuela en la parte de arriba con letras talladas en la piedra de la cara externa de la pared que compone el techo del teatro: "Real Escuela de New England" es un nombre muy formal para decir: "Escuela Para Hijos De Papas Extremadamente Obsesionados Con Las Calificaciones Y El Promedio Alto"
es la estupidez más grande jamás escrita aunque mi mamá dice que todo es por mi bien la realidad es que lo hace para tener algo que presumirle a sus estúpidas amigas del trabajo; soy como ese trofeo que mamá está ansiosa de colgar en la pared, es lógico soy su "bebe" en sus palabras pero papá es más relajado el no me pude lo excelente; lo bueno está bien para el en lo académico pero en los deportes, ni si quiera lo excelente es suficiente su lente es: "¿Por qué hacer cien lagartijas cuando puedes hacer doscientas? Siempre exígete el doble de lo que te pidan."
Bajo de la camioneta y me cuelgo la mochila al hombro, con un suspiro largo y profundo saco todo en nerviosismo, mi pasado de queda atrás esta es mi oportunidad de tener un nuevo comienzo.
Entro caminando con la cabeza baja no quiero que nadie me note, pero es inevitable, las miradas curiosas de los grupos de amigos que me rodean se centran todas en mi pero al alzar la vista veo a alguien frente a mí.
-Hola soy Haley. Es un gusto, sobre las miradas curiosas, no te preocupes no te ubican y tratar de hacerlo pero para el receso ya no te miraran así-
- Mucho gusto soy Clary.-
-Vamos a tu locker Clary. ¿Cual es?
-Aquí dice G-A-8.-
-Ok. Es junto al mío por aquí-
Caminamos juntas mientras me explicaba cómo funcionaba la "cadena alimenticia de RENE" (si RENE son las Iniciales de la escuela, no pregunten)
-Llegamos.-
Mi locker estaba hasta arriba de un grupo de tres lockers apilados hacia arriba me quedaba muy cómodo y era espacioso.
-Bueno esto va así- dijo muy entusiasmada-tus cosas se quedan aquí durante todo el ciclo en la puerta y en el interior puedes pegar lo que quieras pero afuera nada, tú locker tiene que llevar candado, preferentemente de combinación los de llave son muy aburridos, tus cosas de las primeras cuatro horas van en la mochila el resto se queda; procura mantenerlo ordenado, se te harán más sencillos los cambios.
-Ok.
-Este es tu horario- dice extendiendo un papel con una cuadrícula que tenía las clases y el horario en que me tocarían - No lo pierdas .
-Bien.
- Ahora vámonos, toma tus cosas y vamos.
Tomo mis cosas y las meto en mi mochila. Caminamos por los pasillos mientras Haley me habla sobre diferentes cosas y entonces lo vi.
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Erick

Yo estaba perturbado, estaba con Jason, Ian y Charly por nuestros lockers; ese sueño, esa chica tan hermosa como un ángel, por qué verla en un cuarto oscuro, y entonces la vi, caminaba con Haley pero nunca la había visto antes de ese día; era más hermosa de lo que la había soñado, era el ángel más hermoso que jamás había visto; cruzamos miradas y ella siguió su camino, se me olvido todo. Sus ojos, sus ojos eran dos grandes soles que me hipnotizaron no los podía sacar de mi cabeza.
- ¡Erick!- Jason me hablaba -Te estoy hablando bro.
- Si, lo siento ¿qué sucede?
- ¿Ya viste a la chica nueva?
- No, no la he notado.- Mentí. Claro que la había notado, había soñado con ella ¿Cómo? No lo sé. Pero ahí estaba tan hermosa y tan misteriosa.
La campana sonó, teníamos que ir a clase. Cívica, con Janin, como odio A esa señora....