Obsesionado Con El Plan (Shawn Mendes Y Tu) *EN EDICIÓN*

Capítulo 25

(_____'POV)

Cuando entré a casa de Shawn me fui directamente al baño, me retorcía por el dolor de mi estómago.

Mi vi en el espejo, tenía pequeños cortes y zonas las cuales me dolía con solo tocar, así que queda claro que tendré un feo moretón por la mañana.

Volví a mi cama lentamente y me recosté, algo encorvada pero de todas maneras me iba a doler.

Comencé a pensar en el beso, o mejor dicho los besos que nos dimos con Shawn, y como boba empecé a reír tocando mis labios. Pero al recordar a Sammy mi expresión cambió a una más bien triste.

Lo que quedaba de noche me le quedé pensando en las cosas que debería hacer.

Me estaba invadiendo el sueño, por lo que decidí meterme bajo las sábanas, no sin antes ver mi celular.

7:32 AM.

No puede ser, como.

Dejaré eso de dormir para más tarde.

Al sentarme en la cama, el dolor de mi estómago se agudizó, no creo poder pararme o caminar. Pero si no lo hago le deberé largas explicaciones a Karen, Manny, Aaliyah, Ali, Hayes... mejor me paro.

Me paré lentamente y me puse mi chaqueta. En ella había 5 dólares. Así que se me ocurrió ir a comprar unas pastillas a la farmacia para aliviar mi malestar.

Preferí salir lo antes posible para evitarme preguntas a la vuelta.

Caminé hacia la escuela, ya que al lado de esta hay una calle con varios locales. Sinceramente no sé si hay alguna farmacia 24 horas o algo por el estilo pero lo tendría que averiguar.

Cuando llegué a aquella calle me di cuenta que en uno de los carteles que colgaba de un local decía nada más ni nada menos que: Farmacia 24 horas. Genial.

Apresuré el paso para entrar a la farmacia pero como iba con la cabeza gacha no noté que alguien estaba saliendo de ahí por lo que generó que chocáramos y botara lo que llevaba en la mano. Me di cuenta que era un chico. Ayudé a recoger las cosas que se cayeron.

-Disculpa, aquí ti... no puede ser.- El chico me miró de vuelta y quedamos con la misma cara de asombro.

-¿_______? ¿Qué haces aquí?

-Emm... yo... aquí vivo. ¿Qué haces tu aquí?

-Vine a visitar a unos tíos y primos que se mudaron aquí hace poco. Me quedaré unas semanas.- No puede ser me acababa de topar con Fred Johnson.

-Oh, estupendo.- Dije rodando los ojos y usando mi tono más sarcástico posible. No puedo creer que en menos de una semana de haber empezado la escuela Fred ya se haya dado el lujo de viajar fuera del país.

-Ayer, antes de abordar el avión, Kate me dejó claro que no le interesa nada conmigo, es una pena. Me preguntaba si quisieras salir conmigo algún día mientras esté aquí en Canadá.-No, ahora no por favor.

-Yo... no puedo, estoy muy... enferma, sí, enferma.- Dije empezando a hacer cosas raras con las manos.- Estoy con una tos horrible y es contagioso.- Empecé a toser fuertemente cerca de la cara de Fred, lo que hizo que se alejara lo suficiente.

-Pues, es una lástima.- Dijo sin ningún rastro de lástima.- Nos vemos, adiós.- Por fin se va.- No olvides llamarme.- Dijo volteando y apuntando su celular. Yo simplemente asentí totalmente incómoda y por fin se fue. Así que entré a la farmacia.

-Hola, ¿Tendría usted unas pastillas para aliviar dolores?- Dije lo más amable posible.

-¿Dolores menstruales, musculares, por heridas, golpes, hematomas, irritación?- Hice una mueca extraña.