Vientre Alquilado ☆LS⭐

Capítulo XII

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~*~

Louis caminó por la entrada de la casa de alquiler, tocó la puerta de la oficina de Martha y entró en cuanto ella se lo permitió. Se acercó a su escritorio y ella no levantaba la mirada.

"¿Porqué había tanta insistencia en que viniera?" Preguntó mientras se sentaba frente a ella.

La mujer levantó su vista y la clavó en el chico. Se veía molesta, demasiado para ser exactos. Si fuera posible echaría humo por la cabeza, como en las caricaturas.

Abrió uno de los cajones de su escritorio, metió la mano en el y sacó una carperta. La deslizó sobre la mesa hacia Louis, pero no quitó su mano de encima.

"Llegaron los resultados de tu último chequeo, me llevé una gran sorpresa al verlos." El cobrizo frunció el ceño, realmente no entendía que era lo que estaba pasando.

"¿A qué te refieres Martha?" Preguntó. Ella alzó su mano dejando el paso libre a la carpeta, señaló esta con sus ojos para que Louis la revisara y así lo hizo.

Abrió ésta y comenzó a revisar las hojas. Tenía los niveles de sangre bien, colesterol, triglicéridos, todo estaba en perfecto balance.

Siguió revisando, hasta llegar a la última hoja. A cada madre de alquiler se le debía hacer una última prueba de embarazo antes de que se llevara a cabo la inseminación. Como regla que marcaba el protocolo.

Leyó cada una de las palabras del formato, pero sus ojos se abrieron cuando leyó la última palabra: positivo.

Levantó su mirada hacia su jefa, balbuceos provenientes de su boca era lo único que Martha podía escuchar. Louis sentía un nudo en la garganta, ¿pero qué demonios?

"¿Cómo vas a explicarme esto?" Louis negó aun atónito. Sentía el alma pesada. Tenía que ser un error, debía ser un error.

"Martha esto debe estar mal, me hice una prueba de embarazo hace unos días." Estas palabras hicieron que la chica golpeara la mesa con ambas manos.

"¿Ya tenías sospechas de esto?" Preguntó en un grito. Él asintió. Martha llevó ambas manos a su cabello y tiró de él mientras negaba. "¿Porqué demonios no viniste a verme?" Preguntó.

"Tenía miedo, tenía miedo de que reaccionaras así." Ella simplemente negaba asustada. El maldito contrato.

"Es la segunda vez, que me haces esto." Susurró y él bajó la mirada.