AMIGOS CON DERECHOS

II

SANS

Narra Frisk:

- ¡Hey! ¿Que hay niña? – Me saludó el chico que me había salvado esta mañana, como siempre, con una gran sonrisa de lado.

- ¡Hola! – Lo saludé riendo – Oye... No me dijiste tu nombre – Dije algo nerviosa.

- Oh, si, soy Sans... Sansacional ¿No crees? – Reía del chiste malo que acababa de contar él mismo.

No pude evitarlo y reí junto a él, estábamos parados en la puerta del Instituto, al parecer estábamos esperando a alguien.

- ¿A quien esperamos? – Me atreví a preguntar entre risas aún.

- A mi novia – Seguía riendo.

- ¿Novia? ¿Cuantos años tienes? – Estaba sorprendida, no parecía tener edad para tener novia.

- 16 ¿Que sucede? – Se extrañó un poco por mi pregunta.

- Oh... N-Nada, solo que... Eres muy inmaduro para tener esa edad – Volví a estallar en risas mientras él arrugaba la nariz, fingiendo estar molesto.

- Oye... Y tu eres muy madura para tener... Em, no lo sé ¿10 años? – Ahora yo fingía enojo mientras él estallaba en risas.

- Tengo 13 – Le saqué la lengua como una niña pequeña y caprichosa.

- Uy~ Lo siento anciana – Se burlaba mientras me cargaba como si fuese un bebé.

- Oye, ¡No soy un bebé! – Me enojé.

- ¡Claro que lo eres! – Explotaba en risas mientras cambiaba mi posición para que quedara en su espalda, no voy a mentir, ¡Era divertido!

En ese momento de risas, una chica de pelo anaranjado, ojos grises, pecas en su nariz y mejillas, piel clara y que llevaba un lindo vestido amarillo se acercó a nosotros, con una expresión de confusión por como nos encontrábamos Sans y yo.

- Hola, linda – Dijo Sans antes de besarla en los labios mientras yo aún estaba en su espalda; desde allí arriba, pude ver como la novia de él no cerró sus ojos, sólo los rotó hacia un costado, como si no le gustara besarlo.

Sans, obviamente no lo notó, ya que él si cerró sus ojos en el beso. Pero yo vi cómo ella no lo disfrutó, era como si fuese una obligación.
Estaba por decirle algo pero luego racioné con mi consciencia, no quería tener problemas con ellos. Sans se tendría que dar cuenta sólo de que su relación estaba teniendo problemas.

- Hola Sansy~ – Le sonrió. ¿Acaso esa era una sonrisa falsa? – Y... ¿Quien es ella? – Apuntó hacia mi con su dedo índice, a lo que yo le saludé con la mano desde allí arriba, no quería bajar y Sans no tenia intenciones de hacerlo, era divertido para ambos.

- ¿Hum? Oh, ella es Frisk, es mi amiga – Dijo entre sonrisas y pequeñas risas – ¿No Frisk?

- Sip – Hice una cara tierna e inmadura.

- Tsk~ – Parecía disgustada por el tema – ¿No están grandes para ese juego de niños? – Se hizo la madura, haciendo referencia al juego del caballito.