DANGEROUS LOVE || MARICHAT +15 || (En Edición)

Capítulo 10

- Entonces ¿Qué dices Bugaboo? - Dijo el rubio aproximándose lentamente.

- Yo... Eh, es que... P-por ¿por qué no te consigues mejor a una prostituta, maldito gato? - Se cruzo de brazos y volvió a mirarle con la frente en alto.

- Es que yo no quiero a una prostituta con pechos operados y seguro una enfermedad venérea... - La acorraló contra la pared.- Yo te deseo solo a ti.- ronroneo.

Ahora villano y heroína se encontraban a solas en media noche, de nuevo, reencontrándose a petición del felino que le había propuesto un trato bastante descabellado para su gusto, pero que según el chico, si ella cumplía con su parte toda París estaría en total tranquilidad.

- Pues, prácticamente me estas tratando cómo una. Darme algo a cambio de sexo.

Así como ella dijo. El gatuno muchacho le pidió una noche con él, dejarle hacerla suya y con eso él dejaría de amenazar su ciudad.

Pero ella no estaba segura, tenía valores que negarían la aprobación de esta propuesta, esto era totalmente inmoral y una locura. 

Sin embargo... Había ciertos puntos por los que ella no había dicho no directamente.

El joven parecía estar bastante bien desarrollado, su cuerpo mostraba bien ser la razón de tal agilidad, destreza y fuerza; a pesar de que la máscara cubría su identidad, podría saberse que quien estuviera debajo de esta era alguien bastante agraciado; agregando que era un muy buen besador: después de los besos, la joven no podía evitar pensar en ello, en el sabor de sus labios, el movimiento urgente y rápido, en su lengua experta... Era algo que no se permitía pensar pero aun así su mente jugaba con ella y se lo recordaba aun estando en su forma civil, haciéndola experimentar sensaciones extrañamente gratas; su cercanía le ponía de nervios y, por más que negara, su voz ronca le provocaba una leve excitación.

- Vamos, no seria prostitución seria... Amm... ¡No te daré dinero!

- ¡Y aunque me lo ofrecieras no lo aceptaría gato idiota! Y a todo esto ¿por qué yo?

- ¡Por qué eres tremendamente sexy! Podremos odiarnos a muerte, pero debes admitir que entre nosotros existe una atracción.- se acerco de forma que ambos sentían la respiración del contrario. - Admitelo Ladybug, te encantaría tenerme entre tus piernas...

Y con la velocidad de una bala, la joven dio una fuerte bofetada en su mejilla derecha. Este por inercia retrocedió.

- Ni en un millón de años. - Hablo con aplomo.- No confundas los besos que te he dado para bajar tu retaguardia con atracción. Creeme que jamás he hecho un sacrificio tan grande como el compartir mi saliva contigo, maldito mujeriego de mierda.

- Grrr, que boquita tan hermosamente sucia, My Lady.- Sobó su mejilla sin quitar ese semblante pícaro.

- ¡No puede ser! ¡Eres de lo pero! Eres... Eres... ¡AGH! - Grito exasperada. - Me voy, digo no a tu hipótesis, digo no a tu propuesta y digo: ¡Jodete Chat Noir!

Y totalmente molesta salio por la ventana del cuarto de motel.

« Eres todo un genio del amor» se burló Plagg.

~•~

- ¿¡CÓMO SE ATREVE?! - grito la azabache llena de indignación mientras caminaba de un lado a otro por su habitación. - ¡Maldito sinvergüenza! ¿Es que acaso me vio cara de puta? De imaginar que malinterpretaría esos besos, mejor le daba de bofetadas hasta dejarlo inconsciente.

- Bueno, es que lo besaste y muy apasionado al parecer. Sin mencionar que una vez casi te desviste. - dijo la pequeñita bajando el tono de voz en cada palabra al darse cuenta de la mirada fulminante por parte de su portadora.