Memoria 1

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Mi mejor amiga es la peor de todas, en serio, está siempre ocupada con sus otras miles amigas y con sus miles de ligues. Es bella y talentosa, pero creo que debería de ser más prudente al momento de elegir sus amistades. No tengo problema con que le hable a medio mundo, el problema es que siempre me deja sola. Prácticamente me la paso sola, hasta los demás lo saben, me dicen: "otra vez fue Nelly, ¿cierto?", a lo que yo solo muevo la cabeza arriba-abajo con una cara de "a esto estoy condenada".
Mientras Nelly vivía su vida al máximo y cambiaba de novio cada 2 semanas, yo era una romántica empedernida. Me encantaban las películas de amor, Crepúsculo la saga, Bajo la misma estrella, Si decido quedarme, Yo antes de ti, Mi primer amor, ABC del amor, Querido John, Diario de una pasión, entre muchas otras más. De la misma manera, leía libros sobre parejas románticas que iban dedicados a personas que hemos fracasado siempre en el amor; los leía sobretodo por esto último. Y por último, pero no menos importante, amaba escuchar música con letras cursis, en cualquier idioma, de cualquier género musical; amaba este detalle de la vida tanto porque, mientras la música sonaba, yo me imaginaba con algún personaje de alguna historia que me volvía loca.
Es así como alejaba a cualquier chico de mí. No tenía mala fama en la escuela, al contrario, tenía una vibra muy alegre y todos me idolatraban por mis babosadas; una vez hasta a la directora hice reír. Por lo tanto, ¿quién querría tener a su lado, como novia, a una chica tan divertida y buena onda? Suena obvio, ¡cualquiera! Pero la realidad era otra, una vez que me conocían, que sabían que mi comida favorita no tenía nada de que ver con pizza, sushi o hamburguesa, que descubrían, sobre todo, que era una obsesionada por los detalles románticos, era ese el momento indicado para dejarme de hablar. Tenían un grandioso don para aparentar que yo era una desconocida, ojalá pudiera yo tener ese don, así le podría hacer a mi mamá cuando las circunstancias me convenieran.
El caso es el siguiente: jamás me enamoraré de alguien real, de carne y hueso. Me he declarado incapaz, y Nelly lo acepta, supongo, porque siempre me dice "y dale con eso, mañana mismo te traigo 8 gatos para que comiences tu colección".

Memorias eternasWhere stories live. Discover now